08.

2.6K 180 62
                                    

Un año después...

Muerdo su labio levemente mientras de nuevo empezábamos a reír, Sebastián sonríe mientras ambos nos empezamos a mover al ritmo de la música, miro sus ojos, demonios, si me gustaba demasiado, y podía decir que desde hace un año que es mi novio me había olvidado todo el mal que cualquier persona me pudo haber hecho, y me sentía satisfecha.

Todos habíamos cambiado, yo ya no era de las chicas que se quedaban en su casa un día de fiesta, de hecho ahora estaba en una con Sebastián.

Seguíamos saliendo los cuatro; Kevin y Nailea y Sebas y yo, todo era increíble la amistad que habíamos formado era maravillosa. Por otro lado mi relación con Frida, Edson y Paulo había mejorado después de aquel inconveniente que había tenido. Había llegado a la conclusión que era demasiado estúpido relacionar a ellos tres con Diego, sí, antes convivíamos los 6 casi todos los días, pero había aprendido a liberar todo aquello relacionado con él.

Por lo que sabía, Diego seguía comunicándose con los tres; Paulo, Frida y Edson, evidentemente conmigo no, pero eso ya no me afectaba y cuando alguno decía "él está bien, manda saludos, dijo que nos hecha de menos" con eso me bastaba.

Con Mauro no había perdido contacto alguno y eso me agradaba demasiado, igualmente siempre me preguntaba por mis padres, por los chicos y yo también, preguntaba por sus padres, cómo iba todo con el fútbol y una que otra vez por su hermano.

-¿Tomamos algo? -Sebas dice en mi oído, asiento tomando su mano, él besa mi mejilla para dirigirnos hacía la cocina.

Empiezo a reír al ver a Frida y Paulo besándose, Sebastián se une a mi risa mientras él sirve las bebidas.

-Hay habitaciones arriba-dice Sebas mientras me extiende la bebida, le sonrío mientras la tomo en mis manos.

-Lo sé, pero Paulo no quiere ir.

Dice Frida causando la risa de nosotros, Paulo niega riendo mientras se sienta enfrente de nosotros.

Frida saca un cigarro para llevarlo a su boca y encenderlo, para segundos después expulsar el humo.

Paulo niega mientras lo ve, pero lleva su vaso de alcohol mientras lo veía.

-Que no se note que no le gusta que fumes.
Digo mientras me sentaba.

-Paulo y yo se lo decimos siempre- Sebastián rueda los ojos, la puerta de la cocina se abre dejando pasar a unas chicas que caminaron hasta la bebida para servirse en unos cuantos vasos.

-Lo sé, pero vamos solo es uno, no lo hago siempre ¿Verdad?

-Verdad, pero...- Paulo ríe - Bien dame uno.

-Mientras que sea uno, yo te doy-dice esto último con una sonrisa en sus labios, a los segundos lo entendemos, estaba más que dicho, Frida tenía unas cuantas copas de más.

Frida le extiende un cigarro a Paulo, él lo toma, ambos miran a Sebastián, él ríe mientras toma uno de la mano de Frida, niego mientras los tres sueltan el humo al mismo tiempo.

-Fingiremos que no estas-dice Paulo tirándome una servilleta que estaba a un lado de él, cayendo en mi rostro y revolviendo mi cabello.

-Fingiré que no hiciste eso. - Miro a Frida- ¿Puedo? -señalo el último cigarro que tenía.

Ella me mira para segundos después ver a Sebastián pidiendo aprobación.

- No quiero perder a tus papás y que se enteren que estando conmigo fumas, nena - Sebastián se sienta a mi lado - prueba con este, y si te gusta puede Frida darte el último ¿De acuerdo?, se que no soy nadie para prohibirte cosas o decir que está mal que fumes, solo mírame, sé que eres una mujer independiente pero amor, jamás has probado el cigarro, solo quiero que no pase algo malo.

AM | diego lainez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora