Dєѕαfíσѕ dєl Dєѕtinσ || Chat Noir/Adrien × Lectora

《Gorizilla (Parte 2)》

Es el mismo capítulo que el anterior pero desde el punto de vista de Adrien; no tenía pensado hacerlo, pero una lectora comento esta idea y dije ¿Porqué no? y aquí estamos -w-

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Adrien

—¿Vas a llamarla o te quedarás ahí cómo si nada?—preguntó mi kwami ya irritado de que siga mirando el teléfono sin hacer nada.

Estaba arrepentido, arrepentido de todo, de gritarle a _________, de llevar a Marinette a nuestra cita y sobre todo, habérselo dicho en la cara. Ese recuerdo me perseguía y la culpa no hacía más que consumirme.

Quería disculparme con ella ¿Qué me detiene? El miedo, miedo a que esté enojada, miedo a que la haya lastimado y miedo a que termine nuestra relación por comportarme como un idiota.

Suspiré, extendí mi brazo hacia mi teléfono, pero justo antes de tomarlo alejé mi mano nuevamente, Plagg hizo una mueca de cansancio—¿Y si termina conmigo?—murmuré preocupado.

Él rodó los ojos—¿Prefieres que termine contigo por creer que eres un insensible y orgulloso que no se arrepiente de nada?—preguntó y yo negué rápidamente—Entonces será mejor que arregles las cosas niño—dijo y me tiró el teléfono.

Lo sostuve en mis manos unos momentos y marqué el número de mi novia, escuché el tono de llamada sonar y sonar, pero no contestó, lo cual pudo ser por tres razones:

1. Está enojada conmigo y no me quiere contestar.

2. Sigue durmiendo ya que hoy no hay clases.

3. Lo tiene en silenciador como siempre.

Espero que sean las últimas dos opciones...

Negué con la cabeza para olvidar la primera opción, mi mente es un peligro cuando estoy preocupado. Me levanté del sofá y me dirigí hacia la puerta de mi habitación.

—¿A donde vamos?—preguntó Plagg, sentándose en mi hombro antes de que abriera la puerta.

—Hoy es el último día en el que estará Solitude en el cine, es una película en la que actúa mi madre—expliqué.

Miré la foto que tenía de ella en mi ordenador, me dirigí a este ya que olvidé apagarlo.

—Mi plan era llevar a ________ conmigo para ver la película, pero después de lo que pasó... no pude invitarla—apagué el ordenador—No hay nadie más con la que me gustaría ir, sólo ella—dije y salí de mi habitación antes de que Plagg dijera que estaba siendo muy cursi.

Paré mi andar frente a la puerta que daba a la oficina de mi padre, debía pedirle permiso antes.

Respiré hondo y toqué la puerta con algo de temor, mi padre es intimidante—Adelante—oí su voz darme permiso de pasar.

—Padre, hay algo de lo que quería hablar contigo—hablé con la voz levemente apagada, puse mis manos detrás de mi para simular seguridad—¿Me das unos minutos de tú tiempo?—pregunté, mi intento de aparentar seguridad resultaron nulos, mi voz temblaba levemente.

—Sí, por supuesto—respondió sin quitar la mirada de su ordenador en el que estaba verificando sus diseños.

Me sorprendió su respuesta—¿En serio?—sonreí levemente.

Él asintió—Le diré a Nathalie que te avise en cuando esté disponible—respondió aún si dirigirme la mirada.

Mi sonrisa se borró (Debí imaginarlo) suspiré—Entonces ya será muy tarde—murmuré.