¡¡¿¿Cómo qué nuestros hijos??!!

Capítulo 7- ¿No puedes dormir?

Hola a todos, ¿como habéis estado? Porque yo estaba en un dilema con este capítulo, ya que se me habían ocurrido dos ideas, pero al final he decidido hacer mi segunda idea, y dejar la primera para el próximo capítulo.

Espero que os guste el capítulo, lo he escrito asta creo que con más ilusión que el anterior, cuando lo empecéis a leer creo que me comprenderéis.

Sin más dilación, que empiece el capítulo.

— ❌💤 —

Katsuki se había levantado a las 4:00am, ya que no conseguía conciliar otra vez el sueño, así que decidió ir a la cocina, para tomarse un vaso de leche. Lo que no esperaba era encontrarse allí a Izuku.

— Ahhh, hola Kacchan —saludo Izuku algo nervioso, para volver a mirar el vaso de leche que tenía entre las manos.

— Hola Deku —se limitó a decir el cenizo, para dirigirse a la nevera.

Katsuki después de calentarse la leche, se sentó en la gran mesa a tres sillas de donde estaba Izuku. Se había formado un silencio bastante incómodo e intenso entre ellos, así que el peliverde decidió romperlo.

— ¿No puedes dormir? —pregunto Midoriya sin ni siquiera aparta la mirada de su vaso, porque sabía que se iba a poner más nervioso.

— He dormido durante un rato Deku, pero no podía volver a dormir, aún ahí cosas que aclarar nerd —le resolvió la duda sin apartar la mirada del vaso también.

(Con el paso del tiempo su relación había mejorado mucho)

— Lo mismo que me ha pasado a mí y, supongo que una de esas cosas es... —no estaba muy seguro de que palabras utilizar.

Aunque Katsuki sí comprendió rápidamente a lo que se refería, por eso decidió ayudarlo un poco.

— Sí Deku, una de las cosas se podría que decir que es lo "nuestro", —dijo haciendo comillas en el aire, él tampoco sabía muy bien como clasificar eso—, pero esto lo tenemos que hablar también con Todoroki.

— Ya lo sé Kacchan, tenemos que hablarlo los tres juntos, y cuanto antes lo hablemos mejor —se levanto a dejar el vaso en el fregadero.

Se giraron rápidamente a mirar a la puerta, al escuchar un toc toc.

— Entonces hablémoslo ya ¿no? —propuso Shoto, para entrar en la cocina.

— ¿Nos estabas espiando? —se sorprendió Izuku.

— Iba a entrar, pero al escuchar mi nombre, preferí ver primero de que se trataba. —respondió simple el mitad albino.

— Si bueno, ¿vamos hablar del tema? —dijo para levantarse de la silla, los otros dos asintieron—. Entonces seguidme, aquí nos pueden espiar los cotillas de los extras.

Siguieron a Katsuki sin decir nada. Llegaron hasta un árbol bastante grande, en el cual Katsuki se sentó y se recostó, los otros dos también se sentaron, pero en frente de Katsuki, formando un triángulo.

— Supongo que desde aquí no nos escucharán ¿no? —supuso Izuku, que empezó jugando con el césped, por los nervios.

— Desde aquí nadie nos puede escuchar, ni espiar, sin que nos enteremos. —les aseguro el cenizo.