Mi Dulce Adicción (Kanon X Milo)

Capítulo 23

Camus al escuchar cada palabra de Degel no pudo evitar colocar su mano asombrado a sus labios, jamás se hubiera imaginado que el tío de Saga y Degel tuvieran una historia de amor... Una mucho antes que conociera a su papá Kardia.

Lejos de molestarse, Camus tomó aquella noticia para bien, después de todo Degel se quedaría solo cuando pase la boda y eso le partía el corazón desde lo más profundo de su ser.

- Entonces... Deuteros fue tu primer pareja.

- Así es, lamento no haber hablado de esto años atrás. De hecho cuando hablé con Deuteros incluso pensó que tu eras su hijo.

Camus comenzó a reírse ante ese comentario- Imagina que así hubiera sido, no podría estar con Saga.

- ¿No estás molesto con lo que te dije? - Preguntó Degel al darse cuenta que su hijo no le recriminó algo sobre su pasado.

- Claro que no, además... Estás en tu derecho de hacer tu vida nuevamente. Deuteros es una maravillosa persona, incluso es más tranquilo que Aspros, sé que te cuidará muy bien.

De manera repentina el timbre de la casa sonó, Degel fue quien caminó hasta la puerta para poder recibir a la persona que había llegado, Camus terminó de retirarse toda la mascarilla que tenía en su rostro, incluso el tiempo de espera se había excedido después de la plática tan amena que tuvo con Degel.

- Camus... Acaba de llegar esto - Degel le entregó la misma caja que recibió en la puerta momentos atrás.

No se esperaba un detalle de alguien, quizá solo en la boda pero hoy justamente en la noche no.
Con cautela comenzó abrir aquel paquete, grande fue su sorpresa al darse cuenta que era una gargantilla de oro con un dije de su signo, dentro de la misma caja venía una nota escrita por alguien de la joyería.

Señorito Camus, por medio de este presente me alegra la noticia de su boda donde podrá unir su vida con la persona que complementará su ser.
Su respetable padre, el señor Kardia era un amigo mío muy querido por todos nosotros, siempre anheló el día que su único hijo diera un gran paso en su vida y es por ello que este detalle lo adquirió cuando usted era un pequeño infante.
Mes a mes pagaba una pequeña cantidad para poder cubrir esta compra y así esto que llegó en la caja fuera el regalo en ese día tan especial cuando llegara el momento indicado.
Conforme pasaban los años, su padre gustoso pagaba la cantidad que habíamos acordado, pero aquel lamentable accidente le arrebató su vida.

Sé lo importante que es el gran sacrificio que su padre quería para usted, es por ello que me tomé el atrevimiento de entregar yo misma el regalo que Kardia había escogido para su querido hijo.

Por parte de mi joyería corre el resto de lo que faltaba por liquidar.
Deseándole felices fiestas por su matrimonio, que tenga una vida próspera y mis más sinceras felicitaciones...

Calvera.

- Mi papá...

Camus se quedó sin palabras, sentía un nudo en la garganta después de leer aquella líneas. Ese detalle de la joyería su padre lo tenía previsto desde hace muchos años atrás.
En el rostro de Degel corrían unas ligeras lágrimas en sus mejillas cuando terminó de escuchar aquella líneas que su hijo leyó.

- Ahora entiendo... Porqué Kardia siempre destinaba una parte de su sueldo en una cuenta que yo jamás tuve el atrevimiento de preguntarle - En ese momento Degel tomó aquella gargantilla y de manera tierna se acercó a su hijo para colocarla con sumo cuidado.

- Después de todo esa voluntad de Kardia está aquí presente...

Ese gran día finalmente llegó, este día tan especial donde Saga uniría su vida junto a Camus tenía a muchos de los invitados corriendo desde muy temprano.
Algunos por prepararse en algún salón de belleza, otros más tratando de buscar sus mejores prendas para poder lucirlo en la boda.
Incluso Shaina se había despertado muy temprano ya que la cita de la ceremonia se celebraría al medio día en la casa de los gemelos.

Y Milo...

Aún no podía decidir si era muy necesaria su presencia, en toda la noche no pudo descansar y eso se debía a todo lo que aún guardaba por Camus.
Sabía que no toleraría ver al amor de su vida frente al altar junto con su pareja, es lo más incómodo que cualquiera pueda vivir.

- Le puedo decir a Camus que me enfermé y asunto arreglado - Se dijo a si mismo Milo mientras se dejaba caer en el colchón de su cama.

Después dirigió su mirada a su clóset donde colgaba el traje que compró por petición de Kanon, no quería asistir a la boda pero tampoco se le hacía justo faltar a la fiesta cuando el gemelo menor hizo su gran esfuerzo por ayudarlo como lo ha hecho hasta ahora.

- Qué más da - Susurró Milo sin muchos ánimos, tomó su toalla y parte de las prendas que usaría después de darse una buena ducha.

En esos mismos momentos Aioria se encontraba golpeando desesperadamente la puerta del baño, su hermano mayor llevaba alrededor de una hora aproximadamente bañándose y arreglandose para la boda.

- ¡Aioros, deja un poco de agua para mi!

Pero su hermano no le respondía, mientras se duchaba, Aioros le gustaba poner un poco de música para poder relajarse mientras se bañaba y con la música en volumen alto no escuchaba los reclamos de su hermano menor ni los golpes de la puerta.

- ¡Aioros llevo prisa!... ¡Necesito ir a recoger a Shaka todavía!

Pero por más que intentaba gritar con todas sus fuerza, su hermano no abría la puerta.
Desanimado se retiró de la puerta del baño y tomó su celular para poder redactarle un mensaje a Shaka y avisarle que tardará un poco en pasar a su casa a recogerlo.

A los pocos minutos salió Aioros del baño dejando una gran cantidad de vapor dentro del lugar.

- Ya era hora de que salieras Aioros - Respondió Aioria tomando sus pertenencias y su toalla para entrar al baño.

- Debo pasar por Shura, tengo que ir muy presentable... Si tu necesitas bañarte antes que yo sabes que debes levantarte temprano.

- Pero... Acabo de despertar, no se vale - Se quejó el menor de los hermanos molesto.

- Ayer en la noche no decías lo mismo... Preferiste desvelarte mirando memes en vez de dormir - Le contestó Aioros en un tono burlón alejándose de la entrada del baño.

- Eso no es cierto - Se quejó molesto Aioria cruzando los brazos.

- ¿No? Si pude escuchar como estabas risa y risa con los memes de las redes sociales y a las dos de la mañana jugando ese mentado juego del free fire... Porqué te oí que hablabas con Death que disparara allá y que las gemas.

Aioria no supo que decir, lo había descubierto su hermano... Aunque su debilidad del menor era que si se desvelaba al día siguiente estaba con un humor de los mil demonios.

- Y más te vale que al rato en la fiesta te controles, porqué por no descansar bien el alcohol se te subirá más rápido y ya conozco tus locuras junto con los demás.

Después de darle un sermón como todo buen hermano que se preocupa por su querido leoncito se dio la media vuelta para poder seguir arreglandose para la fiesta de hoy.

💖❄💖❄💖❄💖❄💖❄💖❄💖❄💖❄💖❄