𖤜 Show Me | ᶜʰᵃⁿˡⁱˣ

Capituló 08: Bang y Lee.

La parte que, según Christopher, era la más complicada en todo el proceso de estar con Félix, ya la había superado, pero ahora faltaba cumplir uno de los retos mayores: decirle a sus padres.

No planeaba extenderlo por mucho tiempo, así que ese mismo día organizó una reunión familiar, para sorpresa de sus padres. Ambos se sentaron en el sofá lanzándose miradas completamente confundidos mientras Christopher caminaba de un lugar a otro frente a ellos.

—¿Y bien? ¿Para que nos llamaste?— preguntó la señora Bang contagiándose con los nervios de su hijo.

—¿Reprobaste? ¿Te peleaste con algún compañero?— el azabache negó—¡¿Te comiste mi trozo de pastel?! Christopher Bang, si es eso lo q-

—No, no fue tu pastel.

—Entonces nada puede perturbarme— la madre de Christopher rodó los ojos al oír las estupideces de su marido—. ¿Qué pasó, hijo? No tengas miedo y dinos... E-Espera, ¿embarazaste a alguna chica? Ah, no, olvídalo, no puedes hacerlo porque ni novia tienes.

—Los chicos de hoy en día no necesitan comprometerse para tener relaciones, son unos descuidados. Cuando tenia tú edad, tú papá incluso fue a pedirle permiso a mi padre para salir conmigo.

—L-La verdad sobre eso quería hablarles— ambos progenitores se miraron atónitos—. M-Me gusta alguien.

—¡El apellido Bang seguirá vivo! Creí que nos extinguiríamos contigo hijo, me alegra mucho que tengas ya a alguien. A estas alturas creí que morirías Virgen.

—P-Pero mamá, papá...— la cara de angustia que mostraba el más alto hizo que detuvieran todo intento de broma—. Hay un detalle... Y espero que no me odien por ello, recuerden que a pesar de todo soy su hijo, y que tengo miedo...

—Me estás asustando, hijo, ya dinos por favor.

—L-La persona que me gusta no es una chica, es un chico— todo quedó en silencio. Su madre con una expresión indescifrable y su padre con la mirada en el suelo—. L-Lo siento mamá, papá. No fue algo que planeé, sólo pasó, ¿pero saben? N-No me arrepiento, aunque ahora me odien, o estén decepcionados de mí, porque él es la mejor persona que he conocido, es un chico precioso y sólo quiero cuidarlo por siempre, o hasta que se canse de mí. Él me ha demostrado la manera más pura de querer a alguien, sin interés, sin ser superficial— una lágrima rodó por la mejilla de la señora Bang mientras veía a su hijo tan decidido y aparente enamorado—. No llores mamá... No quería ponerte así, p-perdóname.

—Te he decepcionado, ¿verdad? A papá también— la mujer negó repetidas veces mientras tomaba las mejillas del azabache.

—Sólo me tomaste por sorpresa, cariño, pero no me molesta. Ahora sólo estoy demasiado conmovida, jamás habría imaginado oírte hablando así, t-tan seguro y maduro. Estoy segura de que tu padre piensa igual, ¿verdad, cielo?— el hombre con una mirada enternecida y una sonrisa en el rostro asintió—. Siempre ten presente que lo primero para nosotros es tu felicidad, y si ese chico te hace feliz entonces no podemos reprocharte nada. Ya sea chico, o chica, mientras tú seas feliz nosotros estaremos bien con ello, espero que lo tengas claro de ahora en adelante. Si ese chico te hace bien, entonces totalmente bienvenido a la familia. Lo invitarás a cenar, ¿verdad? Necesitamos conocer al chico que logró atravesar ese corazón de piedra que parecías tener— la señora Bang soltó una risita mientras pellizcaba una de las mejillas de su hijo.

—Llegar al corazón de un Bang es admirable, un trabajo realmente difícil, si ese chico lo logró en tan poco tiempo por supuesto es fondo de ti— el azabache rió al por lo que su padre decía.

—Son los mejores padres del mundo, ¿saben? Tal vez no lo digo nunca, pero los amo mucho.

—No es necesario, lo sabemos. Te amamos infinitamente cielo.

El resto de la tarde se centró en la familia Bang interrogando a su único hijo sobre su reciente novio, que se llamaba Lee Félix, era un año menor que su hijo, amaba cantar— además lo hacía muy bien—, era completamente dulce, guapo, y el último detalle, al que no le prestaron mayor atención por el hecho de no afectar para nada su decisión, que el menor era casi ciego. Al igual que a Christopher, aquello no le importó nada. El azabache incluso se encargó de mostrarles una foto de él, a lo que todos coincidieron en opinión: Félix era completamente hermoso. Christopher le comentó que era también por dentro. El señor Bang inmediato le comentó que esperaba conocer a esa hermosura al cien por ciento en una futura cena familiar.

Félix también decidió contarle a sus padres sobre lo sucedido con Christopher, siendo ambos ya se podían hacer una idea sin siquiera preguntarle. Su padre se lo tomó muy bien, pero su madre no del todo, y no por el hecho de que el menor terminara siendo homosexual, ellos ya estaban al tanto de eso, sino porque sentía que el mayor no haría más que alejar a su hijo de su lado. Se le podían llamar celos, o simplemente miedo a perder una de sus razones de vivir.

—Qué tenga novio no significa que te vaya a dejar de lado mamá, lo sabes.

—No cambiaré de opinión hasta que lo invites a comer y me cerciore de que efectivamente es tan "precioso" como tú dices. Debo verificar si vale la pena.

—¿E-Entonces puedo invitarlo?— los ojos llenos de ilusión de su hijo provocaron que asienta inmediatamente—¡Gracias, mami! Te aseguro que Channie te agradará completamente, ¡es un chico precioso en todos los sentidos!

—He hablado con él... De hecho, gracias a que hablé con él descubrí que tenía otras intenciones contigo. Ese día que los encontré en la cafetería y me pidió hablar, en realidad me preguntó que cosas te gustaban. Debí supones que algo raro había ahí.

—¿De verdad te preguntó eso?— la señora Lee asintió—. D-Dios... Es tan lindo— sin nada más que añadir, se retiró del salón dejando a su hijo embobado pensando en su "novio".

Supuso que si el famoso Bang podía mantener así de feliz a su hijo definitivamente no era una mala persona, pero de todos modos necesitaba conocerlo a fondo para aceptarlo completamente.

Lo bueno de las historias Fluff, es que mayormente son todas felices y no pasan cosas de tristeza.

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