Capitulo 22: Juego, Partido y Competencia

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El Mercedes se acercó silenciosamente por el aparcamiento casi vacío. Vi dos figuras metiéndose dentro del BMW y sabía que el resto de nosotros estaban en la esquina más alejada, listos para comenzar la siguiente fase. Zeldris rió mientras nos acomodábamos en el lugar donde antes había estado el Jeep. Howzer y Zaneri estaban reclinados contra el costado del auto, viéndose molestos. Sus rostros cambiaron a una de sorpresa cuando vieron el Mercedes acomodándose a su lado.

-Elizabeth tenia razón, definitivamente captamos su atención.- Dijo Zeldris mirando en mi dirección. Escuché a Zaneri sisear "¿Son Gelda y Zeldris?" la boca de Howzer estaba desencajada.

Zeldris alzó mi mano a sus labios y la besó.

-¿Lista amor?-

-¡Por supuesto!-

Zeldris abrió su puerta y grácilmente salió del auto. -Hola Howzer, Zaneri.- Dijo con su perfecto tono amable y con una suave reverencia a cada uno. Digno de un caballero, dio la vuelta al auto para abrirme la puerta. Escuché a Zaneri golpear a Howzer en el brazo y murmurar "¿Ves cómo él abre la puerta para ella? ¿Por qué no puedes ser así?"

Su mano se extendió hacia mí mientras me levantaba fuera de su auto, me tambaleé sobre sus brazos y él entrelazó sus dedos por mi pelo y me besó suavemente. Me dio un guiño antes de apartarse, su mano se estiró y abrió la puerta de atrás del Mercedes para mí.

-Después de ti, Gelda.- Y me movió hacia el asiento trasero con su mano extendida. Miré a Zaneri, quien estaba verde de la envidia, y le di un guiño antes de meterme al asiento trasero.

-Que tengan una placentera noche los dos.-Dijo Zeldris dulcemente antes de seguirme dentro del asiento trasero. Me mordí el labio para evitar reír. Él también estaba tratando de contener la risa cuando sus ojos encontraron los míos. Lancé mis brazos a su alrededor para poder reírme, pero seguro se veía bien diferente para la perspectiva de Howzer y Zaneru. Escondí mi rostro en su pecho y su rostro estaba enterrado en mis cabellos mientras reíamos suavemente en los brazos del otro por unos minutos.

-¿Tengan una noche placentera?- susurré a su oído.

-Sabía que dejaría a Howzer echando humo y derretiría a Zaneri, así que, dos pájaros de un tiro.-Una enorme sonrisa se esparció por su rostro. Escuché a Zaneri decir algo sobre que Zeldris era un verdadero caballero y Howzer le llamó algo fuera de lugar. Escuché la puerta de su auto cerrarse mientras se metían dentro, a esperar que llegara la grúa, supuse. El walkie talkie comenzó a hacer ruido nuevamente, así que rebusqué por el suelo hasta que lo encontré.

Podía escuchar al resto de los pecados riendo histéricamente.

-¡Bien echo chicos! Puedo sentir los celos hasta aquí.- Dijo King mientras saludaba desde el Jeep.

-Su cara cuando besaste a Gelda fue increíble, Zeldris. Quería arrancarte la cabeza.- Explotó Ban.

-Y Zaneri se volvió tres tonos de verde mientras te miraba Gelda.- añadió Elaine.

-Señorita reprimida, es la señorita sabelotodo. ¿Aun tienes los ítems que la señorita sexy te dio antes? Cambio.-

-Si señorita sabelotodo, están aquí en el asiento. Ropa interior, top negro y una manta. ¿Esto es todo? Cambio.-

-¿Señorita Sexy, no le diste el short? Sus piernas tienen que estar fuera...- se quejó Elizabeth.

La puerta del BMW se abrió y Ban, lanzó unos shorts negros en nuestra dirección. Aterrizaron en el suelo, afuera de la puerta de Zeldris. Elizabeth gritó al otro lado de la radio:

-Señor reprimido, le repetiré que es lo que quiero que haga...-

Zeldris tomó la radio.

-Señorita sabelotodo, tengo una buena memoria, en caso de que lo haya olvidado. ¡Ya se lo que tengo que hacer, gracias! Cambio.- Enrolló la manta en su mano. -Esto hará que Zaneri enloquezca amor.- Sonrió mientras que grácilmente salía del auto. Dio la vuelta hacia el baúl del auto y pretendió sacar una manta. Se paró detrás del auto, sacudiéndola y luego doblándola cuidadosamente antes de volver a entrar al auto, tomando el short de camino. Miré por la ventanilla y vi el rostro de Zaneri presionado contra el cristal, solo mirando. Estaba escrito en su cara...Miren que caballero. Le fue a buscar una manta para mantenerla caliente. Ella no se lo merece, le di un saludo con la mano y ella me frunció el ceño.

Habilidades Paternales [NNT Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora