Prólogo

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En el continente Fotiá Sávra, existian 4 Imperios que eran la mayor potencia. El imperio Fos Neroú, El imperio Meier, El imperio Aíma y el imperio Magévo.

Cada imperio tenia la suficiente fuerza para que todos los demas Reinos del continente estuvieran bajos sus  pies.

El imperio Fos neroú, era un imperio prospero, donde las mejores hierbas medicinales crecian y era el mas avanzado. Los medicos y Magos de agua más capaces de todo el continente nacieron  de este imperio.

El imperio Meier. Es conocido por el poder de los sucesores del primer emperador, el cual tenia un extraño poder. Era capas de crear ilusiones, Trastornos o las mas temible pesadillas a cualquier persona de mente debil.

El imperio Aíma. Se ganó su nombre ya que para decidir un heredero de este imperio debe haber una gran lucha a muerte entre todos los principes, y el que ganara, seria el proximo emperador.

Y el imperio Magévo, el cual antes se llamaba Lykos, pero hace unas decadas, el imperio habia sufrido una gran plaga de Langostas, causando una Hambruna en los ciudadanos de este imperio. Luego, de alguna forma, la gran plaga desapareció, y los ciudadanos celebraron por esto, pero años despues, una gran tormenta de nieve se hospedo en el imperio, haciendo que sea imposible el cocechar. Los ciudadanos y forasteros empezaron a crear rumores de que el imperio habia sido maldecido. Aun después de que el imperio superara todas esas dificultades, los forasteros seguian diciendo que el imperio estaba maldito, por lo que todo el mundo lo empezo a llamar "Magévo".

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Hace 20 años, por las calles de el imperio Fos Nerou, había corrido el rumor de que una gran belleza se había hospedado en la capital. Los rumores se intensificaron tanto que llegaron a los oídos del Emperador, el cual, mientras andaba en su carruaje, logro apreciarla de reojo a lo lejos, enamorándose por completo de esta.

Fascinado por aquella persona, el emperador mando a guardias y caballeros en su búsqueda.

Al tenerla por fin frente a él, el emperador no pudo evitar enamorarse aún más de sus rasgos únicos y nunca antes visto por el ojo humano. No queriendo separarse de las emociones y tranquilidad que está le causaba, el emperador la volvió una de sus concubinas más favorecidas, haciendo que no tenga otra opción más que quedarse en el palacio en contra de su voluntad.

Aún a pesar de los múltiples cortejos y regalos que el emperador le enviaba cada día, este rogaba por su liberación.

Él emperador no se lo permitió, pero si le permitió el andar libremente por todos los rincones del Palacio acompañada de múltiples guardias, casi como un ave encerrada en una hermosa jaula de oro y diamantes, privándola de su libertad.

Con el paso del tiempo, los reclamos de la hermosa persona fueron cesando, al igual que su estado de ánimo fue decayendo. Aunque era poco perceptible, se le veía cansada, como si estuviera a punto de perder la poca cordura que desde hace tiempo trataba de mantener.

Sus días eran monótonos y grises, se la pasaba apreciando el vasto cielo azul, como si esperara la llegada de alguien que viniera a salvarlo.

El emperador la había vuelto una de sus esposas principales y la más favorecida, obteniendo todo lo que quería con sólo consultárselo, pero había un problema, El emperador había empezado a desesperarse.

Los primeros meses de la llegada de su esposa, este trato de innumerables formas el tener algún tipo de contacto físico con esta, todos resultando en un frío rechazo. Al principio, pensó que  era por timidez o porque no estaba acostumbrado. Pero los meses pasaban, y no importaba los regalos o la forma en que lo tratara de cortejar, esta siempre rechazaba cualquier tipo de contacto físico, no importando cuan mínimo fuera.

El emperador no entendía cual era el motivo del constante rechazo. El era un hombre que simplemente enamoraría a cualquiera con una sonrisa y su mirada. Su cabello era de un color azul cielo, con ojos rojos claros, casi parecidos al rosa de una gema, con hombros y musculos anchos que demostraban poder. Ademas de que era un emperador con una gran riqueza que rivalisaba con el del imperio Aima. No había razon aparentemente logica por la cual alguien no se enamorara de el, pero al parecer, esa lógica no se aplicaba a la persona que tomó como esposa, porque esta no parecía caer bajo ninguno de sus encantos.

El emperador solo decidió esperar.

En un festival de lucha amistoso que los cuatro imperios tenían cada 5 años, en lo cuales los emperadores se reunían, el emperador del imperio Fos Nerou, decidió presentar formalmente a "su esposa". Presumía y alagaba la gran belleza de esta con los otros emperadores, contando lo afortunado que se sentía al conocer a tal belleza.

Los demás emperadores al verla también se sintieron atraídos fuertemente por esta, enamorándose perdidamente, desde entonces, estos visitaban la mayor cantidad de tiempo el Palacio del imperio Fos Nerou, tratando de cortejar a la belleza en secreto con regalos caros, hasta hubieron los que les prometieron que viviría mejor si se iba con ellos.

El emperador de Aíma fue el unico que no prometió nada, y simplemente planeo tomarla a la fuerza, rompiendo su juramento de paz, para luego iniciar una guerra, a la cual se unirían los demás emperadores.

Sangre y múltiples vidas inocentes fueron involucradas.

Una intensa guerra se formó en el continente, la cual término con la exterminación del Imperio de Fos Neroú. Nadie sabia la razón, pero en aquel imperio había surgido una gran masacre que acabo con todos los soldados y ciudadanos en solo un día.

Desde la caída del Imperio Fos Neroú, nadie volvió a saber de aquella belleza por la que se inicio una gran guerra. Varios pensaron que esta fue una de las múltiples pobres almas que también murieron en medio del caos, otras pensaron que esta simplemente había escapado.

Las únicas personas que habían visto su belleza, y sabían alguna pista de su paradero, de alguna forma habían muerto días después de la destrucción del imperio, incluyendo a los demas emperadores, los cuales no se encontró el cuerpo de ninguno. Por eso, uno de los más grande misterio que contenía el continente era "Qué tan grande debería ser la belleza de esa persona como para ocasionar una gran guerra?" Pero fué una pregunta que nunca fue respondida, ya que los retratos que existían fueron todos destruidos y convertidos en una extraña ceniza, como si alguien hubiera querido desaparecer cualquier rastro de existencia de esa persona, y las descripciones que existían, solo repasaba lo que las personas consideraban como Irreal.

En la Oscuridad existe la LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora