¿Lena desaparecida?

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Al día siguiente de la pijamada, estuvimos platicando por un rato más, hasta que llegó el momento que las chicas se fueran a su casa.

Todas las chicas: Naty fue una pijamada increíble, espero y después se vuelva a repetir... pero ya nos tenemos que ir.

—No lo duden chicas después haremos otra pijamada.

Zoa: Cuidate Naty

—Gracias Zoa igual túz..

July: Bueno adiós señores, gracias por dejarnos hacer la pijamada..

Papás dijeron al mismo tiempo —No hay de que chicas, que bueno que se divirtieron.

Masha: Bueno Naty nos vemos el lunes en la escuela.

En fin las chicas se fueron a sus casas, y yo me retiré a mi habitación para recoger el tiradero. Unas horas después mamá hizo de cenar un riquísimo spaghetti con patatas, ese día yo me quede pensando un poco lo que sucedió con Lena la noche anterior.

—Naty querida no has probado la comida que preparo tu mamá.

—Ahh...si perdón.

Probé la comida la verdad mamá siempre hacía la mejor comida, pero esa noche mi cena la sentía muy rara, ya que no dejaba de pensar en lo de Lena.

—Cariño ¿sucede algo?— mamá me pregunto muy confundida por mi comportamiento.

—Ah sii... es que.. no de...dejo de pen...pensar en el viaje de Gran...Bretaña- conteste mientras tenía mi cabeza mirando al plató.

—Mira mi pequeña Naty- me respondió mientras tomaba mi mano —No te preocupes por eso, a parte falta 3 semanas para eso y te voy a preparar bien, no pienses mal, a todos los teatros a los que has ido siempre logras impresionar a la gente con tu talento.

—Gracias...papá.
Mis ojos se llenaron de lágrimas, no sabía si estaba triste por lo bello que me dijo o por lo de Lena.
—Papá...mamá ¿puedo ir a comer a mi alcoba?.

—Oh claro que si cariño sube.

—Gracias papá.

Subí a mi habitación, la verdad cada ves sentía como la comida se me atoraba mucho en la garganta que hasta por cada bocado que daba tomaba agua, se me complicaba pasármela.
Termine de comer y baje a dejar mi plato, noté que papás no estaban la verdad no sabía donde estaban, de seguro debieron salir a caminar un rato aveces les gusta salir un rato a caminar y más cuando es de noche, lave mi plato y mis cubiertos.

En eso me dio un poco de sed, al momento de abrir el refrigerador, vi la cabeza de Lena cerca del jugo de naranja, del susto grite tan fuerte que deje caer el vaso de vidrio que sostenía en mi mano.

—Naty pequeña ¿qué pasó corazón?—mamá llega y me abraza.

—No, na...nada- la voz me temblaba mucho —Ma-mami teng...tengo
miedo— comencé a llorar.

—Mi pequeña Naty ¿qué pasó?— papá pregunto muy preocupado por el grito —Mira dejaste caer el vaso de vidrio.

—Perdón papá no me di cuenta—le conteste mientras en mis ojos no dejaban de gotear lágrimas.

—Dinos princesa ¿que fue lo qué pasó?.

—No lo sé mamá, solo me asuste un poco— me limpie las lágrimas con un pañuelo.

—Mira mi pequeña Naty, ve a descansar mañana tienes escuela.

Papá y mamá se levantaron y yo me serví un poco de jugo.

Tu perfecta mentira Donde viven las historias. Descúbrelo ahora