⩿Prologo⪀

3.9K 203 12
                                    

El sol se colaba entre las blancas cortinas cada que el viento soplaba, permitiendo que aquella habitación estuviera mas iluminada y permitiendo que la joven que se encontraba dentro, pudiera disfrutar cómodamente de aquel libro de tapa verde olivo

Sus bellos ojos verdes se movían de un lado a otro, leyendo tan rápido como le era posible, estaba a nada de terminar aquella historia, cuya trama la había atrapado desde hacia ya unas semanas, hasta que el grito de su madre la interrumpió 

-¡Elizabeth, tienes correspondencia!-

-¡Ya bajo!- grito en respuesta

Claramente esas palabras  eran un claro "espera unos minutos", por lo que sin prisa volvió toda su atención a la historia, después de lo que fueron alrededor de 10 minutos, finalmente cerro el libro, con un rostro que mostraba su inconformidad ante el final del relato, no podía creer que todo se redujera a un final tan mediocre como ese, por lo que finalmente bajo las escaleras que se dividían en dos y estaban frente a la gran puerta de aquella casa, miro la mesa que se encontraba entre las escaleras y puerta, adornada con un florero repleto de rosas irónicamente rosas, y comenzó a revisar las cartas buscando la que tenia su nombre

-Diana.....- dijo en voz baja para ella misma con una gran sonrisa

Sin esperar mas, abrió aquel sobre, y por consiguiente la hoja que venia dentro de este, comenzando con su lectura

___________________________________

Querida Liz,

Hola prima, ¡Me alegra mucho que estés en Inglaterra!, veras, en dos meses será la boda de la hermana de mayor de mi amiga Jane y como sabes, existen ciertas cosas que toda novia debe cumplir para tener una boda y un matrimonio de ensueño.

Y te escribo esto, con la esperanza de que puedas enviarme una moneda de Seis Peniques, para un evento tan importante como lo es la boda de la que te hable, sin mas por el momento me despido de ti, querida prima y espero verte pronto

Con amor, Diana Barry

___________________________________

Apenas termino de leer observó el sobre, el lugar de remitente era Avonlea, por las cartas que recibía de su prima, el pueblo era hermoso, con bellos paisajes y un lugar muy tranquilo

Entonces recordó que sus padres buscaban un lugar para sentar cabeza, ¿que mejor que un lugar con vegetación, un frondoso bosque y tranquilo?

Su audaz y astuto cerebro comenzó a idear la forma de meter esa pequeña idea como si fuera una espina en la cabeza de sus padres, y poco a poco ir haciéndola más presente

Y tal vez, en poco tiempo, este pisando el mismo suelo del que tanto le habla su prima pelinegra

✨Ella✨ *Anne With An E* (Gilbert Blythe y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora