✨Ella✨ *Anne With An E* (Gilbert Blythe y tu)

◁Celos ▶

El día estaba soleado, flores en los alrededores, hermosas tonalidades verdes en los árboles y el sonido del agua corriendo en el río

Sin dudas todo muy tranquilo y perfecto para una lección de campo o al menos eso pensó la Señorita Stacy, mientras ella explicaba ciertas cosas sobre la naturaleza que los rodeaba y como estaba conectada, los adolescentes tenían otras cosas en la cabeza

Mientras que la pelirroja se encontraba justo detrás de su profesora, prestando toda su atención a ella Charlie Sloane miraba perdidamente a la chica de trenzas, detrás de ellos Ruby y Diana cuchicheaban entre ellas, específicamente, de Tillie, quien venia acompañada de sus dos pretendientes, Jane y Josie por otro lado, hablaban y daban cortas miradas a la pareja que venia delante de ellas

Gilbert y Elizabeth, la pareja se encontraba sumergida en una agradable conversación, sobre como el fin de semana pasado, el doctor Ward les permitió atender a ellos solos un paciente, aunque solo era un pequeño con una gripe ligera, para ellos había sido importante, pues era su primera experiencia siendo "Doctores" 

La charla se vio abruptamente interrumpida por el grito de Moody, quien por ir saltando en las rocas, termino por caerse

Sin perder tiempo, Elizabeth y Gilbert se arrodillaron junto al chico, para que al bajar su media se pudiera ver una fea y profunda cortada

Ruby soltó un grito al ver la sangre, que fue seguido por más gritos, pues entre los árboles se vio a dos niños indios, que asustaron a los alumnos

-¡Indios!-

-¡Nos rodean los salvajes!-

-¡Calma por favor!-

Entre tanto drama y gritos, la rubia terminó por desmayarse, asustando a sus amigas, quienes se acercaron tan rápido como pudieron, la pelinegra no se quedó atrás, fue a evaluar que tan mal estaba la de vestido rosado

Sin importar si ensuciaba su falda amarilla 

-¿Cómo está?- preguntó la rubia mujer al azabache, quien sostenía el pie de Moody

-Es profundo, aquí no podemos hacer nada, necesita sutura-

-La aldea MicMac está cerca, pueden ayudar, conozco el camino volveré pronto- interrumpió la pelirroja, para comenzar a correr en cuanto terminó de decir aquello

-¿Ruby estará bien?- preguntó Diana a su prima, quien ponía un paño húmedo en la frente de la rubia

-Está en shock, estará bien, pero necesito algo dulce o salado que le dé energía- explico Windsor, mientras buscaba algo en su cesta del almuerzo que pudiera ayudar

-Dale un poco de miel- interrumpió Gilbert, estirando su brazo con un frasco casi lleno de aquella dulce sustancia

Entre todas las adolescentes hicieron que la rubia, quien comenzaba a despertar, se sentará para darle una porción de miel, hasta que vio llegar a su amiga pelirroja con dos indios más

Una anciana y un hombre

Después de explicar que aquella mujer era la curandera de la aldea de los MicMac dejaron que comenzará a hacer su trabajo

La mujer comenzó dándole una extraña cáscara, que inmediatamente rechazo el chico

-Se extrae del sauce llorón, crece junto al agua... - comenzó a explicar el hombre

-¿Es para el dolor?- preguntó la pelinegra, quien estaba de pie viendo todo lo que ocurría, al igual que Blythe

Cuando una respuesta afirmativa, se le fue dada, la joven le indicó a su amigo que lo comiera

Ambos indios hablaban en su idioma, uno que nadie comprendía, ni siquiera la princesa, sin embargo cuando aquel hombre pidió la miel del azabache para usarla en la herida, dejo a todos desconcertados

-Miel, limpia la herida, ninguna enfermedad entrará- explicó el hombre de larga cabellera

Dejando sorprendidos a los aprendices de doctores, quienes se miraban atónitos

La mujer comenzó untando la miel en la gran herida del chico, para después sacar hilo y aguja, causando un pequeño pánico en el pobre Moody

Quién era tranquilizado por la pelinegra y el azabache

En cuanto la aguja penetro la piel, los gritos de dolor comenzaron, todos daban palabras de aliento para el chico, quien parecía estar muriendo a causa del dolor

Y por estar más ocupado gritando que respirando, ni siquiera se dio cuenta de que habían terminado incluso ya tenía el pie vendado

Después de recibir explícitas instrucciones sobre tener reposo y de que estaría bien en corto tiempo, los MicMac se fueron

Y el grupo de estudiantes regresó a la escuela, habían sido suficientes emociones por un día, pero parecía que la vida no pensaba lo mismo 

Al llegar a la pequeña edificación, los adolescentes únicamente entraron para tomar sus libros y poder marcharse a casa

El grupo de niñas se encontraba revisando el tablero "Date Cuenta" a petición de Josie

-Tillie, sigues teniendo dos- comento la rubia sacando una avergonzada risa de la mencionada 

-Josie, ¿podemos irnos?, Gilbert me esta esperando- le pidió la pelinegra

-Bueno, bueno, ¿Qué tenemos aquí?- pregunto la rubia ignorando la petición de su pelinegra amiga 

Todas voltearon hacia donde Pye veía, encontrándose con cierto azabache desconocido, al menos para las amigas de las primas Barry

El joven miraba a sus alrededores, parcia buscar a alguien hasta que sus ojos se toparon con la figura de la pelinegra 

-¡Alex!- grito al ver a la joven Windsor

-¿Alex?- repitió el grupo de niñas confundidas 

Elizabeth no le tomo importancia y se acerco al joven Baynard, recibiendo una sonrisa de este mismo

-Buenos días Alex- saludo la pelinegra 

-Alex, me alegra encontrarte, temía no poder devolverte esto...- el joven estiro su brazo, entregando un pañuelo blanco, perfectamente doblado, el cual en una de sus esquinas tenia bordadas las iniciales "E.A.B.W" 

-¡Por eso no lo encontraba! ¡Muchas gracias!- 

-Lo dejaste en mi casa el otro día.... Fue lindo cenar contigo...Y tu prima, ambas son muy agradables- 

-Digo lo mismo, tu familia es muy agradable y tu un gran bailarín- halago la pelinegra 

-Gracias, yo me preguntaba si....- 

-¡Eli! ¿Todo esta bien?- la voz del chico de cabello rizado llamo la atención de la pelinegra 

-Ah, Gilbert te presento a Alexandre Baynard, Alex, el es Gilbert Blythe mi....- 

-Su novio, mucho gusto Alexandre- termino de decir el azabache, sorprendiendo tanto al joven francés como a sus compañeros de escuela, que escuchaban todo atentamente 

Sin dudas el día no dejaba de sorprender a los estudiantes de aquel pueblo...

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¿Cómo ven gente?

¿Fue demasiado? jajajajaja la verdad a mi me gusto

Es un pequeño recordatorio de que el Gilbert es hombre y también siente cosas tan banales como los celos 

Yo me despido nos vemos, bye 

Gaby✨