Matrimonio por contrato

CAP 21.

Estaba llorando, me sentía horrible, Min estaba a mi lado con una taza de té que no quise tomar.

- Toma un poco, - es para que te  tranquilices.

- No quiero, - negué con la cabeza.

- Jun, quieres decirme que fue lo que soñaste, - se puso a su altura.

- Yo.. yo sólo recordé algo de mi niñes y la  verdad me arrepentí de haberlo hecho, porque de ha ver sido así, no sentiría este odio que tengo aquí dentro, - señaló a su corazón.

- ¿De que hablas?, - Estaba confundido, - ese no es el Jun que conozco.

- Eso que me hicieron no tiene nombre.

- No entendo de que me hablas, Jun por favor dime que te paso.

- Anoche tube un sueño, mi madre... Ella me dejó en el orfanato, fue su voluntad dejarme allí, todo lo que me dijo la monja fue mentira.

- ¿Que mentira?

- Que me encontraron con tan sólo unos días de nacido.

No sabía como consolarlo, la verdad si me dolió escucharlo decir algo así, normalmente Jun es alguien noble  y nunca se enoja, mucho menos se pone así de triste.

- Ya no quiero que busques a mi familia, - dijo muy firme y con lágrimas en sus ojos, - ella lo arruinó todo, - lloro aún más fuerte.

Min se acercó y lo abrazo muy fuerte mientras Jun lloraba sobre su hombro, Jun sentía mucha calidez en el abrazo de Min, eso hizo que se tranquilizara un poco, pues no estaba entrando en razón.

- Entiendo como te sientes, Pero tienes que ser fuerte, debes relajarte y pensar con la cabeza fría antes de actuar.

Jun asintió con la cabeza mientras secaba sus lágrimas.

Min salió a comprar algunas cosas y dejo sólo a Jun en la habitación, Jun se metió a bañar y salió envuelto en una toalla, empezó a vestirse y busco algo de dinero, había salido de  la habitación sin esperar a que  llegará Min.

Min había llegado pero al entrar encontró la habitación vacía, Jun no estaba por ningún lado, estaba preocupado que bajo a preguntar en recepción si lp habían visto salir.

- Así es señor Park, su esposo salió de aquí hace unos veinte minutos.

- ¿Le dijo algo? ¿dejo algún recado para mi?

- Ninguno señor, sólo me pidió que llamará a un taxi.

Min estaba molesto y desesperado, nunca pensó que Jun saldría sólo del hotel, empezó a llamar con insistencia al número de Jun pero el no contestaba.

- Maldita sea Jun, ¿Dónde te metiste?, - pensó en llamarle a Saeng y contarlo lo sucedido, pero optó por no hacerlo ya que aún no era alguien agradable para Saeng y el lo sabía muy bien.

Llamo a la recepción y pido un taxi, antes de salir tomó su billetera y su chamarra, tenía que buscarlo por todos lados, la recepcionista le llamo para avisarle que el taxi esperaba por él.

- Gracias, enseguida bajo.

Jun estaba en un parque mesiendose en un columpio, ¿Cuándo fue la última vez que hizo algo así? A Jun le gustaba ir al parque cuando se sentía sólo y triste, le daba paz, podía pasar toda la noche mesiendose mientras mira al cielo.

Un par de niños se les acercaron y miraron por que lloraba.

- ¿Por que lloras?, - pregunto el más chico.

- No es nada, sólo que me acordé de algo.

- ¿Te caiste? - pregunto el más grande.

- Si, - suspiro con pesar, - me caí y la verdad como me duele.

- Mi mamá dice que con un abrazo se arregla todo.

Ambos niños le dieron un abrazo a Jun sin tan siquiera conocerlo, Jun sintió mucha calidez y ternura por la inocencia de los niños que sin querer lo estaban consolando.

- Niños, - les llamo una señora joven de cabello castaño.

- Nos tenemos que ir, mamá vino por nosotros, adiós, - ambos menores agitaron su mano en forma de despedida.

Min buscaba a Jun en los lugares que había conocido durante su paseo, fue al acuario, el restaurante, la playa y otro par de lugares más, era cerca de las 9:00 pm y Jun aún mo daba señales de vida, min se estaba agotando, nunca pensó que algo así fuera a suceder.

Jun se movió de aquel parque y le hizo la parada a un taxi para después subir.

- ¿A donde lo llevo joven?

Jun no sabía a donde ir, - lleveme a un antro, el mejor -.

- Claro.

El taxista lo llevo a un lugar algo lejos, el lugar se llamaba Pub Extreme, con una tachada horrible por fuera pero una vez dentro del lugar todo era iluminado por luces de colores, el ambiente allí era favorable, había un barman que le había sonreído y el sin entender bien fue hasta la barra donde se encontraba el sujeto y pidió uno de sus mejores tragos.

- Oye bonito, - le hablo de forma coqueta, - prueba este trago, yo mismo lo preparé.

- Gracias, - tomó el vaso entre sus manos y lo observó, se veía inofensivo pero había visto tantas series en donde al doncel lo drogaban y de ahí se lo llevaban, - que linda mujer, - dijo para hacer que el tipo viera a otro lado.

Una vez hecho tiro todo su contenido cerca de un bote de basura.

- Wow, te lo terminaste, - dijo sorprendido.

- Si, así es, - sonrió.

- ¿Quieres otro?

- No, ya debo irme, mi esposo ha de estar esperando por mi.

- Claro.

Jun salió de allí y tomó otro taxi que lo llevo a un lugar más tranquilo, el lugar me encantó.

Después de un rato los tragos en mi iban tomando el control de todo, me sentía tan bien, la  tristeza y el dolor  habían desaparecido de mi.

- Traigame otra botella, - le grite al mesero pues la música estaba muy alta.

- Disculpa ¿viste a un chico delgado de cabello negro y cara de niño?, - Min preguntaba a cada persona que veía al entrar al bar, Saeng se había enterado de lo sucedido y le había comentado a Min que Jun iba a esos lugares cuando estaba deprimido.

- Si, hace unas horas andaba por aquí un chico como el que  describes, pero se fue muy rápido de aquí no tardo ni 20 min sentado.

- ¿Viste a que dirección se fue?

- Se fue a la derecha en un taxi, - mencionó sin dejar de preparar la bebida, - sino me equivoco el taxi era 4132 es de un citio que está a dos cuadras de aquí, puedes preguntarle a los demás taxistas por él.

- Gracias, - Min salió de allí con mucha rapidez.

Le tomó menos de 30 min llegar al citio de taxis, todos estaban en filas esperando a que las personas que  requerían de sus servicios se acercarán por si mismas.

- Disculpa, ¿el taxi 4132? - pregunto directamente.

- Esta haciendo un viaje especial, regresa como en una hora.

- ¿Tiene su número?

- Si, pero ¿para que  lo necesita?

- Necesito que  me diga a que lugar llevo a mo esposo, el barman del Pub me dijo que el lo había llevado a un lugar y quiero saber cuál es.

- Esta bien, yo le llamaré no se preocupe.

- Gracias.