El chico de la ventana de enfrente acaba de irse.
Y lo único en que pienso es en ese otro yo que está en el espejo cuándo está recibiendo las emboscadas más bruscas en pleno climax.
El mismo chico que antes de colapsar se presentó ante mi como una revelación nueva, sensaciones que solo puedo sentir cuando lo veo directamente.
A él si le gusta que lo vean directo a los ojos.
A él si le gusta mostrar su cuerpo desnudo a desconocidos.
A él sí le gusta que lo usen.
¿Quién es él realmente?
Porque me aterra sinceramente.Recuerdo entonces su manera de gemir, cambia su tono, pide más de maneras muy pervertidas, lo muerden y reza por golpes en la mejilla, que metan sus dedos en su boca, es sumiso a los demás, le escupen y agradece.
Parece un alter ego, solo que, si soy consciente de todo mientras sucede,
¿En qué me convierte eso?
Únicamente busco encuentros para sentir algo, eso lo sé muy bien ahora, me hago creer que soy yo quien los utiliza.
Quién les habla lindo para ser follado duro.
Como un ángel en Edén.Decido entonces iniciar otro cigarro, pero antes de eso tomo una bata para pedir una cerveza, llamo a servicio de habitaciones y espero a por ello.
Pasado un rato, llaman a la puerta y me limito a decir que pasen.
Un chico.
Joven, quizá 3 o 2 años mayor que yo, delgado, quizá de mi estatura, pelo castaño y ojos marrones.
Es atractivo.- Aquí está su bebida -menciona- ¿Desea algo más?
Y es cuando de la nada, lo siento venir.
- No leí que estuvieras en el menú -lo miro directamente-.
Se sonroja, ríe un poco y contesta:
- Me halaga viniendo de alguien tan bonito, solo que estoy trabajando... -hace una ligera pausa- y no me gusta tener sexo a la ligera.
- Entonces muchas gracias, no sirves de ese modo -contesto sin pensar, serio, muy seco-.
La ligera sonrisa que se le había formado desapareció de golpe, lo sonrojado también.
Pero vuelve a sonreír a manera de despedida.
Y se va.Comienzo a sentirme mal de nuevo,
¿En serio? ¿Así de imbécil?
¿Vas a despreciar a un chico solo porque no te correspondió cómo querías?
A solo sexo.
Esa mierda está jodida, pero no puedo evitar sentir que de algún modo me rechazó, y por eso el modo descortés.
Patético.La mirada perdida que tengo se centra nuevamente, es el espejo, el otro yo encontró mis ojos, me mira con asco, con desprecio, parece que quiere decir algo, lo está diciendo, siento que está hablando:
"¿Y ahora vas a victimizarte? Cuando lo único santo que tienes es la cara.
Desde hace tiempo a nadie tomas en serio, deja de mentir tanto."Volteo la mirada, las lágrimas quieren salir, no lo permito, no se lo permito.
Es cuando una brecha enorme se enciende de repente, un interruptor, el fuego empieza.Vuelvo a mirar.
Me levanto y me pongo frente a él, miro entre la bata semi abierta su vello en pecho, lo masculino que eso se ve, que curioso no combina con su cara de chico tierno, abro un poco más, y lo acaricio, sus pezones siempre están duros.
Doy un inhale profundo al cigarro, suelto el humo a su cara y es cuando todo se disipa.Terminé de enterarme que ahora soy quién tanto me hizo daño.
¿Y qué?
Pues tengo la puta corona.
Me gusta que me amen.
Ser su centro de atención, aunque la atención la reciba mi gran culo.Ya no soy más el chico bueno, eso claro ya lo tengo, ¿Es mi culpa al reaccionar así?
¿O es su culpa por tratarme hasta llegar a esto?Abro completamente la bata, y la dejo a medio caer sobre mis brazos.
Bajo mi mano lentamente hasta su ombligo, a su barriga llena de vellos, me excita verlo así, y le rozo en círculo al rededor del ombligo.
Otra vez me mira, y otra vez habla:

ESTÁS LEYENDO
De Vuelta A Mi Sitio
Short StoryMenos amor, más comprensión. Más confusión, menos felicidad. Raíces de rosas que nacieron marchitas. O cortadas aún sin antes poder florecer. Dos mitades de corazón, puestas en un cuerpo aún más roto. 13 nuevas canciones. 10 nuevas historias. En com...