Cara a cara

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Siento los suaves y dulces labios de Fer con los míos, es muy tierno y cálido.

-Fer... y-ya es tar-tarde... -digo entre besos, ya me estoy cansando de estar de puntitas de pie para alcanzar su boca, esto me gusta mucho. Entonces él me da el último beso y se separa un poco.

-Así está mejor, ¿cierto? -murmura juntando nuestras frentes, creo que se refiere al fugaz beso que le dí cuando nos conocimos.

-Sí... -asiento teniendo mis manos en su pecho-. ¿Fer?

-¿Sí?

-¿Quién era ese chico? ¿Ese asesino te conoce? -pregunto preocupada, puede que nos busque para matarnos.

-Ven. -Toma mis manos y entramos al cuarto para sentarnos en la cama-. Este es un asunto complicado, pero debes saberlo -comienza mientras agacha la mirada, Fer luce algo preocupado.

-Puedes decirme -digo para que continúe.

-Hace un tiempo conocía a una chica llamada Mar, no tenía amigos ni nada, era tan parecida a mí. Después Marisa hizo una fiesta, Mar y yo nos enamoramos... -Da una pausa, pero no ha contestado mi pregunta.

-¿Qué pasó después? -pregunto curiosa.

-Hubo un accidente y ella... ella murió, pero no se fue.

-¿Qué quieres decir? -Fer toma mi rostro con ambas manos y me mira a los ojos.

-Por eso es que no quiero que te acerques a ese muelle, Mar mata a todas las personas que pisan ese lugar. Ese chico que te atacó es Darío, también murió pero sigue aquí. Creo que ninguno descansará hasta matarme.

-¡No digas eso! -exclamo cerrando con fuerza los ojos y negando fuertemente.

-Pero...

-Ya sentí el dolor de perderte una vez -digo aguantando el llanto, lo hago porque a Fer no le gusta verme llorar.

-Agus... vos me salvaste la vida, yo haré todo por mantenerte a salvo -murmura levantando mi mentón para conectar nuestras miradas. En ese momento escuchamos que la puerta de la entrada se abre.

-¡Agus, ya llegamos! -dice mi mamá, ay no, ellos no pueden verme con Fer. Pensarían cualquier cosa.

-Tienes que irte ahora. -Tomo su brazo y lo acerco a la ventana. Cuando intento abrirla la ventana se traba-. No, mis padres no pueden verte aquí -hablo preocupada tratando de abrir esa maldita cosa.

-Voy a intentarlo. -Fer toma mi lugar y abre la ventana sin problemas-. Nos vemos mañana en la escuela. Él me da su beso en la nariz y se aleja justo antes de que mi mamá entre por la puerta.

-Hola Agus. ¿Está todo bien?

-Eh... sí, no pasa nada -respondo estando recostada por el marco de la ventana.

Fer...

-Wau... Agus es muy tierna y amable -me digo, tocando mis labios. En ese momento me viene a la mente una duda.

-¿Acaso yo morí? Mmm... -Agus dijo que sí, lo único que recuerdo es que yo la protegía cuando Darío la atacó, después... desperté en el hospital-. ¿Qué fue lo que pasó?

Después de la muerte de Marisa y Héctor.

Mar...

Después de hacer dormir a Lucy, pienso muy seriamente en lo que haré cuando vea a Fer, él es el asunto que falta por arreglar.

-¿Qué tienes linda? -pregunta Darío abrazándome por detrás y dejando un beso en mi cuello.

-Mi venganza... está completa -digo, mirando el río.

Terror AquaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora