9. "Alejamiento"

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Mi shock, coraje, ira, no sé lo que es este sentimiento, pero aún no había pasado del todo.

Me quedé sentada en el sofá de la oficina un gran rato, pensando en ese suceso que me marcó y me dolió hace algunos años.

Y no sé en qué momento me quedé dormida pero lo hice...

Me despierto y veo la hora, 8:00 p.m, ¡o Dios! En este momento debería estar en la cena con papá y los demás. Me paro del sofá rápidamente agarro mi bolso y salgo de la oficina.

Cuando ya estoy fuera de la empresa me dirijo hacia el carro y subo en el. Bajo un poco el espejo y veo mi maquillaje corrido de llorar, trato de arreglarlo con las manos pero me es casi imposible. Intenté hacer lo mejor que pude.

Pongo en Maps el nombre del restaurante ya que no sé dónde queda.

Minutos más tarde estoy en el restaurante. A las 8:25 p.m. Papá me va a matar.

"Por favor sean puntuales"
Son las palabras que se me vienen a la mente en este momento.

Entró y me preguntan si tengo reservación y bla, bla, bla.

Cuando por fin consigo entrar me indican la mesa donde están todos.

Reconozco a papá y a Damián, mas no veo a Liam. Gracias a Dios.

––Buenas noches ––digo amablemente–– disculpen la demora. ––me siento en el asiento vacío el cuál me queda a la par de papá y Damián.

Los demás me devuelven el saludo y me dicen que no me preocupe, etc.

Veo hacia el frente y lo veo, justo al frente mio. No puede ser.

Trató de ignorarlo.

––¿Oye estás bien? Tienes un aspecto.. no tan común... ––dice Damián tratando de ser amable.

––Eh si. ––es lo único que logro decir.

––Te conozco Samantha, por como te vez se que no estás bien, ¿que te pasa?
––veo un poco de preocupación en su cara, tal como la vez que me pase de copas.

––No te preocupes, hablamos de eso en casa ¿te parece? ––digo tratando de convencerlo para que se olvide de eso.

––Bien, pero no creas que me voy a olvidar del tema y no vamos a hablar.

Vuelvo la mirada hacia los demás para tratar de poner atención a lo que dice papá pero es en vano.

Mi mirada se conecta con la de Liam una y otra vez y me estresa. ¿Por qué tengo que mirar a Liam?

Me pregunta si estoy bien moviendo su boca, yo solo asiento.

Aunque se que no estoy bien, o al menos no en este momento.

La cena transcurre rápidamente, al cabo de las 9:30 ya había terminado.

Abrimos la puerta de la casa y no parece que haya nadie, todo está a oscuras.

––Buenas noches chicos, nos vemos mañana. ––nos dice papá a Damián y a mi y luego sube las escaleras para ir a su habitación.

En el camino papá me dijo algunas cosas como que "que eran esas horas de llegar" o "te dije que llegaras temprano" pero no fue el peor regaño, simplemente llegó a la conclusión de que la próxima vez llegará puntual.

––Buenas noches hermano. ––empiezo a subír las escaleras.

—¿A donde crees que vas Samantha? Te he dicho que no me iba a olvidar de nuestra conversación y así será. Por favor dime que te pasa Sam. ––me doy la vuelta y veo la preocupación en su cara. Si que me conoce.

HASTA QUE LO CONOCÍ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora