❝ ᴡᴇ ʟᴏᴠᴇ ʏᴏᴜ, ʜʏᴜɴɢ ❞ [JinxBTS]

- VIII -

- ¿Omega? - Olfateó el aire, sintiendo el suave perfume natural que desprendía el rubio.

- Sí, aquí estoy. - Habló con nerviosismo.

Taehyung se incorporó en la cama como un resorte, mirando en su dirección, y ansiando la cercanía del rubio.

De repente se levantó, moviéndose con pasos rápidos pero irregulares, que demostraban la desesperación que sentía.

Se detuvo frente a Jin, observandolo, preguntándose si aquella imagen frente a él era real o solo otra ilusión.

Había tenido muchas desde que lo habían  encerrado en la habitación.

Tomó una respiración profunda, llenando sus pulmones del aroma dulzón.

Lo miró a los ojos, aquellos bonitos iris color miel que brillaban como dos estrellas.

Aquello no podía ser una ilusión.

Sonrió y sin contenerse se abalanzó sobre el mayor, rodeándolo y apresándolo entre sus fuertes brazos.

- Estás aquí, omega. - Hundió su nariz en la fuente de aroma y entonces inhaló, sintiendo la dulzura de las cerezas. - Conmigo.

Seokjin le devolvió el abrazo, soltando sus suaves feromonas para calmar al alfa.

El peligris ronroneó feliz.

Jin podía sentir su cuerpo humedecerse por la transpiración del menor, y temió que pudiera deshidratarse.

- Tae. - Levantó su mano derecha y la deslizó con lentitud por los cabellos grises, desenredando. - Vamos a sentarnos.

El alfa negó, frotando su nariz en el cuello del omega, y apretándolo un poco más contra su cuerpo.

- Vamos, Tae. - Habló en voz baja y suave sobre el odio del alfa. - Deja que te dé un poco de agua.

La voz del omega sonaba como una armoniosa melodía para los oídos del alfa, haciendo imposible el negarse ante su petición.

Taehyung lo sostuvo de las caderas, para evitar que se aleje, dió lentos pasos hacia atrás hasta que sintió la cama contra él. Entonces se deslizó hacia abajo y se sentó sobre ella.

Jin se mantuvo de pie, y sin intenciones de detener sus caricias.

Taehyung hundió su rostro en el abdomen plano, completamente embriagado por el aroma que desprendía el mayor.

Ronroneó feliz, la cercanía del omega hacia que su lobo moviera la cola feliz, ansiando más caricias, un mayor contacto.

Siguiendo sus instintos y lo que su alfa le pedía, empezó a subir su rostro lentamente, frotando su nariz contra la piel cubierta.

Se detuvo cuando llegó a su pecho.

- Te traeré agua. - Informó. Seokjin detuvo sus caricias, hizo un movimiento hacia atrás pero las fuerte manos en su cadera le impidieron moverse más, lo estaban presionando con determinación.

Los ojos se Taehyung se posaron en el pálido pecho descubierto, gracias a los pocos botones desabrochados de aquella camisa color lavanda.

Sus ojos se tornaron de un color negro azabache, y brillaron intensamente al ver la piel suave y blanca, expuesta ante sus oscuros y deseosos ojos.

Mojó sus labios con deleite antes de pasar su lengua por la suave piel.

El cuerpo de Jin se tensó de inmediato.

- Tae, detente. - Colocó ambas manos sobre el pecho del alfa.

El menor gruñó, no le gustaba que su omega lo rechazara.