Crybaby [T.R] [✓]

♠️03; Diferente

✧∥Personaje: Shinichiro Sano
✧∥Advertencia: AU. Shinichiro vive.

OC; Hikari
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El azabache acaba de dejar la tienda a manos de su empleado y salió apresurado a la cafetería que estaba a dos calles de ahí, pues Hikari, su novia, lo esperaba.

—Lamento la tardanza, estaba terminando de instalar la alarma de seguridad -explico el varón a la chica.

—No pasa nada. -sonrió ella.

Empezaron a platicar y a ponerse al día, eran pareja sí pero sus actividades diarias se habían incrementado y no habían podido verse en una semana y sobre todo al azabache que estaba planeando el evento que cambiaría sus vidas.

—¿Amor? -llamó la joven algo preocupada, su pareja había estado muy silencioso y le temblaba su mano derecha.

—Quiero que vivas conmigo, Hikari... -soltó de pronto el joven.

—¿Qué viva contigo?

—Sí... Además, tendrás una ventaja, la escuela te quedará más cerca.

Ella sonrió con cariño: —Tendrás que ayudarme con la mudanza -

De la bolsa de su pantalón sacó una pequeña caja azul marino y se la entregó.

—¿Un par de llaves?

—Es la de mi departamento y el local...

Ella quería gritar de emoción pero se contuvo, tomó la mano del azabache y le dijo:

—Shinichiro, acepto vivir contigo hasta que seas el peleador más fuerte en todo Japón -

—Eso fue cruel, pero está bien para mí -

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Un año más tarde, después del incidente de la tienda en donde afortunadamente no pasó a mayores, Hikari estaba en la la sala, teniendo una vídeo llamada con su mamá, quien estaba en el extranjero por cuestiones de trabajo.

—¿Ya está lista? -preguntó la mamá de Hikari.

—Todavía no, falta un minuto -respondió la joven.

—Bueno, cuéntame cómo va todo entre ustedes. ¿Cómo está Shinichiro-kun después del incidente?

—Bueno, desgraciadamente los chicos eran amigos de Mickey y van a estar en la penitenciaria por un tiempo y el empleado que acabábamos de contratar fue atacado pero está bien, como sigue trabajando le subimos el sueldo. Entre nosotros todo está muy bien, de pronto tenemos nuestras discusiones pero como todo matrimonio jóven, ¿O no?

—¿Matrimonio? ¡Hikari! ¿Se casaron y no me dijiste?

La joven se regañó mentalmente y miró la prueba, la tomó entre sus manos y sonrió.

—¡Ya está! -le dió la vuelta al pequeño aparato entre sus manos y miró a su madre.

—¿Qué dice?

—Una raya... -dijo Hikari, algo decepcionada.

—Oh cariño, no te preocupes. Ya verás que será muy pronto. -dijo su madre sonriéndole.

Siguieron conversando mientras ella iba a la cocina por una fruta, y dejaba la prueba en la orilla, en un rato más la tiraría al bote de basura.

—Estoy en casa -se anunció el azabache.

—Sí, mamá, yo te aviso cualquier cosa.

Shinichiro se acercó a la sala y se sorprendió al ver a su esposa hablando con su suegra.

—¡De verdad que me duele que no me dijeran que se habían casado! ¡Shinichiro-kun, me debes esto!

—B-buenas tardes...

Las mujeres se despidieron y Hikari guardó su computadora mientras él se servía un poco de agua en la cocina.

Tomó la prueba que estaba en la barra y se sorprendió al ver las dos rayitas rosas, se quedó pensando en qué significaban hasta que Hikari apareció y observó a su esposo.

—¿Amor?

—¿Vamos a tener un bebé?

—No cielo, una sola raya significa que no estoy embarazada

—¿Una? Cariño, hay dos -dijo Shinichiro mientras le enseñaba la prueba: dos rayitas rojas.

La chica caminó hasta él y tomó entre sus manos la prueba, efectivamente había dos líneas rojas.

—Shinichiro, vamos a tener un bebé

Él la abrazó con fuerza y amor, besó sus labios y fueron a visitar al abuelo del joven y a sus hermanos menores, quienes se emocionaron de la llegada del nuevo integrante.

—¡Quiero que sea un niño! -anunció Emma.

—¿Qué? Va a ser una niña -se quejó Mickey.

—¿Y eso, chicos? -preguntó la cuñada.

—Si es niña ya no voy a ser la consentida -declaró la rubia.

—¡Si es niña yo la voy a cuidar!

Y entre quejas y felicitaciones, Shinichiro y Hikari se sintieron felices por el nuevo integrante de la familia Sano.

Aunque Mickey le hizo prometer algo a su hermano mayor:

—Si es niño, ¿Después pueden tener una niña? En serio prometo cuidarla -

El azabache sonrió sonrojado y lo abrazó.

—¡Seremos demasiados! -dijo entre risas el azabache.

—¡Seremos una pandilla! -rió Emma.

—¡Dejen de decir tonterías, mocosos! -regañó el anciano algo molesto y los demás rieron.