XII

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- Que soledad se siente sin mi tía, definitivamente ella le da vida a esta enorme casa

- Señorita ¿va a cenar?

- Si Ana

- Tocan la puerta

- Vaya al comedor señorita, vere quien es

- ¿Quien era Ana?

- Nosotros

- Señores DLuca

- Emilia

- Ya ya..Mathias Frederick ¿necesitan algo?

- si comida

- Emilia alimentanos

- Ho si perdon...Camelia pongan dos lugares mas por favor

- Emilia nos cansamos de esperar la invitación a cenar así que nos invitamos solos

- Esque no creí quisieran venir, como tu prometida Frederick es bueno ya sabes

- Loca

- ¡¡Mathias!!

- Emilia, mi hermano lo sabe, yo lo se todos los saben

- podemos cambiar de tema o se me arruinará la cena

- Tengo mucha hambre Camelia dame el doble

- Nos dejaras sin comida hermano

- Mathias como es que comes y no engordas

- La naturaleza me ha favorecido

- Camelia cocinas delicioso y este postre esta de muerte

- Bueno señor muchas gracias, pero el postre lo hizo la señorita

- ¿sabes cocinar?

- Se hacer postres

- una cajita de sorpresas

- quien se case con la señorita se lleva una joya

- Emilia no puede casarse con nadie

- ¿porque no frederick? No soy suficiente para nadie o que

- Ya, se me amargo la cena

Frederick y su humor cambiante, dejo de comer y se fue molesto

- ¿que le pasa a tu hermano?

- No hagas caso Emi, ya sabes nuestra hermanita, la boda y todo eso

- Ire hablar con el

- Emi, no creo sea buena idea

- Ire

- Bueno, si te grita me dices y lo pongo en su lugar

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Frederick se había ido al jardín estaba sentado en una de las sillas de metal, tenia una pose cabizbaja como cansado entonces mi molestia desapareció, no debe ser nada fácil lo 1ue vive día a día.

- Frederick

- Emilia, ¿vienes a pelear?

- La verdad venia a eso, no se ya no quiero

- Cambiaste de opinión porque sabes perderás

- Es posible...¿puedo sentarme?

- No soy buena compañía

- Por favor

- Esta bien

Pasamos en silencio un rato, hasta que el me sorprendió con su pregunta

- ¿Emilia ya tienes pretendiente?

- ¿Que?

- si no quieres responder esta bien

- Me sorprende tu pregunta nada mas y no, no hay pretendientes

- Me dirás que nadie a puesto los ojos en ti

- Pues solo una persona, pero era algo imposible así que no cuenta

- ¿Quieres contarme?

- La verdad es un tema que me molesta un poco

- Te entiendo

Y después de eso eso volvimos a quedar en silencio, me sorprendió mucho que ese silencio no era incomodo...iba a decir algo cuando Frederick hablo

- supongo ya sabes las razones de mi boda

- si me han contado

- no quiero casarme, al menosy no con esa mujer, me ha atrapado de una manera sucia, bueno todas las mujeres que he conocido han sido malas, interesadas lo peor...y debo confesar que creí eras igual y quiero pedirte perdon por esa falta

- ¿porque creíste eso?

- Cuando subí al barco, bueno la noche que te conocí acaba de escuchar a una mujeres hablar de ti y de un tal Valen quien era tu cuñado y tu estabas enamorada de el, pero el escogió a tu hermana y tu trataste se deducirlo y tu padre para evitar la vergüenza te enviaba a America con tu tía

- ¿En serio eso dicen de mi?

Me dolió tanto escuchar eso, para todos yo solo era una resbalosa que había sido echada de su casa y no pude evitar se me hiciera un nudo en la garganta que supongo Frederick noto

- Emilia, perdon no llores no quise hacerte sentir mal

- No, esta bien, supongo es bueno saber lo que se dice de mi y ahora entiendo porque me tratabas tan mal

- Lo siento

- No es tu culpa

Veía hacia mis manos me sentía avergonzada, aun eso me afectaba.

- Emilia perdóname no quise...

- No Frederick no es tu culpa, veras...

Tome aire

- Valen si es mi cuñado, pero las cosas no pasaron como lo escuchaste...

Le conté todo a Frederick no fue para justificarme, solo sentí la necesidad de decírselo

- Valen es un mal hombre, el debió luchar por ustedes

- No había un nosotros

- Emilia

Frederick tomo mis manos y me vio con tanta ternura

- Yo no te habría perdido, en este tiempo que llevo conociéndote eres no solo hermosa físicamente, si no tu interior, eres inteligente, graciosa, tienes carácter del demonio pero eso es agradable, no te dejas atemorizar y defiendes tus ideales, Emilia eres única

- Frederick

- No, no me veas así, es cierto lo que digo

- Gracias

- La verdad...me enoje...pensar que pudieras estar con otra persona eso me...

- ¿Te que?

- Me puse celoso

- ¿Que?

- Si, Emilia tu me gustas, me gustas mucho yo, yo no se que me pasa cuando estoy contigo, escucho tu nombre y siento una gran emoción, te veo y me palpita el corazon de forma acelerada, no soporto ver cuando alguien baila contigo no soporto ver le sonríes a otros, por eso llamo tu atención con peleas...Emilia...

Estaba perpleja por todo lo que Frederick me estaba diciendo que no podía gesticular palabra alguna, Frederick me tomo mi rostro y lo acaricio con tanta delicadeza poco a poco el se fue acercando a mi, tan cerca, sentí su aliento calido yo no deseaba separme de el, escuche el susurraba cerca de mis labios... entonces el me beso, un beso tan dulce y suave, un beso que hizo me desconectara de todo y solo lo sintiera a el.







La PianistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora