"¡Te lo ruego luna, por favor déjame estar con él, déjame patinar con él no solo un día, no solo un año, toda mi vida y las que siguen!"
-Los personajes no son míos
-Actualizo cada que se me ocurre
-Estoy haciendo correcciones
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
POV. Reki
Escuché decir a Cherry hace unas horas que nos tenía un poco de envidia y celos. Dijo que estaba celoso de que nosotros pudiéramos aún andar horas en la calle divirtiéndonos sin preocupaciones, que podíamos jugar con Miya durante horas y pasar a comer a cualquier lugar que quisiéramos con la ropa que sea sin que la gente nos juzgara. Y que él como adulto en una sociedad conservadora no puede hacerlo con tanta libertad.
Personalmente creo que está equivocado.
—¿Estás enojado?— preguntó bajando el libro de mi cara mientras yo negaba— sí, estás enojado.
—¿Y qué si lo estoy? ¿No tengo derecho a enojarme acaso?
—Claro que lo tienes, no digas tonterías. Solo que se nota demasiado que estás enojado. Cómo cuando te enojaste con Langa— contestó Miya volteando a verme y acercando un lapicero a mi frente— si te sigues enojando escribiré en toda tu cara "Reki es un enojón" y en tus brazos "Hulk"
Cherry negó y le quitó el lapicero guardándolo otra vez en el estuche.
—¿Por qué estás enojado?
—Si te lo digo te enojarás.
—Aunque él se enoja todo el tiempo. Cómo cuando le digo mamá.
—Es que ya te he dicho que yo no soy tu madre, ni siquiera soy mujer— reclamó y Miya asintió— ¿Y bien?
—Hace rato cuando fuí a dejar los platos en el lavabo por accidente escuché la conversación que tuviste con Joe. Dijiste que los adolescentes teníamos una buena vida y que nos tenías celos— asintió— pero ¿En qué te basas para decir que tenemos una buena vida?
Él se quedó callado abanicando su cara de manera relativamente rápida y con fuerza, como si estuviera intentando que el aire se volviera palabras y respuestas.
—No me baso en nada en realidad— contestó después de un rato y Miya dejó su tarea para voltear a verlo— quizás solamente estoy reflejando lo que en algún momento fué mi adolescencia en ustedes tres.
—¿Langa es el tercero? Porque nosotros somos dos.
—Supongo que sí, aunque ahorita no está acá, dijo que debía acompañar a su mamá al trabajo... pero me da miedo que vaya.
—¿Por?
—Ella es enfermera y trabaja en un hospital y dicen que en los hospitales hay fantasmas y ayer estuve viendo vídeos de terror. En uno de esos decía que a una chica se le pegó un muerto por andar caminando en los pasillos de los hospitales ¡Y yo no quiero que a Langa se le suba un muerto!— grité y Miya empezó a reír— Oye no te rías, es un tema serio.
—¿Y qué tiene de serio todo esto? A Langa no se le va a pegar ningún muerto.