Recuérdame {Kellin Quinn & Vic Fuentes}

5 {Parte 2}

El mismo día

~Narra RebelAgony ♥

El hablar con Kellin fue extrañamente agradable para Vic. Recién se fue el pelinegro, el moreno se retiró de la universidad y regresó a casa. Su hermano se iría de viaje un tiempo, así que se despidió de el deseándole suerte, el salió y el moreno fue a su habitación a estudiar.

Pocos momentos después, la puerta de la casa de la familia Fuentes fue abierta y cerrada nuevamente, el padre había llegado. El oficial subió a ver al mayor de sus hijos y lo invitó a ver una película, el moreno negó con los ojos en blanco y su padre con una risa burlona salió de la habitación con rumbo a la cocina.

-No te enfades. -dijo el oficial desde las escaleras. El moreno suspiró.

-Papá, ya vimos Erin Brockovich dos veces y lloraste las dos veces. -dijo Vic fastidiado de la película.

-No es cierto. -el señor Fuentes se defendió.

-Es vergonzoso. -finalizó el moreno, el señor regresó a la cocina con una risa.

El moreno escuchaba musica punk mientras leía un poco y comía unas galletas de chocolate, fue interrumpido por el celular indicando una llamada entrante. El moreno rodó sobre la cama y se puso de pie caminando hacia el mueble bajo un espejo, descolgó la llamada curioso por el número sin nombre.

-Hola. -dijo Vic indiferente.

-¿Hola? -la voz le era familiar, eso lo puso algo nervioso. El solo siguió masticando la galleta- Eh, soy-soy Kellin. -la voz de él era tímida.

-Hola. -repitió el "menor" con un toque de alegría.

Un silencio invadió en la llamada.

-Me vas a cancelar, ¿no? -preguntó seguro Kellin-. Puedo sentirlo, puedo sentirlo en mis huesos, estaré devastado. -Kellin sentía esa punzada en su corazón.

-No, no, no, no, no, es que estaba... -el moreno había olvidado que la cita era esa noche, no tenía una excusa buena, por lo que comenzó a vestirse.

-¿Qué?, ¿estabas sentado viendo televisión en ropa de descanso o algo así? -cerca, estaba en ropa de descanso y estudiando.

-No, no estoy viendo televisión, me estoy vistiendo y te veré donde quedamos. Oye, ehh, ¿a qué hora quedamos? -el moreno comenzaba a sentirse estúpido.

-Era a las 8 en punto.

-Claro, -Vic chasqueó los dedos viendo la hora: 7:53 pm- eh, o-ocho y quince, está bien. -No, nada estaba bien, él estaba enloqueciendo.

La llamada fue cortada y Vic continuó vistiéndose, cómodo y seguro. Bajó a prisa las escaleras poniéndose la chaqueta, vió a su papá viendo las notias.

-Hola, ahm, voy a salir. -avisó.

-Ya lo veo -el oficial bajo el volúmen del televisor.

-Eres un investigador entrenado -recordó Vic al ver que su papá no lo interrogaba como siempre, no sin antes dejar escapar una sonrisa.

-¿Con quién vas? -preguntó el señor Fuentes.

-Con un chico de la escuela -el moreno soltó, su padre sabia que gustaba de los hombres por lo que le parecía normal.

-Está bien -el papá sacó las llaves de la casa y se las pasó a su hijo mayor, éste las tomó.

-No estaba pidiendo permiso -dijo con una sonrisa.

-Lo sé, que te diviertas -dijo algo exhausto, su hijo le dio un abrazo y un beso en la mejilla alejándose a paso lento-. ¿Dinero para el taxi? -preguntó sacando su billetera, Vic soltó una mueca y regresó donde su papá quien ya estaba sacando billetes de 10 y 20 dólares, primero recibió 3 de 10 dólares y 4 de 20 dólares, al no sentirse satisfecho extendió la mano y su padre le dio un billete de cifra mayor, con una sonrisa caminó de regreso a la puerta-. ¿Te espero despierto?