𝐄𝐥 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚 𝐝𝐞 𝐒𝐈𝐌

𝟕

Flashback 1/2

15 de Octubre de 2020

Marcho imponente frente a los agentes de Hydra que se topaba por los pasillos, cada uno de ellos con una reverencia como señal de respeto a la otra cabeza de la organización.

Giro en el corredor y al final de este había una puerta; a pasos rápidos la abrió sin miramiento encontrándose frente a frente con su equipo. Más bien, su proclamada manada y familia. Con un sentimiento de satisfacción floreciendo en su pecho se adentra a la habitación siendo recibido por un rubio que lo beso demandante, y sin una pizca de sorpresa lo abrazó desde la cintura para profundizar ese contacto tan “íntimo”. Los presentes sonrieron acostumbrados a las muestras de afecto descaradas de sus líderes.

—¿Cómo te fue Alfa?—finalizó el beso no sin antes morder el labio inferior del pelinegro provocándolo.

El de ojos azules lamió lentamente el hilo de sangre que broto de la pequeña herida, suspiro para contemplar al de ojos carmesí ocultando con esfuerzo el deseo que quemaba su piel.

—Muy bien, esos cobardes apenas verme trataron de huir, fue placentero verlos tan asustados mientras les provocaba un dolor insufrible—sus ojos brillaron mandando una corriente de excitación al Capitán.—Y sabes cómo me pone que me llames Alfa, Omega.

—Papá, pop's, aquí no por favor—dijo hastiado y cruzado de brazos el único chico de la familia, un castañito con los orbes claros que desde lejos, se mostraba avergonzado.—Todos los días debo verlos en ese plan, es más, tenemos trabajo que hacer—los señaló y luego a la pantalla.

La manada rió bajito, el joven tenía toda la razón.

—Oh Pete hijo mío—se acerco al muchacho de casta Alfa también, y alboroto el cabello marrón como muestra de cariño.

—¡Papá!—bufo.—Ya no soy un niño.

—Para mi lo sigues siendo, mi cachorro—el rubio aparto a su pareja abrazando sobreprotector a su hijo. Peter se sentía desfallecer en el gran pecho de su padre Omega, no podía respirar al cien por ciento; sin embargo tampoco se sentía con la capacidad de apartarlo, después de todo era con el que más apegado está.

Tony hizo un puchero celoso ¿Por qué a él no lo apartaba o se quejaba?

Natasha junto a su pareja esbozo una sonrisa, ellos, su manada, eran los únicos con el privilegio de ver a Hydra y Superior así, tan amorosos y humanos. A diferencia del mundo exterior, que solo los veían en su rol de villanos o monstruos como algunos le llamaban.

—Bueno, bueno ¿Qué tenemos aquí?—terminó con la dulce escena familiar para pasar al trabajo. Amplió y movió las imágenes que proyectaban el holograma.—¿Shield otra vez?

—Parece que han tomado la iniciativa esta vez, con armas más pesadas y de alto calibre que las anteriores—hablo Bruce, su queridísimo hermano de ciencias y el hombre capaz de soportar a Hulk.

—¿Por el este? ¿Por qué?—James tomo su mentón pensativo.—No tenemos nada por allí ¿O si punk?—se dirigió a su jefe, que gracias a cualquier deidad, es su “hermano”.

Steven negó todavía abrazado al adolescente.

—Absolutamente nada, solo la ciudad carbonizada y uno que otros de nuestros agentes cuidando la zona.

—Brock está en ese grupo—acoto la pelirroja mientras jugueteaba distraídamente con el cabello de Barnes.

—Así es, es uno de mis mejores y más fieles agentes.