Malas interpretaciones

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Realmente tuve que caminar mucho, a medio camino estaba segura de que ya se habían dado cuenta de mi ausencia y probablemente Dereck ya habría vuelto de su búsqueda de Erick para emprender la mía, realmente no lo estaba ayudando a hacer más fácil su trabajo.
Más entrada la noche llegue a una carretera, afortunadamente un camión se descompuso por ahí, así que cuando un camión vino al rescate de los pasajeros me colé, llegue a la casa de Jane al amanecer, pensé en si seria mejor avisarle a sus padres la razón por la que no ha llegado, incluso cuando el resto de la escuela llego hace unos días, sin embargo eso me haría perder tiempo, agarre valor y me dirigí hacia el risco que se observaba de lejos.

Seguí caminando hasta llegar a la sima del risco, la vista era realmente hermosa, incluso podía ver la casa en la que había vivido, nunca he podido llamarla hogar y eso puede que a Jane no le guste, pero era la verdad, la única razón por la que no podía irme de ahí era Jane y ahora mi hermana estaba aterrada en el fondo de una obscura y tenebrosa cueva con un loco que la había secuestrado.
Llegue a la cubre y me dispuse a bajar hasta la cueva.
- al fin llegas.
Oí a mi espalda, no me sorprendí, ya sabia lo que pasaba.
- Erick- conteste volviéndome para verlo de frente, era sorprendente como no me había fijado en algunos aspectos que nos parecemos, trate de concentrarme- ¿!donde esta!?
- vaya cuanta euforia, deberías calmarte o profecías resbalarte y caer.
Por un momento pude ver en su cara una pequeña chispa de duda, supe que esa era mi oportunidad.
-¿quien te obliga a esto Erick?- pregunte si rodeos -se que tu no quieres hacer esto, déjame ayudarte.
Erick dudo un momento luego se obligo a sonreír.
- ¿en serio?, sabia que eras muy inocente, pero no pensé que rayara en la estupidez, ¿qué te hace creer eso?-
Río como si embridad acabar de decir algo totalmente fuera de lugar, luego me miro a los ojos muy cerio y agregó.
- mis términos son muy simples, tu vida por la de tu hermana.
Me acerca lentamente a Erick
-ya sabes mi respuesta, por eso te la llevaste, pero no te creo capaz de hacerme daño.
Erick se esforzó por no parecer ni sorprendido ni asustado
-no sabes nada de mi.
- se que eres la reencarnación de Caz.- solté sin pensarlo mucho.
Ahora si que Erick parecía sorprendido y se vio la palma de la mano, ahí estaba, era un arco que en lugar de flecha tenía una espada.
- tu sabes que soy,- agregue- sabes que yo soy la reencarnación de Write, soy tu hermana, Erick puedo ayudarte, no te maldigas por esto.
Erick sonrió con la sonrisa más triste que haya visto en mi vida.
- ¿crees poder salvarme de esto? Estas equivocada, yo no tengo salvación, yo me condene cuando mate a tu padres.

Los 6 Originales I: Escritores de DestinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora