EL PROTEGIDO DEL LEÓN

6-LA MARCA

Capitulo con contenido para mayores de 18 años, si no lo eres pues finge que sí....🐷

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Una de las razones por las que muchas parejas decidían ir al cine, era para pasar un momento juntos en aquella sala oscura. Las caricias, besos y susurros se podían percibir entre aquellos que eran acompañados por sus novios o novias. Una experiencia a la que Xiao Zhan jamás se vio expuesto, puesto que aunque salió algunas veces con Darren y otros muchachos anteriormente, siempre sintió una extraña línea entre ellos que no le permitía creer en esa relación. Nunca busco relacionarse con algún humano, ya que también era conciente de que eso podría poner en peligro a quien estuviera a su lado. Pero ahora, sentado en el asiento inclinado hacia atrás, y con el brazo de Wang Yibo rodeando sus hombros y su cabeza recostada cerca de su cuello, no era capaz de controlar a su corazón alocado.

La respiración del castaño caía directamente en su piel, y su cuerpo empezaba a temblar por los nervios de estar con ese León desvergonzado. Trato de prestar atención a la película, decidido a notar cada detalle del supuesto asesino que merodeba a sus víctimas. Sin embargo, nuevamente regresaba a perderse en esos ojos pardos y los labios carnosos de su Protector. Fue cuando el azabache se dió cuenta de un punto que hasta ese instante ignoraba.

Wang Yibo le gustaba muchísimo, desde su forma tan descarada de ser hasta su lado infantil y dulce. Todo de él le encantaba, incluso su voz y su modo de hablar cuando buscaba ponerlo nervioso. El León lo besaba cada que él quería, y lo mimaba hasta llegar al punto de lavar su cabello azabache cuando estaban compartiendo la tina. Era su vergüenza y su miedo lo que no le permitía a sí mismo atreverse.

¿Pero que podía darle la confianza de dejara a su corazón exponerse a te tal peligro?

Pues justamente lo que acababa de asimilar su cerebro. Wang Yibo era su esposo y le prometió que su amor no solo era por ser su Protector, él jamás lo traicionaría.

Con eso en mente, el menor giró su rostro y tomó de las mejillas al otro que sólo se limitó a mirarlo sorprendido por su actitud.

— ¿Siempre vas a ser me fiel y a permanecer a mi lado? ¿No volverás a irte?—cuestionó Xiao Zhan con un tono casi suplicante.

—Soy tu esposo, si me fui fue por que aún eras menor y no quería hacer algo indebido...—sonrió Wang Yibo deleitándose con el color avellana de las  pupilas del Cazador—No me apartaré de tu lado aunque tú mismo me lo ruegues... Y jamás me atreveré a ver a nadie como te veo a tí.

— ¿Lo juras?

—Lo juro... Eres mi todo Zhan...no solo por el vínculo...si no por que amo todo de tí—acarició las manos del menor con dulzura.

—Yo...nunca he sentido ésto antes por nadie...y si te soy sincero me da miedo—bajo la cabeza apenado—Pero te amo, y eres mi esposo... Yo quiero que... ésta noche nosotros... Tú...

Wang Yibo parpadeo ante lo sonrojado que estaba su esposo, tanto por la timidez cálida que desbordaba como por no poder decir realmente lo que quería.

—Esta noche serás mío por primera vez Xiao Zhan...—lo besó en los labios mordiendo con suavidad al separarse— Y después de eso, te tomaré cada noche por el resto de nuestras vidas...