Prólogo.

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Porque nos toca aceptar ser solo amigos
Y al saludarnos, simplemente dar la mano
O conformarnos con un beso en la mejilla
Y hacer de cuenta que en tu vida no soy nada

¿Por qué el amor duele?

Quizá porque fue tan intenso que es difícil arrancarlo de tu vida.
O tal vez porque mi vida solamente era con ella a mi lado. Tiene impregnado su nombre.
Si piensas así te dejaras de lado y de eso no se trata, es indispensable la individualidad del ser, para después unir nuestro amor al alma de alguien más.

[***]

No fue nada fácil acostumbrarme a verla del brazo de alguien más, pero entendí que el único motivo que me seguía manteniendo de pie era verla feliz.
Yo le había hecho tanto daño, cada noche me culpaba por eso, sabía que me lo merecía, ella fue ese ángel, mi angelito de la guarda que siempre me protegió, que creyó en mí, cuando ni yo mismo lo hacía. Siempre estaré agradecido con Lety por un día amarme tanto, porque su amor será la única prueba de que fui un mejor Fernando.

Verla con él solo me ha confirmado algo, que la perdí, y esta vez era para siempre, tenía una esperanza, sentía que todavía me amaba, lo notaba en sus ojos, en aquel beso que le dí, dónde descubrí que era ella la mujer que más amaba.
Pero cada vez que creía que lo nuestro podía volver, era una equivocación, una ilusión de mi tonto corazón, que quería creer que en su memoria todavía quedaban huellas de mi amor, sentía que seguía siendo mía, que un día volvería a mi, fue inútil, pues Lety se alejaba cada vez más de lo nuestro, y así afianzaba su relación... todavía no pudo creer que en tan pocas horas se casara, y estará para toda la vida con alguien más, que no seré yo.

Si eres la luz que iluminaba mi camino
Eres mi pan y mi vino, tal vez, mi sueño prohibido
¿Cómo arrancarte de mi vida, si no hay fuerzas?
¿Cómo olvidarte, si he perdido la paciencia?

Llegó un momento en mi vida que solo pensaba en su felicidad, que yo no importaba, que lo que más deseaba era verla bien; y me daba cuenta que me sentía tan culpable de haberla hecho sufrir, que estaba completamente seguro que yo no la merecía, pero mi corazón se negaba a perderla, se negaba aceptar que jamás volveríamos a estar juntos. Ya no podríamos escribir nuestra historia que quedó inconclusa, que fueron solo pocas líneas en un libro que jamás se leyó, en estos días me he sentido tan mal, desde que ella anunció que estaba con él, que se iba a casar con otro; quien sabe, pero siento que fui tan tonto al pedirle matrimonio una segunda vez, y es que no le menti me casaría con ella mañana mismo, pero el amor no debería ser así...

Dejarlo todo por alguien, dejarte de lado nunca, para mí debe ser mutuo, en donde ambos luchen por lo que más quieren, y lo que más anhelan será no separarse jamás, pero en este amor tardé en darme cuenta que estaba solo en una batalla, que parecía más una tercer guerra mundial que no cesaría jamás.

Yo la amo demasiado, creo que no tengo ni palabras que expliquen realmente lo que siento por Lety, solo puedo sentirlo, pero así como la amo, necesito alejarme, irme, para sanarme, para perdonarme y quizá algún día volver a creer en el amor.

Perdí la cuenta de las veces que le he hablado a Dios
Pidiéndole que, por favor, nunca me olvide
Mientras yo trato de olvidar este imposible
Suena egoísta, tal vez porque yo te amo

¿Cómo olvidarla? Es imposible si la pienso todo el tiempo. No puedo borrar de mi piel sus besos, a cada paso que doy su recuerdo irrumpe en mi vida como un huracán que me hunde cada vez más, arrancarla de mi vida sería como si mi corazón dejara de latir, y mi respiración se quedará inherte, olvidarla sería perder la fuerza, no sé cuántas veces he hablado con Dios porque solo él sabe cuánto la amo, y es el único testigo de que nunca dejaré de hacerlo.

Sin embargo, por primera vez veo que para seguir con una historia debemos darnos tiempo nosotros mismos. Para cerrar un capítulo en la vida y poder abrir otro debes estar limpio, ser consciente de que aquello que vas a dar también podrás recibir, ya que el amor es como ir en un mismo barco, si no zarpan para el mismo lado, no llegarán al destino, así la tempestad este en tu camino, si están juntos todo es posible, pero cuando cada uno ve por su egoísmo, todas las posibilidades no se podrán unir, y lo que te quedará serán los rastros de un inminente Titanic.

Yo no sé si este es ¿El final de nuestra historia? Lo que sí tengo claro es que, sí es mi final de un capítulo que no quiero repetir en mi vida, que necesito modificar, porque no me hace feliz seguir viviendo así, un cambio es lo más indispensable para unir mi vida a lo que más amo del Amor.

La libertad de sentirse para siempre con un verdadero amor de tu vida, un hilo rojo que no rompe solo se estira, que es capaz de soportarlo todo, hasta la misma distancia y soledad, para transformarlo en una bendición de luz infinita.

De qué nos sirve que le demos tiempo al tiempo
Si ya está escrito el final de nuestra historia

La Fea Más Bella: ¿El final de nuestra historia?  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora