- No voy a ir Yerar, no me quiere ver ni en pintura- suspiré mientras me sentaba a plomo en el sofá
Hoy era La última oportunidad, y si no la hubiese cagado como lo había hecho de bien, hubiese ido con los chicos a apoyarle. Pero como la había cagado, no iba a ir para no incomodarle o que le distrayera y perdiera por mi culpa.
Yerar y los chicos marchaban dentro de media hora, y Yerar vino a mi casa hace un rato a intentar convercerme de que fuera, pero que igualmente iba ser nulo, porque no quería aguantar sus miradas de menosprecio hacia a mí.
- Eso es lo que tú piensas, pero él quiere que vayas y le apoyes como has estado haciendo- contraatacó haciendo que lo pensara con más detenimiento
- Entonces, según tú,- le miré a los ojos- Si quiere que tanto vaya, ¿Por qué me sigue sin hablar, sin mirarme a la cara y sin contestarme a mis mensajes?- alcé una ceja espectante a su contestación
- Todos te lo hemos dicho, Javier es gilipollas. Cuando está enfadado, no piensa, se deja llevar por la ira y comete demasiados errores- me contestó- Pero le conozco, y sé que a pesar de que siga enfadado y herido, te quiere demasiado, quiere verte hoy entre el público apoyándole más que nadie- apoyó su mano en mi pierna dándome un pequeño empujón de que fuera con ellos a la competición
Mordí mi labio nerviosa, me estaba haciendo un lío. Mi corazón me decía que fuera con él, que le viera como se clasificaba, que le apoyara; pero luego estaba mi cabeza, que no paraba de decirme que le dejara, que me fuera y así dejaba de lastimarle, aunque también me lastimaba yo.
De repente, mis ojos empezaron a picar por el estrés acumulado de todo esto, hasta sentir como bajaban por mis mejillas. Rápidamente me las sequé con mi mano, y me levanté del sofá para seguir empaquetando cosas.
- No puedo Yerar, de verdad que no puedo ir- negué con la cabeza y le miré de nuevo- No quiero sufrir por ver cómo me trata- me quedé unos segundos en silencio- ¡Me hace daño joder!- alcé la voz sintiendo como aparecía un nudo en mi garganta
Yerar se levantó rápidamente del sofá, y se acercó a mí para abrazarme, rompiendo a llorar entre sus brazos como llevaba haciendo todos estos días.
- Me odio demasiado Yerar; me odio por ser tan gilipollas y no habérselo dicho antes, como tú y los demás me habíais dicho que hiciera; me odio por ser una cabezota y no escuchar los consejos de la gente; me odio por no tener los suficientes huevos de haberlo dicho y afrontar las consecuencias- dije escondida en su pecho mientras seguía soltando lágrimas. Yerar no me decía nada, solamente me estaba escuchando mientras me dejaba caricias para brindarme algo de apoyo- Me odio con todo mi ser- negué con la cabeza mientras se me escapaba un sollozo al final de la palabra
- Isabel, se que te duele, se que tuviste miedo por como reaccionaría y por eso no se lo dijiste. Tuviste tus razones para no hacerlo, y yo no te lo voy a rebatir, no voy a discutir por ello. Pero ahora más que nunca tienes que seguir hacia delante, no te puedes derrumbar ahora cuando vas a empezar un nuevo camino- se separó de mí y me agarró por mis mejillas para que le mirara a la cara mientras me limpiaba mis lágrimas con sus pulgares- Tienes que mirar al frente, peque- sonreí por el apodo con el que me había llamado- No te hundas por lo que ya está hecho, no se puede cambiar el pasado- asentí finalmente y sonreí al sentir sus labios pegados en mi frente haciéndome sentir más segura. Este se separó de mí y sacó su móvil para mirar la hora- Me voy a ir- guardó su móvil- Hablamos, ¿vale?- asentí y le acompañé hasta la puerta de mi casa
- Gracias por todo Yerar, no sabes cuánto te lo agradezco- le sonreí de manera agradecida. Este se acercó a mí con una sonrisa y volvió a abrazarme de nuevo
- No me las des- se separó de mí aún sonriendo- Cuídate- abrió la puerta de mi casa, y antes de cerrar se giró a verme- Nos vemos- asentí sonriendo. Yerar me miró una última vez para finalmente cerrar la puerta
Di una gran bocanada de aire, y me dispuse a seguir empaquetando las cosas, ya que mañana por la mañana vendría el camión de las mudanzas para llevárselo todo a la casa de mis padres en lo que yo encontraba un piso para vivir sola. Solamente dejaría unas cosas para poder pasar la noche mañana, y ya al día siguiente coger el bus y marcharme a Asturias.
(...)
Miré la hora de mi móvil y suspiré. Iba a empezar ya la competición en la que participaba Javi. Dejé la caja encima de mi cama, y me dirigí al salón donde me senté cómodamente. Agarré el mando de la televisión, y entré en YouTube para entrar al canal donde hacían el directo, pulsé donde ponía "Directo" y subí el volumen de la televisión.
La competición había comenzado, estaban ya dos competidores en el centro del escenario, mientras que uno de ellos se movía libremente por allí mientras rimaba con las palabras que aparecía en la pantalla.
Me coloqué aún mejor en el sofá, y presté atención a todo lo que decían mientras celebraba alguna rima buena que decían.
(...)
- ¡No!- alcé la voz sorprendida mientras veía como alzaban la mano de Botta y no de Javi
Vi la cara de Javi de tristeza, se notaba que le dolía perder. Ya no podía clasificarse para la nacional como había soñado tanto de ir.
Este se acercó a Botta, y le abrazó mientras le felicitaba. Todos los competidores salieron corriendo hacia al ganador donde le felicitaban y le abrazaban como había hecho Javi antes.
Quité el directo de la televisión y cogí mi móvil. Me quedé mirando fijamente su contacto mientras me decidía si le escribía o no.
«No sé si lo vas a leer, o si me vas a contestar, pero me da igual. Felicidades por todo lo que has hecho allá en el escenario, se que te hubiese gustado quedar campeón y poder clasificarte, pero todo en esta vida no se puede. No te rindas Javier, aunque hayas perdido lucha por ello, por que se de sobra que a la próxima lo vas a conseguir, vas a quedar campeón y vas a poder clasificarte. Ten por seguro que tus sueños se cumplirán, tarde o temprano, pero su cumplirán, porque eres una persona que se lo merece más que nadie. Buena suerte Javi.»
Envié y apagué el móvil al instante. Me quedé mirando al frente mientras pensaba en lo que había hecho, no sé si lo que había hecho estaba bien, tampoco sabía si lo iba a leer, pero ya estaba enviado y no podía hacer nada para evitarlo.
Suspiré y dejé mi móvil en la mesa para seguir empaquetando mis cosas por donde lo había dejado hace unas horas.
Pues ya solo queda decir que el siguiente capítulo es el final, se acabó casi.
También quería decir que va a estar narrado de otra manera y va a ser la primera vez que lo haga, ya que siempre lo hago en primera persona.
Aparte quería agradeceros por los comentarios y apoyo que dais, no sabía que esta novela iba ser tan bien recibida.
Un saludo💖.
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Como Estrellas (Bnet)
Fanfic"Y le pido a Dios todos los días de rodillas que algún día vuelvas y te quedes aquí." Novela basada en la canción de: Como estrellas de LA YOUNG [TERMINADA]