Doggy y Bunny son otro tipo de Infectados, cuando Doggy y Player van a salvar a Bunny se empezo a formar un lazo de amistad
Un accidente hizo que estos dos no se vieran por un tiempo
Doggy estuvo en una mentira y Bunny tenia nuevos amigos, compañero...
-Hola, Bunny-, decía una figura desconocida entre las sombras, su voz baja y misteriosa resonando en el aire.
Bunny se estremeció de miedo, su corazón latiendo con rapidez en su pecho. Miró a su alrededor, intentando ver quién era la figura, pero la oscuridad era demasiado densa.
-¿Quién eres?-, respondió Bunny, su voz temblorosa y asustada. Se dio un paso atrás, intentando alejarse de la figura.
-¿Quién crees?-, dijo la figura, con una voz baja y misteriosa. Se movió ligeramente, permitiendo que una pequeña cantidad de luz iluminara su rostro. Pero Bunny no pudo ver nada, solo una sombra oscura.
Bunny se sintió confundida y asustada. No sabía qué hacer ni qué decir. Se quedó parada, intentando procesar lo que estaba sucediendo.
-No te lo diré ahora-, respondió la figura. -No tengas miedo. Solo vine a ayudarte-.
Bunny se sintió incrédula. ¿Ayudarla? ¿Por qué? No sabía qué creer ni qué hacer.
-¿ayudarme?-, repitió Bunny, asustada. Se dio un paso atrás, intentando alejarse de la figura.
-Sí, eso-, dijo la figura. -Me parece que tú buscas venganza. ¿No es así?-
Bunny se sintió sorprendida. ¿Cómo sabía eso? ¿Qué sabía sobre ella?
-S-sí-, respondió Bunny, nerviosamente. -Pero ¿cómo lo sabes?-
-Bueno, yo he estado observando a todos-, dijo la figura, con una voz baja y misteriosa.
Bunny se sintió estremecida. ¿Observando a todos? ¿Qué significaba eso?
El silencio que siguió fue profundo y tenso. Bunny se quedó parada, intentando procesar lo que estaba sucediendo. La figura desconocida se mantuvo en silencio, observando a Bunny con una mirada intensa.
-No entiendo-, dijo Bunny, su voz llena de frustración y confusión. -¡Okey! Basta, ire al grano. Yo sé dónde se encuentran esos chicos que tanto buscas, así que te puedo ayudar-.
La figura desconocida se mantuvo en silencio, su rostro oculto en la oscuridad. Bunny se sintió incómoda, su corazón latiendo con rapidez en su pecho.
-No lo sé-, dudó la coneja, su voz temblorosa. -Vamos... no costará nada, te estoy haciendo un favor-.
El silencio que siguió fue opresivo, lleno de tensión y expectativa. Bunny se sintió como si estuviera caminando sobre una cuerda floja, sin saber qué pasaría a continuación.
-Bueno, si no quieres, está bien- , dijo la figura desconocida finalmente, su voz baja y misteriosa.
Pero Bunny no estaba dispuesta a dejar que la oportunidad se le escapara. -Espera!-, gritó, su voz llena de desesperación y ansiedad. -Está bien, dime. ¿Dónde están?-.
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