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Sin vida

Baren, quien se encontraba haciendo vigilancia en el lugar, se acercó a la celda de Bunny, su mirada tranquila y atenta se posó en la coneja dormida. Algo en su postura le pareció extraño, como si estuviera demasiado quieta, demasiado relajada.

Baren se inclinó ligeramente hacia adelante, su nariz olfateando el aire en busca de cualquier señal de algo fuera de lo común. Pero no detectó nada, solo el olor a coneja y a la celda en sí.

Sin embargo, su instinto le decía que algo no estaba bien. Baren se enderezó y se dirigió hacia la puerta, su mano extendida para llamar a alguien. Pero se detuvo, su mirada volviendo a posarse en Bunny.

Algo en su expresión la hizo dudar. ¿Debería llamar a Willow? ¿O debería intentar despertar a Bunny primero? Baren se quedó allí, indeciso, mientras la coneja dormida seguía sin moverse.

Baren frunció el ceño, su expresión reflejando una creciente preocupación. Metió su mano a través de las barras de hierro, agitó a Bunny con un poco más de fuerza, intentando despertarla, pero la coneja seguía sin reaccionar.

Baren retiró su mano y se inclinó hacia adelante, su nariz casi tocando la de Bunny. La olfateó, buscando cualquier señal de vida o movimiento, pero no detectó nada.

De repente, Baren se enderezó y se dirigió hacia la puerta, su expresión decidida. Sabía que tenía que informar a Willow sobre el estado de Bunny. Algo no estaba bien, y Baren tenía la sensación de que era algo grave.

Con un movimiento rápido, Baren abrió la puerta y salió al pasillo, cerrando la puerta detrás de el. Tenía que informarle sobre Bunny, y rápido.

Baren corrió por el pasillo, su corazón latiendo con rapidez. Llegó a la habitación de Willow y golpeó la puerta con fuerza.

-¡Willow! ¡Despierta!-, gritó Baren, su voz urgente y preocupada.

La puerta se abrió lentamente y Willow apareció en el umbral, su expresión adormilada y confundida.

-¿Qué pasa, Baren?-, preguntó Willow, frotándose los ojos.

Baren respiró hondo antes de hablar, su voz llena de urgencia.

-Es la coneja... no responde. Está en la celda, pero no se despierta. No sé qué le pasa-, dijo Baren, su rostro lleno de preocupación.

Willow se enderezó de golpe, su expresión de sorpresa y alarma se transformó rápidamente en una de cálculo y estrategia. Su mirada se volvió intensa y calculadora, como si estuviera evaluando las consecuencias de la situación.

-Ella es... es crucial para mis planes-, dijo Willow, su voz baja y urgente. -Si ella no está disponible, todo se derrumba para mi-.

Baren se sintió confundido por la reacción de Willow. ¿Por qué la coneja era tan importante para ella? ¿Y qué planes estaban hablando? Pero antes de que pudiera hacer alguna pregunta, Willow ya estaba dando órdenes.

Willow se volvió hacia Baren, su mirada intensa y su voz llena de urgencia y un toque de enfado.

-¡Ve y busca a Katie, ahora mismo!-, exclamó Willow. -Necesito que examine a la coneja de inmediato. ¡No hay tiempo que perder!-.

La voz de Willow era firme y autoritaria, y Baren se sintió impulsado a actuar con rapidez. Salió corriendo de la habitación, en busca de Katie y con la sensación de que algo importante estaba en juego.

Baren corrió por el pasillo, su corazón latiendo con rapidez. Llegó a los dormitorios de las chicas y abrió la puerta, llamando a gritos a Katie.

-¡Katie! ¡Katie, despierta! ¡Necesito que vengas conmigo de inmediato!-, gritó Baren, su voz urgente y preocupada.

𐙚⋆°.ᴅᴏɢɢʏxʙᴜɴɴʏᡣ𐭩𝒶𝓃 𝓊𝓃𝑒𝓍𝓅𝑒𝒸𝓉𝑒𝒹 𝓁𝑜𝓋𝑒𖦹๋࣭⭑[ᵣₒbₗₒₓ ₚᵢggy ₐᵤ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora