3

2.4K 367 16
                                        

Se removió intranquilo una vez más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Se removió intranquilo una vez más.

El sudor llenaba su frente de forma incesante.

El dolor en su vientre se agolpaba, siendo cada vez más fuertes con cada minuto que pasaba.

Se había dado interminables duchas tratando de calmar su cuerpo y rezando para que todo acabara, lo cual no había funcionado del todo, por lo que terminó vaciando el hielo de la nevera de la habitación y lo había tirado a la bañera, sumergiendo completamente su cuerpo en el agua helada, logrando al fin calmar un poco su extraña sensación.

El personal del aeropuerto se había comunicado indicándole que las tormentas tropicales continuaban, y el rubio habría cambiado de destino sin pensarlo sino fuera porque no era capaz de mantenerse en pie por sí mismo. De manera que solo logró confirmarles que aguardaría a que las cosas pudieran resolverse y que cualquier gasto lo cargaran en su cuenta.

Desde la empresa se volvieron a disculpar y mencionaron que no hacía falta, ya que alguien más había pagado cualquier gasto extra que se pudiera ocasionar por fuera de lo que habían pactado, y Park no tuvo que hilar mucho para imaginarse de quién se trataba.

El menor, horas atrás cuando todavía podía valerse por sí mismo, había recibido jarrones y jarrones llenos de rosas azules que terminaron ocupando gran parte del dormitorio.

JiMin podría haberse rehusado a recibirlas, pero de todos los presentes y obsequios que le habían dado en su vida, jamás le habían dado flores y menos unas tan hermosas. Por esto, dejó que el personal del hotel las acomodara en diferentes lugares.

No pudo evitar buscar el significado de éstas, sorprendiéndose una vez más ante lo descubierto:

"... Regalar una rosa azul significa un amor pasional e imposible hacia la persona a quien la obsequies..."

Aceptaba que había sido una buena jugada y debía de darle el crédito que se merecía, no era lo suficiente cómo para terminar de despertar su interés y arriesgarse, pero no podía negar que era un bonito detalle.

El rubio visualizó una tarjeta, la cual terminó por desechar en uno de los cestos de forma desinteresada. Una cosa sería aceptar una ofrenda, otra sería tener que corresponder con lo que sea que el señor Min le hubiera propuesto.

"La curiosidad mató al gato", y Kitty lo había aprendido con creces a lo largo de toda su vida.

Su cabeza daba vueltas y estaba comenzando a delirar producto de la fiebre. JiMin se sentía incapaz de poder pedir ayuda, siendo su único pensamiento el ser rescatado por un magnífico ejemplar masculino con el que se había cruzado el día anterior.

— Hmn — gimió por lo bajo.

Interminables calambres estaba tomando lo que quedaba de su cordura, llevándole a límites del dolor que no sabía que podía soportar.

Animals | YM | Omegaverse (Adap)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora