10 | Reencuentro

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Mystic Falls

Narrador Externo:

Horas más tarde. Stefan está apoyado en el marco de la puerta de la habitación de Ameli , mientras la observa practicar magia.

- ¿Cómo vas? - cuestionó mientras entraba al cuarto -

- He progresado mucho estos últimos meses. - responde con una sonrisa - Mira esto Stef -

Se levanta de la cama , busca un cojín y los rompe dejando caer cientos de plumas blancas sobre la cama. El vampiro frunce el seño en señal de confusión.

Ella estira sus brazos en dirección a las plumas , su cara sería y concentrada. Las plumas se elevan lentamente en el aire , con delicadeza , hasta rodearlos a ambos y estar esparcidas por toda la habitación.

- Wow - murmura Stefan mirando a su alrededor con un brillo de asombro resaltando en sus ojos - Es maravilloso -

- Si - reconoce la castaña mirando su cuarto - Hace unos días aprendí el hechizo y quería probarlo con plumas -

Ameli chasquear los dedos y las plumas , a paso lento , vuelven dentro del cojín y este se cierra como si nada hubiera pasado.

- Eres una gran bruja , Am - admite mientras la mira encogerse de hombros -

- Gracias , Stef - se sonríe - Oye....me muero de hambre - se queja y el vampiro suelta una risa - Mi estómago está sufriendo y..- lo mira incrédula - No te rías , tonto - lo empuja levemente -

- Tu siempre tienes hambre Ameli - duce entre risas -

- Eso no es verdad - niega - Además no me estaría quejando si no te hubieras comido el último pedazo de pastel esta tarde - se cruza de brazos - Se suponía que era para mí - levanta las cejas -

- De acuerdo , ya - para de reír con dificultad - Iré a preparar la cena ¿quieres pasta? - cuestiona mientras se levanta de la cama -

- Si , eso suena bien - asiente -

- Está bien - abre la puerta pero se gira antes de cerrarla por completo - Ah y por cierto , Am - ella lo mira - Ese pastel estaba delicioso - se toca el estómago -

- Stefan - con magia le lanza un cojín pero el oji-verde se va antes de que pueda tocarlo y se esté se estrella contra la puerta -

La castaña hace una mueca por su fallo y rueda los ojos divertida. Se comió su pastel de frutilla. Era suyo y ahora está en el estómago de su amigo.

[...]

- Veo un árbol alto , y otro igual y otro por allí - lo señala - y otro por allá. A un lado de tí también hay uno Elijah -

- Kol - suspira y lo mira - Se que hay un árbol a mi lado y a nuestro alrededor - le dice con obviedad - Tengo ojos , puedo ver - sigue caminando -

- Que casualidad - finge asombro - Yo también tengo ojos y no veo ninguna cabaña en ningún lado - se queja -

- Es más dificultoso caminar en el medio del bosque de noche y con luz tan escasa , Kol. Solo hay que seguir caminando un poco más -

El Regreso de Ameli Mikaelson - Petrova [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora