Disparo

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Estaba feliz, tenía a mi barbitas de nuevo conmigo. Ahora podríamos tener esa vida que yo había añorado y que ya mis padres consentían, aunque en verdad me daba igual lo que dijeran, quería estar con él. Y así pasé el tiempo que estuvieron haciéndole pruebas, sentada en el suelo de un pasillo de hospital pensando en mi vida con Alvaro. Pero por desgracia no todo sale como queremos y en mi vida nada sale como quiero.
-Sandra ya puede pasar.
Asentí y abracé a mis amigos, andando poco a poco hasta su habitación. Tras horas podría volver a ver esa mirada, esa que tanto había echado de menos.
-Pero señorita, tiene que saber una cosa.
Escuché a aquel doctor pero de forma inconsciente le ignoré y entré a la habitación.
-Hola barbitas. ¿Qué tal te encuentras?
Me acerqué a él para darle un beso cuando me hizo la cobra. ¿Qué? ¿Me acababa de hacer la cobra?
-Alvaro, ¿estás enfadado conmigo?
-Lo siento pero se ha equivocado. No sé quien es ese barbitas y no puedo estar enfadado con alguien que no conozco.
-¿Qué?
No me conocía, se había olvidado de mi. ¿Como era posible? Me senté poco a poco en el suelo a la vez que empecé a llorar. Él se sentó junto a mi, pasando un brazo por mi espalda.
-Señorita, no llore. Se ha confundido de persona pero no es para tanto.
-¿No me recuerdas?
-Lo siento pero no, ¿quién eres?
-Soy...creo que sino te acuerdes de nada es mejor que lo sepas todo poco a poco.
Asintió y me abrazó. Había echado mucho de menos sus abrazos, aunque no me recordara eran igual de especiales. En ese momento llegó Alberto, quien al verme llorando se preocupó.
-Sandra, ¿qué pasa? ¿Estás bien?
-¡Alberto! Como me ignoras.
Miré asombrada a Alvaro, se acordaba de Alberto.
-Perdón es que Sandra esta llorando. ¿Tú qué tal?
-Bueno, solo se que estaba paseando por el parque y acabé aquí. Y que esta chica a la que conoces no me suena.
-¿No te suena? ¡Que cachondo el Alvaro! ¡Qué dice que no se acuerda de Sandra!
-Alberto, no me acuerdo de ella.
-¿Y de Niall? ¿Nuria?
-De Niall si, es mi amigo, como tú.
Un pensamiento egoísta recorrió mi mente, no se acordaba de mi pero tampoco de Nuria. Y entonces ella entró a la habitación junto a Niall. Me extrañó que Carlos no estuviera junto a ellos, seguramente se habría ido a trabajar.
-¡Niall!
-¡Alvaro!
Ambos se abrazaron y le susurró algo al odio a mi irlandés, quien puso mala cara y se alejó de Alvaro negando. ¿Que le habría dicho para que estuviera tan molesto?
-Bueno Sandra, me voy que no sé que le ha pasado a Niall y se le veía enfadado.
-Vale Nuria.
Se fue y me senté en la camilla de Alvaro, observando como charlaba con Alberto. Saqué el movil y me metí a Twitter, pero en poco tiempo lo dejé, me había llamado la atención la conversación que tenían.
-Alberto ha sido mirarla y algo dentro de mi ha surgido. No la recordaba, solo os recordaba a Niall y a ti, tampoco a su amiga.
Me salió una sonrisa, no me recordaba pero seguía enamorado de mi. Ahora si que tendríamos un futuro.
-¿De verdad? No sabes la alegría que me has dado. ¿Por qué no la dices lo que sientes?
-Porque tiene novio y porque su mejor amiga se la ve que está muy interesada por mi, que me quiere.
Se me partió el corazón en mil pedazos y salí de esa habitación observando la cara de Alberto, quien estaba asombrado. Busqué a Nuria, que estaba abrazada a Niall y me dirigí allí.
-Sandra cielo, ¿estás bien?
-Claro, ¿por qué no estarlo?
-Estas llorando y tu cara no es que sea de felicidad. Además como amiga tuya se cuando no estás bien.
-Pues no, no estoy bien. Pero déjame tranquila, ahora no quiero estar contigo.
-¿Qué? ¿Tiene que ver con Alvaro?
Asentí mientras me secaba las lagrimas. Niall estaba cabizbajo, pues intuía porque estaba así.
-No es mi culpa si tu novio loco se ha intentado suicidar y ahora no se acuerda de ti.
-Ya se que no es tu culpa pero no se como pero se ha enamorado de ti. Y no vuelvas a decir eso, el no es ningún loco.
-¿Que? ¿Como que se ha enamorado de mi? ¿Y luego no puedo llamarle loco?
Niall miró a Nuria, pidiéndola que se comportara.
-Perdón Sandra, es que me parece irreal.
-A la que se lo parece es a mi. Se despierta y no me recuerda pero si se enamora de mi mejor amiga.
-Te diría lo siento pero no tengo la culpa. El corazón es así. Seguro que te recuerda y se olvida de mi. Además no voy a dejar a Niall por él.
-Lo sé.
En ese momento Alvaro salió de la habitación junto a Alberto, quien miraba con mala cara a mi barbitas, o mejor dicho, al barbitas de Nuria. Alvaro clavó la mirada en Nuria, que estaba bastante alterada.
-¿Qué ha pasado? ¿Os habéis peleado?
-Si hijo mío si, nos hemos peleado y por ti.
Nuria puso un tono sarcástico pero Alvaro se lo creyó. Me miró algo molesto. ¿Molesto? A veces daban ganas de estamparle una maceta en toda la cara. ¿Por qué me miraba así?
-¿Por qué os habéis peleado?
Miró a Nuria pidiendo una explicación y luego me miró a mi, aunque rápidamente pasó a mirar de nuevo a mi amiga.
-Escuché lo que le has dicho a Alberto, lo que sientes por Nuria.
-Sandra no se quien te crees que soy ni que crees que siento por ti pero estás equivocada. No estoy interesado en ti.
Intenté no llorar y pensé en que yo era un estorbo así que hice lo que tan bien se me daba hacer, mentí a Alvaro, quizás para que con esa mentira pudiera estar cerca de el sin que se sintiera molesto.
-¿No sientes nada por mi? Es una pena que no me recuerdes. Que no recuerdes a tu hermana,¿no? Me dolió que la quisieras a ella y de mi ni te acordaras.
La cara de Alberto era para enmarcarla, tenía los ojos abiertos como platos. Niall miraba enfadado a Alvaro, ya que podía perder a Nuria, quien me miraba pensando que estaba loca.
-¿Eres mi hermana?
-Sí.
-No. Sandra no es tu hermana.
Todos miramos a Niall. ¿Por qué siempre había alguien que metía la pata?
-Me estáis liando. ¿Entonces quién es?
-Tu novia. Esa persona de la que estabas tan enamorado que al no poder tenerla te intentaste suicidar. Y yo soy su amigo y novia de la que, según tú y que no te permito volver a decirlo, da gusto mirar. Acércate a ella y te juro que acabas peor de lo que estás.
-Mira al rubio este, ¿crees que me das miedo? Es ella quien decide con quien estar.
Niall se acercó a Alvaro decidido a pegarle. Justo se escuchó la voz de Alberto.
-Niall cuidado que te deja como la otra vez, vas a acabar sangrando.
Alvaro rió.
-Al parecer esto ya se ha repetido y has perdido, ¿también era por ella la pelea? Al parecer yo he tenido buen gusto.
-No era por ella, era por la otra chica, por Sandra. No te mereces que sienta eso por ti.
Niall enfurecido le dio un puñetazo en la nariz, la cual empezó a sangrar. Alvaro no se lo pensó dos veces y le devolvió el golpe, que dejó a mi rubio en el suelo. En esos momentos y no me preguntéis cómo, llegó Carlos. Y así estábamos todos en el pasillo, incrédulos mirando la estampa.
-¿Que ha pasado?
Miré a Carlos y acto seguido a Alvaro, entonces comprendió que Alvaro había agredido a Niall y Carlos, conociendo al irlandés supo que no se alteraba con facilidad, por lo que sacó la pistola que tenía y apuntó a Alvaro.
-Manos arriba. No te muevas.
-¿Ya habéis llamado a la policía? Si solo estábamos jugando. ¿Quieres jugar tu también?
-¿Acabas de amenazar a un agente de policía?
-No. Jamás haría eso. Solo te he ofrecido jugar.
Carlos le miró mal y le lanzó la pistola a Nuria.
-Juguemos pues.
Se lanzó a Alvaro. Yo ya sabía que Carlos le tenía cierto rencor porque mis sentimientos hacia el no eran iguales que a los de Alvaro, así que no le costó mucho meterse en una pelea con el. Mientras me perdía en mis pensamientos Carlos acabó tirado en el suelo y Alvaro se dirigía a Nuria, quien aterrada disparó, intentando dar a Alvaro, aunque dio a una planta. Nuria no es que tuviera puntería. Y Alvaro se abalanzó sobre ella, dejándola también en el suelo y agarrando la pistola. Y apuntó hacia Alberto. Alvaro se había vuelto loco. Temí por la vida de mi amigo y la intenté salvar, aunque estaba paralizada por el miedo y el asombro. Entonces miré hacia una maceta y sin pensármelo dos veces se la lancé a Alvaro a la cabeza, dejándolo tirado en el suelo inconsciente.
-Dios Sandra, me has salvado la vida.
Corrí a abrazar a Alberto, gracias a mi estaba vivo.
-¿Los demás estáis bien?
Pero ninguno contestó, Nuria estaba demasiado ocupada hiperventilando al igual que Niall y Carlos miraba a Alvaro concentrado. Y en ese momento llegó un guarda de seguridad alarmado por el escándalo, a buenas horas.

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