ᵡᵡᵛᴵˑ 𝗧𝗵𝗲 𝗲𝗻𝗱 𝗼𝗳 𝗧𝗿𝗮𝗴𝗲𝗱𝘆

214 31 0
                                    

El Final de la Tragedia



💜



Camie fue la primera en notar lo que había sacado el peliazul de entre sus bolsillos.

—Tomura, no... No dispares. —la castaña rogó viendo el arma apegada a mi cabeza.


Un tiro de la pistola y yo era historia.


Todos se quedaron fríos a excepción de los del grupo de Touya, quienes posiblemente pasaban por eso a menudo.


—Si vienes conmigo dejaré de molestar a todos tus amigos —habló el pelinegro levantándose. —Así nadie saldrá lastimado...

No creí que llegaría a este punto de amenazarme con un arma. Pensé que él aún mantenía un poco de conciencia dentro de su cabeza. 


Ha perdido la razón...


—Touya, basta... —Todoroki respondió un poco tembloroso. Él no estaría tan nervioso si su hermano fuera el que portará el arma... Solo que incluso él le tenía desconfianza a Shigaraki.

—Cállate Shoto —le gritó. —Deja que ella responda.


Todos me regresaron a ver, esperando a que dijera algo. Pero fue en vano porque solo consiguieron que les devuelva la mirada, no estaba dispuesta a contestar a ninguna de sus demandas.


Y al mismo tiempo, me preguntaba a mí misma ¿el porqué llegar tan lejos con esto?


Quizás esto se debía por algo más...


Con mis pensamientos en quien sabe dónde, el silencio se alargó demasiado como para que el sonido del arma se escuchará fuerte y claro.

—Talvez necesitas algo de motivación —replico el peliazul sin siquiera pensar las cosas. 


Eso hizo darme cuenta.


—Si vas a dispararme ¿no es así? —mire de reojo al chico que me estaba apuntando.

—No te lo tomes a mal, sabes que no es personal —admitió sus intenciones. —Simplemente necesito que Touya me sirva para que cumpla su trabajo. Pero está muy obsesionado contigo, así que necesito deshacerme de la distracción. Nada más.


Al decir eso Touya quedó sorprendido. Al parecer no tenía idea de que todo esto se debía a algún interés por parte de sus supuestos "amigos".


—Tomura... ¿Qué rayos...? —cuestiono el mencionado.

—Tranquilo. Esto no durará mucho, y luego espero que cumplas con tu rol sin que nada te moleste —sonrió malicioso y de nuevo que algo en el arma sonara.


Kirishima quien veía todo desde solo unos pasos atrás quiso de alguna forma detener lo que iba a pasar.

—Oigan. No hay que recurrir a estos extremos... Por qué no mejor nos calmamos y hablamos tranquilamente. Si quieren les invito un café, o unas hamburguesas... Oh.

Su comentario burlón no fue nada bien recibido por parte de los delincuentes. Gracias a eso, el arma de Shigaraki a punto a su persona por unos segundos con el motivo de que dejara de decir cosas estúpidas.

—E-está bien. Con un simple no era suficiente... —respondió intranquilo, alzando ambas manos para que no decidan meter una bala en su cabeza.


El alivio me duro muy poco, ya que el arma no demoró mucho en retornar hacia mí aun dispuesta a acabar con mi vida.


Los demás obviamente no moverían ni un músculo por si eso hacía que el peliazul apretara el gatillo.


Aunque, sabía que igualmente lo haría.


—Ahora, despídanse de su amiguita.


Dispuesto a jalar el gatillo, empezó a empujar su dedo índice por el arma.

Cerré los ojos fuertemente cuando escuché él disparó retumbar por el lugar. Al abrirlo noté en la pared la marca de la bala.


Había fallado.


Volteé a mirarlo y vi que Bakugo, de alguna forma, consiguió empujar a Shigaraki errando su objetivo.

Con ese ruido, no solo fuimos nosotros los que nos asustamos sino que la gente de alrededor se percató de lo que sucedía.

Era hora de que ellos se vayan antes de que la policía se involucre, o el plan de Shigaraki estuviera más que arruinado. Así es como Touya, Tomura, y los demás se metieron en el callejón y desaparecieron no teniendo más opción.


Yo, aparte de quedar en shock, no me creía como el idiota de Bakugo hizo eso. ¿No pensó en que le podrían haber disparado también?

—Bakugo... —pronuncie su nombre aún sin lograr procesar que casi muero, hace solo unos segundos atrás.


Viendo cómo quedé pasmada, habló —No te quedes ahí parada, vámonos. —Aún se lo veía adolorido, pero no parecía importarle en lo absoluto

—A-ah, sí... —regrese a la normalidad. —Ven sujetarte de mí — obligué a que el chico pusiera su brazo por encima de mi hombro y así ayudarlo a caminar.

El pelirrojo que se metió en el pleito tarde, no tardo en hacer lo mismo y tomar el brazo de Katsuki poniéndolo alrededor suyo.

—Parece que necesitan un poco de ayuda. —dijo en tono jocoso.

Estaba tan feliz de volver a Kirishima, aunque preferiría que hubiera sido en otra ocasión —Si —le respondí sonriente.

Bakugo, quien definitivamente no quería que lo ayudarán, se reservó sus palabras para sí mismo antes de arruinar el bonito momento.

—Ya, solo vámonos.

Ambos respondimos con un simple asentir.


Por otro lado, Todoroki fue a ver a Camie quien quedó bastante traumada por lo sucedido. Bueno al igual que todos, solo que ella se encontraba pensando en que casi matan a alguien por una tontería como son sus tontos celos.

Creo que desde ese momento, ella se mantendría alejada de Touya y su grupo antes de que le pasara lo mismo... o peor.


Un amorío no lo valía, definitivamente.


Así ellos dos y nosotros tres partimos en diferentes caminos aquella noche.



To Kill a Ghost ┃幽霊を殺すにはDonde viven las historias. Descúbrelo ahora