𝚆𝚘𝚖𝚊𝚗 𝚇 / 𝑺𝒕𝒆𝒗𝒆 𝑹𝒐𝒈𝒆𝒓𝒔 II

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Steve busco a Malia por todo el edificio, llamo a su celular pero no respondía e incluso viajo hasta la escuela pensado que estaría allí pero no fue así.

Por otra parte, para Tony fue más sencillo hallarla, solo le llevo unos minutos. Viajo a Canadá, pero para ese entonces la noche ya había llegado.

Entro a la casa en las montañas y se dirigió directamente al balcón, encontrándose con el amor de su vida meciendose en una silla con las rodillas al pecho y observando las estrellas.

- Las estrellas son más bellas en esta parte del mundo - comento la mujer sin verlo - Tienen un brillo especial -

- Steve te está buscando como loco - dijo Tony sentándose a su lado - Está preocupado por tí, te fuiste sin decirle nada a nadie -

- Pero tú pudiste encontrarme - dijo Malia desviando la mirada hacia él - Por qué no le dijiste mi paradero? -

- Porque sabes que disfruto verlo sufrir - respondió divertido haciéndola reír - O... simplemente quería pasar un tiempo contigo, sin interrupciones de esposos celosos o adolescentes gritando por todas partes -

- Nuestra vida es algo complicada - río Malia -

Ambos rieron por un intervalo corto de segundos y luego solo se dedicaron a ver las estrellas, en silencio.

- No firmaras, verdad? - pregunto Stark, rompiendo el silencio y provocando que las miradas de ambos se crucen -

- No puedo hacerlo, Tony - respondió Malia en lo que pareció ser un susurro - Sería ir en contra de todo lo que eh luchado en mi vida -

- Qué harás? Te vas a retirar y fingir tener una vida normal? Dejarás que ellos ganen? - la cuestiono Tony - Tú no eres así, Mal -

- Firmar sería dar por hecho que ellos ganaron - dijo Malia mientras bajaba sus piernas y se acomodaba en la silla para verlo mejor - Jamás me volveré una marioneta del gobierno, ellos mataron a mi padre, mis amigos y todo lo que conocía -

- Cuál es tu plan? -

- No lo se - respondió con honestidad - Pero si debo luchar, que así sea - sentenció con seguridad -

- Los niños aún son menores de edad y técnicamente son Vengadores - comento el castaño, bajando la mirada - Deberán firmar o retirarse para siempre -

- Ellos no son Vengadores, Tony - contradijo Malia - Y no firmaran esos acuerdos hasta que lo sean -

- Tú crees que lo hagan? - cuestiono -

- Sabes que no - respondió Malia con  media sonrisa de orgullo - Mis niños no nacieron para obvedecer órdenes-

- Nacieron para romperlas - agrego Tony en un intento fallido de ocultar su orgullo -

- Magula se ve más brillante desde aquí - comento la coyote, cambiando de tema completamente - Es hermosa... - agrego en un susurro admirando la estrella en el cielo -

- Sin duda lo es - afirmó Tony con una dulce sonrisa de labios, sin dejar de observar el perfíl Malia -

***

A la mañana siguiente la mayor parte del equipo encontraba reunido en la sala de descanso, dónde usualmente pasaban su tiempo libre.

Sam y Rhodes discutían sobre los acuerdos hasta que Tony los interrumpió con la breve historia de un joven que falleció en la misión de Sokovia.

- Ey... - susurro Steve colocando una mano sobre el muslo de Malia - Está todo en orden? - pregunto al notar que no había dicho nada en un largo tiempo y solo tenía la mirada perdida en algún punto de la habitación -

- Si, no te preocupes - le respondió con una leve sonrisa de labios pero a Steve no pareció convencerse - Solo... -

La frase de Malia se vio interrumpida al momento que un mensaje llegó a su móvil; lo tomo y al momento de leer su contenido todo su cuerpo se paralizó.

- Cielo? - la llamo Steve preocupado -

- Debo irme - informo ante de retirarse rápidamente dejando a todos desconcertados en el lugar -

- Iré por ella - dijo Steve y salió corriendo tras la coyote -

Su búsqueda no fue demasiado larga ya que en solo unos minutos la encontró en las escaleras.

Estaba sentada con la cabeza entre las piernas y abrazándose a mi misma, mientras un leve sollozo hacia eco en el lugar vacío. 

Steve no dijo nada y solo se sentó a su lado, abrazándola con fuerza dándole todo su apoyo.

- Ella...ya no está - dijo entre llantos - Peggy se fue, Steve -

El rubio soltó un suspiro y un nudo se formó en su garganta. Si bien no era muy cercano a la agente Cárter, ella formaba parte de una vida en la que alguna vez pudo llamar suya y sabía cuan importante era esa persona para su esposa.

- Lo lamentó - le susurró mientras Mal se aferraba más a él -

***

El vuelo a Londres fue silencioso. Malia había decidido dejar a sus hijos con Natasha para evitarles verla de esa forma y solo viajo con Steve y Sam quienes se negaron a dejarla ir sola. 

La ceremonia fue larga o al menos para Malia e incluso Sharon estuvo presente y dijo algunas palabras hacia su tía.

Al final, en la iglesia solo quedó Malia. Steve se había retirado para darle un momento a solas, esperándola en el café de al lado junto a Sam.

Natasha entro al lugar, haciendo resonar sus tacones al caminar por el pasillo y se colocó en frente de su mejor amiga.

- Cuando Steve se hundió en el hielo, Peggy y Howard fueron los únicos que siempre estuvieron - comento la castaña mirando sus pies - Peggy nunca dejo que me rindiera y en parte por eso hoy estoy aquí...fue una suerte haberla tenido -

Levanto la mirada encontrándose con los de Romanoff, quién la escuchaba atentamente.

- Y ella también te tuvo - le dijo con una sonrisa comprensiva y dulce -

Mal asintió con su cabeza varias veces y al final soltó un suspiro cansado.

- Quiénes firmaron? - pregunto intentando entrar en su papel de vengadora pero fue inútil, aún se sentía terrible -

- Tony, Rodhey, Visión y Pietro Aunque sea difícil de creer - respondió Nat -

- Qué hay de Clint? -

- Dice que se retiró -

- Wanda? -

- Aún no lo sabe - respondió nuevamente la rusa - Me voy a Viena por la firma de los acuerdos...aún hay mucho espacio en el jet, por si quieres acompañarme -

Malia no respondió solo suspiro. Tenía un nudo en la garganta y solo quería llorar en un rincón esperando a que por arte de magia todos sus problemas se arreglen.

- A veces el camino más fácil, no significa que sea incorrecto - dijo Natasha acercándose a ella - Lo importante es seguir juntos, somos una familia -

- Y cuál es el sacrificio por eso? - cuestiono la castaña - Perdona, Nat...pero no lo haré y Steve tampoco lo hará -

- Lo se, ambos son testarudos y por eso están juntos - intento bromear la rusa -

- Entonces...por qué estás aquí? - pregunto confundida -

- Eres mi mejor amiga, no quería que estuvieras sola - respondió Natasha con una sonrisa de labios -

- No somos amigas, Nat - contradijo Malia ganándose una mala mirada - Eres mi hermana - aclaro y la pelirroja se acercó para abrazarla -

***