capítulo 02| Monstruo

300 29 103
                                    

Mordió levemente la barra de chocolate viendo en su televisión como un hombre agarraba a la doctora Apolo y la usaba como rehén para que le hicieran caso y lo escucharan y la pudiera llevar a donde estaba su hija

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Mordió levemente la barra de chocolate viendo en su televisión como un hombre agarraba a la doctora Apolo y la usaba como rehén para que le hicieran caso y lo escucharan y la pudiera llevar a donde estaba su hija. El lugar era un caos, los espectadores salían con pánico del lugar y los guardias intentaban que el señor dejara a la doctora Apolo.

—¡DOCTORA APOLO! ¡NO!

Se metió la barra completa a su boca de los nervios que le estaban atacando por ver el jiro inesperado que tomó las cosas, nunca pensó que el hombre agarraria a la doctora Apolo así.

Metió su mano en el bol que traía consigo para sacar otro bombón, pero cuando la sintió vacía volteo a ver de inmediato y efectivamente, estaba vacío, soltó un gritó de enojo por que estaban pasando la mejor parte de los sucesos y sus bombones se terminaban.

—Lo que me faltaba —exclamó con pesadez dejando caer su mano de forma brusca contra el bol, soltó un pequeño quejido, le había dolido—, ni modo tocó ir por más bombones, rayos, ¿a donde avente el control remoto?

Volteó a ver a todos lados para ver si tenía suerte y encontraba el control remoto, desde que llegó a su casa lo primero que hizo fue cambiarse a su pijama, ponerse sus pantuflas de conejo e ir por bocadillos, la mayoría dulces, pero estuvo treinta minutos buscando el control por toda su casa que al final se rindió y prefirió prenderla de la forma más fácil, sí, desde la tele, y ahí mismo puso la doctora Apolo.

Se levanto del sofá hechandole un pequeño vistazo a sus pequeños gatitos, estaban hechandos con la manta de lana azul estando los dos acurrucados durmiendo plácidamente.

Se metió rápido a su cocina buscando en unos cajones donde dejaba sus dulces otra bolsa de bombones, pero no encontró nada, buscó en otro cajón y encotro uno, los saco llendo a su refrigerador para sacar unos chocorobots, cuando la abrió no había nada, cosa que le confundió, ella recordaba haber dejando un paquete entero de chocorobots en su refrigerador para comer más tarde, pero no había nada.

—¡MIS CHOCOROBOTS, CONCHETUMARE! ¡GASTE MUCHO EN ELLOS! ¡AAAAAAHHH!

El gritó de la doctora Apolo estando enojada junto con la de una mujer y un hombre la saco de sus desgracias para ir corriendo aventandose a su sofá para ver que pasó.

Abrió la Bolsa de bombones sin despejar su vista de la tele empezando a meter bombón tras bombón.

Su cabeza se volteó de forma inmediata atrás de ella donde estaba la puerta de entrada y el árbol navideño a su costado suyo. Fruncio su ceño con confusión, juraría haber sentido alguien detrás suyo viendola, aunque ciertamente desde que fue a su habitación y salió sentía que la observaban, había ignorado eso por que no era la primera vez que lo sentía, desde los trece o catorce años que tenía, empezaba ella a sentirse acosada y observada a cada rato, eso hasta la actualidad, recordaba habérselo dicho a su amiga que se sentía observada, pero ella le había dicho que simplemente era imaginaciones suyas y que no estaba siendo observada y solo era su mente tratando de engañarla.

мσ𝚗𝚜тєя┆уα𝚗∂є𝚛єкιℓℓυαχℓє𝚌тσяα [αυ мσ∂єя𝚗]Where stories live. Discover now