BELLAGIO - L.S

XX - Charlotte

Todo era bonito. La luz de la mañana iluminaba el idílico campo, la hierba relucía de color verde como nunca antes lo había hecho. Una pequeña brisa se hacía presente dando un ambiente perfecto para estar ahí.

Un Louis de 19 años estaba feliz, de verdad que lo estaba, tirado en la hierba, disfrutando del tiempo y completamente solo.

O al menos eso creía él.

La ligera brisa se volvió tosca y ruda de un momento a otro, Louis se recostó para encontrarse con que el cielo se estaba nublando.

Oyó unos pasos giró la cabeza hacia la que el creía la fuente del sonido. Nadie. Los pasos se hicieron presentes desde otro lado. Volvió a girar la cabeza. Nada.

-¿Que pasa Louis? ¿No puedes encontrarme? - preguntó una voz lejana y familiar

Para cuando se quiso dar cuenta el ojiazul ya no estaba en ese campo que tanto había amado en su infancia. Estaba en una habitación. Sabia que habitación era esa.

-No, ¡No! - gritó

-Oh, vamos pequeño, no te quejes y ven conmigo - esa voz, esa voz que Louis tanto temía, ahora tenía a la persona que emitía esas palabras delante de él

-Adam por favor - suplicó

-Oh, vamos Louis, no te quejes, sabes que te encanta que te folle, por eso siempre gimes como una puta - Adam rio

Louis cerró los ojos para evitar seguir escuchado a su novio. Y de repente todo desapareció. Ya no estaba en la habitación de Adam, sino en su habitación. En la habitación que compartía con Zayn en la facultad.

Adam seguía allí, con una actitud completamente distinta a la de hace unos segundos.

Louis se sentía agobiado, angustiado ¿Qué pasaría? ¿Volvería su novio a violarlo? No, no otra vez.

-Louis - no gritó, pero casi - ¿Me estas escuchando? - Louis no dijo nada - No podemos seguir juntos. Ya no te quiero, de hecho, creo que nunca te quise...

No oyó nada más, se despertó con una fuerte bocanada de aire. Por suerte no había despertado a Harry que seguía tumbado a su lado.

Lo vio ahí, recostado, con sus rizos descolocados, tan mono, no pudo evitar sonreír y acurrucarse en su pecho para intentar seguir durmiendo.

***

La cama estaba más vacía de lo que se esperaba. Palpó la superficie del colchón aún con los ojos cerrados para darse cuenta de que Louis no estaba ahí. No se preocupó demasiado, al fin y al cabo era su casa, no podría haber ido muy lejos ¿o si?

Lo siguiente que pasó por su mente después, fue su móvil, su teléfono móvil. Lo tenía en la mesilla y sentía la necesidad de revisarlo todo. La noche anterior no tuvo ningún tipo de percance pero ¿Y si lo abría y había fotos suyas en el bar? En ese caso estaría jodido.

Instagram, nada

Twitter, nada

Periódicos nacionales o revistas de cotilleos, nada.

Estaba a salvo, estaban a salvo.

De repente oyó la cadena del baño de Louis sonar, estaba ahí dentro. Louis salió del baño, con el pelo despeinado y unas ojeras ligeramente notables, pero a Harry le seguía pareciendo precioso.

-¿Ya has despertado? - preguntó Louis sacando a Harry de sus pensamientos

-Eso parece - respondió - Ven, vuelve a la cama conmigo - dijo palmeando el colchón a su lado