04| Furia

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❝ Puedes romper su alma,golpearla, lastimarla,o quitar su vida,pero por el amor de Dios,no lo toquen a él

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❝ Puedes romper su alma,
golpearla, lastimarla,
o quitar su vida,
pero por el amor de Dios,
no lo toquen a él. ❞

LA FURIA RECORRÍA EL CUERPO DE HOPE

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LA FURIA RECORRÍA EL CUERPO DE HOPE. LA OJIAZUL ESTABA FURIOSA, Y KAZ BREKKER NO SE IBA A SALVAR DE LOS GRITOS DE LA PRINCESA. Mientras la castaña regresaba de dejar a Milena en su club para protegerla de cualquiera que quisiera hacerle daño, Hope pensaba la mil y una maneras de matar a Kaz.

—¿Podrías respirar más despacio?

—Cierra la boca, Derek. —masculló la ojiazul, mientras caminaba directamente al Club Cuervo.

El chico rodó los ojos y decidió desviar un poco el enojo de su mejor amiga.

—Fue muy amable permitir que Milena se quedara en el Club.

—No la iba a dejarla a su suerte, menos con Pekka Rollins merodeando por ahí.

Y Hope decía la verdad, a pesar de que la rubia la hacía perder la paciencia, jamás le daría la espalda. A nadie, mucho menos si necesitaban o requerían de su ayuda. Su padre biológico le enseñó la compasión, la amabilidad y el amor, y a pesar de que la Princesa reside en Ketterdam, esta ciudad jamás la doblegó.

—¿Qué harás ahora?

—Romperle la otra pierna a Kaz con su maldito bastón. —respondió, entrando al Club.

Todo se quedó en silencio mientras veían a la ojiazul caminar con suma elegancia y a paso decidido hacia las escaleras de caracol para ir hacia la oficina del Rey Cuervo. Derek rodó los ojos y se dirigió hacía Jesper e Inej. Estos cuando vieron al pálido chico acercarse, suspiraron. Jesper miró a Inej y ésta le devolvió la mirada, confundida.

—Jesper, bonita.—saludó el ojiverde.

—Derek. —respondieron al unísono—. Perece un león recién liberado y con ganas de asesinar todo a su paso. —comentó Jesper y Derek rió.

—Si les soy sincero, Kaz tendrá que usar sillas de ruedas. —se burló el ojiverde—. Hope le romperá la otra pierna.

—Que los Santos lo ayuden. —murmuró Inej, haciendo una pequeña mueca.

𝐭𝐡𝐞 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐬 𝐨𝐟 𝐤𝐞𝐭𝐭𝐞𝐫𝐝𝐚𝐦 // 𝑘𝑎𝑧 𝑏𝑟𝑒𝑘𝑘𝑒𝑟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora