Capítulo 6🌫️

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La canción de hoy es "Ocean eyes" de Billie Eilish.
Ya sabes que hacer cuando veas este emoji: ⏯️


No puedo creer que se comporte de esa forma, ¿en qué le perjudica Claudio? No es como si compartiéramos información súper importante, en plan, apenas le pedí que no archivara la autopsia y me diera los papeles. ¿Y lo de discriminar su integridad por su pasado? Que yo sepa el tampoco es una blanca paloma. Yo sé lo que hago, joder, soy subjefe del FIB, un puto agente federal.

Horacio esperaba en el asiento del copiloto a quien era su compañero, cruzado de brazos y regañando mentalmente a aquel, tenía mucha rabia contenida desde que salió del hospital. No era capaz de comprender que más allá de que a Volkov le preocupara la investigación y no quería ningún ex-convicto dentro de esta, sentía una fuerte rivalidad con Claudio por tener una amistad tan íntima con Horacio, algo que el trataba de hacer con discresión pero siempre la cagaba una y otra vez.

Ya iba siendo la hora del almuerzo, los locales empezaban a cerrar y las calles a vaciarse dejando apenas el sonido de la copa de los árboles bailoteando por el viento bastante frío, ya se avecinaba el invierno a la vuelta de la esquina. Para variar, el cielo empezó a nublarse haciendo que el poco sol que calentaba las calles de la ciudad desapareciera.

Para Horacio ya era un día de mierda, apenas se pudo arreglar y tenía mil cosas en la cabeza, tanto con lo de Volkov con lo de la investigación, además de sus recientes problemas económicos debido a la excesiva compra de ropa lujosa e idas para tunear su audi, quizá tendría que volver a vivir con Gustabo en un tiempo, aunque sabía que el rubio ya casi no usaba su departamento por casi vivir en casa de Conway debido al entrenamiento que le daba como forma de integrarse nuevamente al cuerpo.

Finalmente el ruso llegó al auto, adentrándose en silencio miró al moreno quien veía por la ventana haciéndole la ley del hielo. Volkov suspiró y puso ambas manos en el volante, aún tenía los nudillos vendados pero con tela nueva, parece que no iba a curarse rápido.

Arrancó el coche y empezó a conducir en silencio por la fría carretera.

- Boulevar 12, en Saint Rosé Street. - Rompió el silencio el de cresta.

Volkov sin voltear a verlo se relamió los labios antes de hablar.

- ¿No vamos a la sede?

- Llévale los papeles y la droga a Conway, yo quiero ir a casa.

El ruso suspiró levemente y finalmente le echó un vistazo al moreno, al verlo frenó suavemente un poco y se detuvo en una acera, se quedó viendo al moreno con la garganta y el pecho hechos un nudo.

Horacio estaba tratando de contener un par de lágrimas en silencio, cuando vió que se detuvieron miró por la ventana para disimular, pudo ver como comenzó a llover haciendo que la ventana se empañe.

⏯️

- Horacio...

- Por favor, lléveme a mi departamento.

- Horacio, hablemos las cosas. - Horacio no contestó. - Horacio.

El mencionado suspiró y siguió viendo por la ventana.

- ¡Horacio, respóndame!

Volteó a verlo alzando la mirada, la tenía rota, los ojos empañados y la nariz y mejillas rojas, sorbió su nariz y ahora su rostro expresaba enojo.

- No quiero hablar, si no va a llevarme iré a pie.

Tras escucharlo, Volkov extendió el brazo para intentar poner el seguro de la puerta, pero Horacio se apresuró en empujarlo y salir del coche empezando a empaparse de manera abrupta. Se sacó la camiseta y la tiró dentro del coche, en ese momento no quería nada que le perteneciese al ruso

[ ⚢︎ ]🦋𝑬𝒓𝒆𝒔 𝒖́𝒏𝒊𝒄𝒐. [pausada🥶]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora