Capítulo 3⚖️

21 2 0
                                    


- Realizaré perímetro por la zona, vayan con 10-3.- Alertaba Horacio mientras bajaba del coche de incógnito, se habían parado justo detrás del comercio.

- 10-4.- Afirmaron los agentes que iban a participar en el acto. Volkov se dirigió a la entrada para empezar las negociaciones, dentro del local lo esperaban unos 3 personajes con máscaras de querubín.

- Bueno, bueno, pero si es el indigente comunista.- Bromeaba quien parecía liderar el grupo de atracadores. El agente no le dió importancia al comentario.

- Quiero ver a los rehenes.

- No tenemos.- Dijo uno de los hombres tras el "líder"

- Ya veo.

Se armó un silencio. Discretamente el ruso pasaba sus dedos desnudos por la culata de la pistola que llevaba escondida en la espalda baja pegada a su cinturón. Uno de los hombres soltaba un fuerte suspiro mientras que sus dos compañeros giraban sus pies para adentrarse más a la tienda, pero sus pasos fueron interrumpidos por la voz agitada de Horacio en la radio del alumno que custodiaba la entrada al otro extremo junto a su superior.

- Tirador abatido, se escondía en un balcón de Sidney Street.

Todos los presentes pudieron sentir la tensión en el aire, si aguantabas la respiración hasta podías escuchar a alguien susurrar "Esto se va a poner feo" desde uno de los zetas. Nadie dijo nada por unos segundos tras el comentario de Horacio.

Volkov apretó la culata de la pistola con la yema de los dedos, el alumno a su extremo fijó la vista en su acción y comprendió que en unos segundos se iba a desatar un revoloteo de violencia. Y así pasó.

Uno de los atracadores disparó a la puerta de cristal en un vago intento de darle al ruso, quien con el ruido de los cristales partiéndose ya tenía su arma envuelta en las manos con el dedo índice en el gatillo, el alumno lo imitó y apoyó la espalda en la pared de afuera, varios agentes se ocultaron tras los laterales de sus patrullas, Leónidas en cambio empezó a correr a la parte trasera del local para custodiar la entrada trasera. Los atracadores aprovecharon la preparación de los agentes para esconderse uno tras la barra del bar y los restantes a los costados de la habitación.

Horacio en cambio en aquel balcón, había golpeado con la culata de su arma al tirador, dejándolo insconsciente en el suelo para luego esposarlo. Pudo escuchar el primer disparo en la cercanía y con los labios tensos tomó el francotirador del delincuente entre sus manos, admirándola por unos segundos.

- Tomaré esto prestado.

¿Esto es legal?

Del otro lado de la radio, los agentes revelaban cada tanto la posición del atracador escondido tras la barra, le habían disparado ya varias veces y solo podían confirmar una bala certera en el chaleco del mismo. El ruso cambió de posición varias veces dándole al papel tapiz en vez de su objetivo, empezaba a apretar más de lo normal el arma por la frustración.

- ¡AH!- El grito del alumno en la puerta denotaba un gran dolor combinado con sorpresa. Este había sacado un poco el hombro de su cobertura y había recibido un roce grave de dicho lugar, bajando su arma retrocedió para correr al lateral del local en el estacionamiento

En la radio se pudo escuchar a Yuu alertar a su compañero:

- Le dieron a Carlos, intendente Volkov, retroceda.

- 10-5, si lo dejamos así van a salir.

El nombrado no retrocedió sino que tomó el lugar del ahora herido alumno. Se pudo escuchar a Yuu suspirar con pesadez.

- Leónidas, deje la salida y acompañe al intendente. - El rubio acató la órden del comisario Yuu.- ¿Dónde está el agente H?

- Estoy en el edificio de enfrente, Volkov, Leónidas, alejaos de la entrada, tengo al objetivo en la mira.- Comentó el moreno con francotirador por la radio.

[ ⚢︎ ]🦋𝑬𝒓𝒆𝒔 𝒖́𝒏𝒊𝒄𝒐. [pausada🥶]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora