CENIZAS +18 [1] ✓ [Borrador]

16° Emily

Arabella

Él toca el piano con destreza, concentración y pasión; tiene una manera de desenvolverse increíble que hasta cautiva el movimiento de sus manos. Conozco perfectamente la melodía, mi hermana me la tocaba cuando era niña, la extraño tanto.

Mi hermana, la primogénita, Emily Duarte D' angelo era diez años mayor que yo, murió a los quince años de edad; fue asesinada a sangre fría, de una manera que cuando lo recuerdo me duele. Yo era sólo una niña y me arrebataron a lo que yo más quería en el mundo, si yo tuviera la oportunidad de tener frente de mi al desgraciado que le quitó la vida, él no viviría para contarlo.

Esta melodía me recuerda a ella, mientras ella tocaba yo bailaba. Akem termina de tocar y me queda viendo fijamente; aparto la mirada para que no visualice mis ojos cristalizados.

— ¿Qué tienes mi diosa? — indaga — de verdad si te he lastimado hoy, discúlpame, yo nunca he sido así con nadie pero contigo....

— ¡Basta! — lo interrumpo — no eres tú Akem sólo que..

— ¿Qué? Sabes que me puedes pedir el maldito mundo y lo dejaré a tus pies.

— No es nada de eso, sino que mi hermana tocaba esa melodía para mí — sin darme cuenta una lágrima silenciosa cae de mi ojo derecho.

— Me imagino que debe ser difícil estar lejos de tú familia — me seca la lágrima, su tacto tocando mi mejilla produce un rápido corrientazo provocando que gire el rostro .

— Ojalá fuera porque estuviéramos separadas por miles de kilómetros a toda una vida — lo miro —. Mi hermana fue asesinada cuando yo tenía 5 años y no sabes el deseo que tengo de acabar con la vida de ese infeliz. Nadie tiene que morir asi, menos una niña que no tenía la culpa de lo que ocurrió; si te soy sincera, semanas después de la muerte de ella yo aun no sabia lo sucedido, luego de las dos semanas en la cual se suponía que ella regresara y no llegó, supe que la había perdido para siempre. Una niña de apenas cinco años perdió el amor de su ejemplo a seguir, a su musa.

— Disculpa mi indiscreción. — se disculpa —. Lo siento mucho, y si quieres ver el maldito mundo arder yo seré el que te de ese fuego para que se quemen en mi infierno.

— Bueno... — cambio de tema — ¿Qué te parece si tocas otra a mi petición?.

— Soy todo oídos diosa. — me sonríe.

— Quiero que toques Shallow de Lady Gaga y Bredley Cooper — hago un puchero.

— Te ves tan hermosa haciendo así — me queda viendo con ¿fascinación?.

— Sé que soy hermosa y es en todo lo que hago — digo con la frente en alto — empieza a tocar que te voy a sorprender.

— ¿Me vas a sorprender más de lo que estoy?. — ríe suavemente. —. Increíble.

Empieza la melodía y él comenzó a cantar.

Dime algo, nena

¿Eres feliz en este mundo moderno?

¿O acaso necesitas más?

¿Hay algo más que estés buscando?

Estoy cayendo

En todos los buenos momentos

Me encuentro deseando un cambio

Y en los malos momentos me tengo miedo.

Canta con una voz gruesa, fuerte y sensual. No sabía que cantara tan bien.

¡Este hombre va a ser que...!

Déjate de estupideces Arabella.

— Te toca principessa — me mira risueño.

Dime algo, chico

¿No estás cansado de intentar llenar ese vacío?

¿O acaso necesitas más?

¿No es difícil mantenerse tan intenso?

Estoy cayendo

En todos los buenos momentos

Me encuentro deseando un cambio

Y en los malos momentos me tengo miedo.

Estuve en una Academia de canto, pero dejé de cantar cuando mi hermana se fue. En el momento en que nos tocaba cantar a los dos se escucha una detonación, inmediatamente Akem se voltea de una forma amenazante, han disparado desde un punto del otro ático de enfrente pasando la bala por el gran ventanal rompiendo en trozos el cristal; el tipo de material del vidrio se veía resistente, pero el arma que usaron la derribó enseguida. Cuando él iba a cubrirme, otra detonación se escucha; en mis oídos solo se escucha un pitido, siento como todo pasa en cámara lenta.

Bajo la mirada, toco mi abdomen con una mano quedando esta manchada de sangre, empiezo ver todo borroso, oigo como Akem me llama desde lejos. Sin más caigo en la alfombra blanca, embarrandola de sangre al instante.

— No no no, no me dejes diosa — me coloca en su regazo — todo va a salir bien, joder — saca su móvil y marca un número — Boris ve ahora al Hospital Clínic de Barcelona, no pidas explicaciones solo haz lo que te digo — cuelga — tú no me vas a dejar oiste, no puedes ni quiero preciosa. — hace presión en mi abdomen.

— Sacame de aquí — escupo sangre — tenemos máximo 20 minutos para llegar al hospital, moriré desangrada — susurro.

Akem se aleja un momento a buscar no se que cosa pero al cabo de unos minutos vuelve con un bulto entre la pretina del pantalón, se ve como un arma pero tal vez esté alucinando, me carga y vamos al ascensor.

— Aguanta por favor — le tiembla la voz.

— No vayas a llorar por mi idiota. — me rio, pero ese gesto hace que me duela y me queje.

— Hasta en los momentos más graves sigues irónica, eres perfecta.

— Lo sé querido.

Llegamos al estacionamiento subterráneo, subimos al coche y él comienza a conducir a toda velocidad; de repente me veo a mi cuando era niña con Emily jugando en el patio de mi casa, luego miro el día que me gradué de cirujana general y por último escucho solamente la voz de Emily.

Il mio girino ricordati che devi essere una ragazza forte, qualunque cosa accada, non mostrare a nessuno che può buttarti a terra, perché solo tu puoi farlo e non puoi nemmeno permetterlo. Ti amo alla follia piccola mia, ci vediamo tra due settimane.

Esa fue la última vez que hablé y vi a mi hermana viva. No temo a la muerte y si así me puedo reencontrar con ella, estoy de acuerdo en morir. De repente veo todo negro, yendo a la inconsciencia.

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Traducción:

Il mio girino ricordati che devi essere una ragazza forte, qualunque cosa accada, non mostrare a nessuno che può buttarti a terra, perché solo tu puoi farlo e non puoi nemmeno permetterlo. Ti amo alla follia piccola mia, ci vediamo tra due settimane: Mi renacuaja acuerdate que tienes que ser una niña fuerte, pase lo que pase no le demuestres a nadie que te pueden derribar, porque solamente tú puedes hacerlo y tampoco puedes permitirlo. Te amo con locura mi pequeña, nos vemos entre dos semanas.