CENIZAS +18 [1] ✓ [Borrador]

41° Teoría errónea

Akem

En estos momentos me encuentro en sala de espera; Franco se la llevó a quirófano para hacerle una transfusión de sangre para drenar la contaminada. No me gustó verla tan débil cuando ella es una mujer fuerte y decidida.

Boris estuvo averiguando y al parecer Dimitri anda haciendo sus propios negocios. Si es verdad lo del CEO de la mafia turca eso significa que me hará la guerra y por supuesto que la ganaré. Le prohibí el paso a Issabela no confio en ella; Chiara vino hace una hora y por lo que pude notar se lleva muy bien con Boris. Le dije a Iván que todavía no le avisara a la familia Duarte pero localizó al tío de ella Valentín y ya viene en camino.

Aquí sentado me quedo pensando en las palabras que me dijo mi pequeña, no le importa quien soy, ella me quiere tal cual como soy. Aunque no me ha dicho te amo de esos labios que tientan a pecar, lo demuestra con hechos. Hoy por la tarde estábamos follando como animales, las hormonas las tienen muy alborotadas.

Pero me encanta porque le doy como cajón que no cierra.

Franco me dijo que había la posiblidad de una alerta de aborto por la transfusión, pero algo en mí dice que mis bebés estarán bien al igual que mi pequeña.

Si resistieron a un impacto de bala, también podrán con esto.

— Pero que sorpresa tenerte aquí. — Aparecen Mateo y Santiago Medina.

— No puedo decir lo mismo. — me levanto — Fuera de mi vista.

— ¿Cómo está tú querida Arabella? — sonríe Santiago.

— Maldito infeliz. — lo agarro por el cuello llevándolo hasta la pared — Así que contigo fue que se unió el maldito viejo, te juro que te destruiré a ti y toda tu repugnante familia.

— Atrévete. — me reta — Porque así como Arabella ya ha tenido dos atentados puede haber un tercero porque si no es mía tampoco será tuya.

Le meto un puñetazo por toda la nariz cayendo al piso inmediatamente.

— No valen la pena hermano. — me sujeta Boris — Ya nos encargaremos de esta plaga. — me suelto.

—Ustedes no me conocen a mi y por Arabella soy capaz de todo. No los quiero ver en este hospital, llevense a su corderito a otro porque aquí no colocan más un pie. — sentencio

Santiago ríe por lo dicho. — Este hospital es para todo público imbe...

— No cuando soy el maldito dueño. — Lo corto — Se me van de aquí si no quieres que acabe con lo que empecé.

— Esto no se quedará así. — Se limpia la sangre, se levanta y se va.

Al rato sale Franco avisando que los tres están fuera de peligro. Tomé una decisión, necesito a Arabella y a mis hijos seguros, aquí en España no lo estarán por lo que me voy a la oficina de Iván.

— Me llevo a Arabella y no te estoy pidiendo permiso solo te digo porque necesito los papeles para el traslado.

— De ninguna manera te vas a llevar a mi niña. — se levanta del asiento — Aquí cumplirá con todo su tratamiento.

— Perfecto, entonces me la llevo así. — salgo de allí

Llamo a mi piloto y le digo que en una hora quiero el jet listo. Me encamino a la habitación de mi principessa. Está acostada mirando el techo; ella al escuchar la puerta cerrarse voltea a verme y me regala una leve sonrisa.

— Mi diosa. — le beso la frente — Los bebés están bien. — le sonrío — Pero necesito tenerlos fuera de peligro. Mi padre está aliado con los Medinas y...

— ¿Qué tienen que ver ellos en esto? — pregunta.

— Pequeña, Mateo Medina es el CEO de la mafia española. — abre los ojos como platos — Santiago junto a mi padre te hicieron el primer y segundo atentado.

— ¡La puta madre que los parió! — se altera tanto que la máquina empieza a pitar — No me importa si es tu padre pero no me quedaré de brazos cruzados.

— Tu no te preocupes que yo me encargaré de eso. — le prometo — Dimitri Ivanov ya no es nadie para mí. Y... — pienso cuales son las palabras correctas para decirle lo de su hermana — Él fue el responsable de la muerte de tú hermana.

Aguanta la respiración y sus ojos se empañan de lágrimas. Comienza a llorar descontroladamente; de algún sitio empieza a pitar una pequeña alarma haciendo que Franco entre rápidamente con una enfermera. Ella le suministra algo en el suero y a los pocos segundos mi pequeña queda sedada, era mejor decirle ahorita esta fatal noticia que después.

— Necesito que me la alistes, no quiero que continúe aquí. — le aviso

— Por Dios éste es el mejor hospital de Barcelona, ella tiene que estar en observación.

— Su vida está en peligro aquí en España y la voy a sacar de aquí — declaro

Me mira de arriba hacia abajo. — ¿Quién rayos eres tú?.

— Akem Ivanov, Boss de la mafia rusa — me mira con los ojos saltones — ella está enterada de todo así que me haces el favor de arreglar lo que tengas que hacer porque en menos de una hora llega un helicóptero a buscarnos. — asiente y se retira — cuidadito dices algo — le digo a la enfermera — porque el pulso no me tiembla. — ella traga saliva y se va.

[...]

Franco nos acompañó hasta el aeropuerto privado, le dió una última examinación y me dijo que en tres horas se despertaba. Hablé con Valentín el tío de Arabella y le dije que agarrara un vuelo para Alaska, en la pequeña conversación que tuvimos me dijo que él siempre supo quien era yo pero que en ningún momento desaprueba nuestra relación porque ve por primera vez a la niña de sus ojos feliz. Él es el único de su familia que sabe lo sucedido.

Alaska es un lugar perfecto para esconderse; me voy a quedar unos días con mi principessa pero luego se quedará al cuidado de su tío mientras que yo empiezo la cacería. Tengo un ejército de hombres entrenados a matar sin contemplación porque mueres tú o ellos; vivimos por la Bratva y por la Bratva moriremos.

Mi padre y los Medinas han despertado a mi bestia interna.

16h después hemos llegado a Delta, una parte montañosa de Alaska. Tengo varias propiedades en este país, cosa que mi padre no sabe. Ya instalados en la gran cabaña mi pequeña está en la habitación sin querer hablar con nadie, la entiendo perfectamente ella tiene que procesar lo de la muerte de su hermana, a lo que me dedico y la alianza de los Medinas con mi padre.

Voy a la sala principal y me siento en el taburete del piano. En cada una de mis propiedades que tengo hay uno, levanto la tapa y acaricio las 88 piezas.

Nuvole Bianche es una melodía melancólica pero a la vez reflexiva. Mientras toco voy recordando todos los momentos vividos con Arabella. El día que casi la atropello allí fue donde comenzó todo, ese día que quedé enganchado con ella, recuerdo su primer idiota, sonrío al imaginarlo. Nuestro segundo encuentro esa misma tarde cuando me dejó con la palabra en la boca, el primer beso donde los dos buscábamos el poder de controlarlo; las primeras embestidas, cuando me dejó cachondo en el club. La vez que cantamos juntos en mi ático y ese mismo día casi la pierdo.

Cuando me dijo que no la dejara sola, las noches llenas de lujuria, la sorpresa que me dió de cumpleaños, nuestra interpretación en la fiesta de disfraces y lo más reciente que quiere caminar de mi mano juntos.

La ciencia tiene una teoría errónea, dicen que polos opuestos se atraen pero siempre hay una excepción porque ella y yo somos iguales donde juntos somos una explosión.