Ali visitaba cada vez más la pastelería, cuando veía que no había tantos clientes se quedaba unos minutos más para poder hablar con Daniel, y a LaRusso le gustaba mucho su compañía ya que lo hacía olvidarse del hecho de que Johnny parecía estarse distanciando de él.
Sus pláticas eran sencillas y algo triviales, no se comparaban en nada a las interesantes o divertidas conversaciones que tenía con el ojiazul. Si lo pensaba bien Ali era el tipo de chica que cualquier señora desearía para nuera, bonita, agradable e inteligente. Daniel nunca había tenido una novia, pero suponía que si la tuviera probablemente sus madre y en especial su tío Louie, estarían contentos de que fuera una señorita con esas características.
Daniel nunca había pensado en su tipo ideal de pareja, en realidad en lo único que había pensado desde pequeño en el karate, pero debía admitir que aquella chica llamada Ali es bonita, a toda la familia LaRusso le encantaría ¿Cierto?
🌸🌸🌸
Las cosas entre ambos chicos se habían enfriado demasiado, habían dejado de verse por unos días, Johnny no iba a la escuela o trataba de no salir del departamento, solo se quedaba a jugar o a hablar con Bobby, pero comenzaba a cansarse de esconderse en su hogar y aunque le hiciera daño estar cerca de Daniel era lo que más extrañaba.
Por eso ahora estaba de nuevo siendo valiente, si realmente iba a morir no quería ser un cobarde por lo que le quedaba de vida. Llamó a Daniel por primera vez en la semana desde que el pelinegro había descubierto su enfermedad, la razón por la que lo llamaba era porque estaría solo en el departamento así que quería pasar un tiempo con aquel chico que lo mataba lentamente.
Sonaba algo masoquista si lo pensaba con detenimiento, pero el hecho de que Daniel LaRusso es la persona que Johnny más ha amado en su corta vida ni una enfermedad lo podía borrar.
Daniel llegó a los pocos minutos de haber terminado su llamada con Johnny, cuando llegó al departamento fue recibido por un cálido y triste abrazo del ojiazul, un abrazo que curiosamente también podría expresar miedo, pero a Daniel le había gustado aquel recibimiento porque le daba a entender que Johnny lo había extrañado tanto como lo había hecho él.
— Mi mamá y los mellizos no están, podemos hacer lo que queramos Dany —dijo Johnny.
— ¿Robar un banco?
— No seas bobo, Daniel — respondió el rubio con una risa.
— Está bien, fue un mal chiste — dijo Daniel sonriente— traje un poco de helado, podemos comerlo y hablar un poco, pasaron muchas cosas los días que faltaste a la escuela.
Johnny asintió para dar una respuesta afirmativa, luego se dirigieron a la cocina para servir el helado que había llevado el pelinegro, algo que realmente esperaba Johnny era que Daniel no tocará el tema de su enfermedad.
— entonces ¿qué cosas nuevas pasaron? — cuestionó Johnny.
— Comencé a dar clases de karate en la escuela, es una nueva forma de ayudar a el pago de mis colegiaturas — comentó Daniel.
— ¿De verdad? — preguntó Johnny
— Sí.
— Eso es genial Dany, estoy muy feliz por ti — siguió el rubio— ¿Qué más pasó?
— Conocí a una chica, Johnny.
El silencio se creó entre ambos, en el rostro de Johnny se podía observar la confusión combinada con tristeza al escuchar aquella "noticia" y dentro del ojiazul se empezó a crear un nuevo sentimiento que no sabía cómo explicar, si lo juntábamos con su enfermedad se trataba de una bomba de tiempo.
Las náuseas se apoderaron de Johnny y lo único que pudo hacer fue correr hasta el baño para poder terminar con ese sufrimiento.
Su pecho dolía demasiado, sentía que se asfixiaba, ni siquiera podía notar que Daniel tocaba desesperadamente la puerta del baño para saber que estaba pasando. Cuando terminó respiro profundamente y lo notó.
Acababa de vomitar pétalos, había entrado a la segunda fase de la enfermedad.
ESTÁS LEYENDO
Cure me, Dany (LawRusso) [Adaptación]
Fanfic- ¿Cómo puedo no morir? necesito una respuesta, señor Miyagi. - Daniel es la medicina, Johnny.