𝔚𝔦𝔫𝔵 𝔠𝔩𝔲𝔟 : 𝔸𝕌𝕊𝔼ℕℂ𝕀𝔸 𝔻𝔼 𝕃𝕌ℤ

Un dia

Una semana.
Una semana fue lo que las Winx tardaron en recuperarse, si es cierto todas aún presentaban algunas heridas pero al menos ya podían intentar combatir sin magia como ya una vez lo habían hecho.
Se buscó en múltiples de libros, hasta el cansancio de la directora de la Torre bubosa, pero lamentablemente aún no había nada.
Las Winx, aún no sabían nada de sus planetas ni familiares, según la guardia, sería mejor para ellas ocultarlo, así no pasarían un dolor inessesario cuando los salvaran, si es que lo lograban.
Y los prisioneros de aquel nuevo gobernador del mundo...bueno, Mirian lentamente, era algo espeluznante, ver como ahora eran casi hueso y piel, no durarían ni una semana más, y lastimosamente no habría ayuda, moririan ya sea por orden de dybbuck, por su mascota, o simplemente por que sus cuerpos ya no resistirían más, vivían atados, solo epate así ese día, el día en que si corazon dejara de latir.
Dos de ellos, se arrepentían por sus reinos, y cuando intentaban dormir escuchaban según ellos a su okue o gritar, no sabían si era la culpa, o la alucion por falta de alimento, o simplemente demencia.
Otro, rogaba, solo al cielo, que su pequeña estuviera viva, y su reina, que en algún tiempo el amor y odio, que se mantuviera fuerte, por su reino y por su hija, si bien con la reina luna el no llevaba buena relación, se dio cuenta que al menos para él, era feliz que él estuviera ahí, atado y con los días contados a que ella fuera la que estuviera en esa situación, rogaba que su reina y su hija, vivieran, solo eso suplicaba en susurros todos los días sin importar su sufrimiento mismo.
Y una, la mayor de ellos, solo pensaba en sus colegas, en su vida, y en su larga trayectoria, confiaba en sus niñas, siempre lo decía y aún lo mantenía así, y siempre lo haría hasta que su cuerpo suelte su último aliento.
                                             ....
Las seis hadas más poderosas del mundo mágico, así se les conocía antes de Dybbuck, las Winx estaban juntas, sentadas en un círculo, tratando de encontrar una manera de arreglar esto, de liberar a sus pueblos, de volver a vivir, querían encontrar la razón para poder darles vida a sus reinos aunque sabían que cuando la encontraran significaba una cuenta regresiva para su propia muerte

—hemos buscado en todos los libros y aún no hay nada-repuso musa tallando su cara con frustración- y ni siquiera sabemos usar nuestros poderes más que los hechizos que mencionaron!

—encontraremos la forma!-bloom acarició su hombro y le dedicó una sonrisa de esperanza y melancolía

—chicas debemos encontrar algún libro, alguna señal...-la castaña movía  su brazo mientras jugaba con una pequeña planta que frondaba de la tierra- es una solución antes que atacar a ciegas

—es lo mas lógico- afirmó tecna para continuar- pero desde que llegamos no sabemos contactarlos y realmente no sabemos nada sobre ellos

—por qué no sacas uno de tus aparatosos tecna!-chillo Stella haciendo gestos de apretar botones- tú siempre tienes uno de esos para todo

—no lo eh intentado..-pensó y quedó un momento en silencio mientras las demás se mantenían espectantes- podría al menos intentar algo con lo cual unir los collares y información, sería intentar

—tú puedes tecna siempre logras lo imposible-aludió musa abrazándola en paralelo

—y no estarás sola tecna aquí estaremos nosotras-sonrió aisha a lo que las demás repitieron el gesto, diciendo "cuentas conmigo"

—okey primero necesito saber qué hacer- tecna se puso de pie- mientras ustedes busquen información en más libros- Stella se dejó caer en brazos de bloom- y más tarde necesitaré su ayuda

Tecna se retiró y las demás empezaron a hacer diferentes actividades cómo ayudar en las curaciones de gente, recolectar comida o crear mejores viviendas.

Los especialistas peleaban y entrenaban mejor cada día hasta llegar a su perfección, las hadas y brujas comenzaban a aprender a combatir juntas y de manera más eficaz, así como avanzas en sus hechizos ya que aunque no tuvieran magia la practicaban como si la tuvieran.
...
—tráiganlos ante mi!!!-ordeno dybbuck a gritos a sus geriones- rapido imbeciles!
Los geriones se apresuraron a tomar a los prisioneros, tan débiles que parecían inconcientes, a rastras por los grandes pasillos hasta el trono de su amo