La respuesta
23 de Enero, 2020.
— ¡Ya cuéntanos! —exclama Ginger aventándome una almohada.
Por Dios, que histéricas se ponen cuando hablo sobre chicos y gustos.
— ¡Ya cálmense! —reprocho entre dientes, sintiendo el calor en mis mejillas.
Al segundo ambas se miran con complicidad y emoción.
— ¡Ahí está el rubor! —gritan al mismo tiempo girando hacia mi.
Ay mátenme. Oculto mi rostro con ambas manos soltando un suspiro con exasperación y me dejo caer de espaldas en la cama.
La verdad es que en este momento yo estaría a la par con ellas. Con gritos y locura, pero siento unos nervios horribles. Se supone que habrá una gran fiesta en casa de Meghan por su cumpleaños número 19. A ella le gusta todo en grande, en cuanto a Ginger y a mi nos vamos por las cosas más sencillas, y las mías se basan más en explosiones dulces. Como a mi amiga le encanta ser cupido, hizo que la temática de la fiesta sea en parejas, con la especialidad musical en tango. Ya sabrán el porqué. A mi prima Madeleine le encantaría, no hay chica más apasionada con el tango que ella; es probable que Meghan la invite. Ahora se encuentran histéricas porque uno, solo tienen sospechas sobre cierta situación y dos, no tienen la respuesta a la petición de Wyatt sobre querer que yo sea su acompañante.
Cuando me lo preguntó sentí los pétalos invisibles color rosa caer sobre mi. Y por supuesto, el loco color rosa de mis mejillas lo cual siempre lo hace sonreír, una sonrisa que me mata.
— Dije que si —murmuré aún con el rostro oculto entre mis manos.
Cuando las aparté me sobresalté al verlas a mi lado tan cerca de un momento a otro. Rodé los ojos al ver sus sonrisas de maniáticas de par en par, observándome con emoción y alegría. Yo solo sentí espanto.
No había mucho que pensar, ya sabía cual sería mi atuendo perfecto.