12. YoonGi

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Cierro la puerta con un pie y entro a la habitación, cargando a Jimin en mis brazos.

-Si quieres que tu traje permanezca intacto, sugiero que te lo quites. No seré tan delicado.

Lo dejo de pie y doy un paso atrás mientras arranco mi corbata con fuerza. 

-Ahora, mi príncipe. He sido gentil contigo toda la noche, y no puedo contenerme más. O lo haces tu, o lo haré por ti.

La orden le llama la atención, y me quito la ropa mientras él se la quita también. La lleva  a una silla lateral y la pone sobre esta, amorosamente protegiéndola del daño. Regresa a mi usando una camisa de seda que cubre la mayor parte de su desnudez de mí. Puedo ver sus botoncitos a través de la delgada tela, y es un destello de lo que quiero.

-¿Y eso?- digo, apuntando a la camisa.

-No es preciada para mi- dice, mordiendo su labio.

Es un poco provocador, y lo sabe. Doy un paso al frente, agarrando el frente en mis grandes puños, y la rompo por el medio haciendo saltar los botones. Él no esta usando nada debajo, su hermoso cuerpo desnudo esta presentado ante mí. Gruño audiblemente y me sorprendo incluso a mí ante el sonido.

-A la cama. Y coloca una almohada debajo de ti.

Se da la vuelta mostrando su redondeado trasero, y debo apretar mis puños a mis lados. Sigo recordándome que debo ir lentamente, pero debo tenerlo. No hay tiempo para juegos previos. Cuando estoy desnudo, me paro al final de la cama, mirándolo. Tomo mi polla con ambas manos y empiezo a masajearla. La longitud dura como una roca necesita liberarse un poco antes de tomarlo, así que lo dejo mirar mientras me complazco a mí mismo.

Él esta en medio de la cama, con su cabello dorado alrededor suyo. La almohada bajo su exuberante trasero alza sus caderas y me ofrece una perfecta visión de lo que quiero. También inclina sus caderas hacia atrás para que mi semen no se salga cuando lo llene. Él se quedaría en esta posición por los próximos días si por mí fuera. Le haré el amor solo en esta posición y lo abrazaré así mientras duerme. Lo alimentaré de mi mano para que no pase hambre mientras tiene a mi bebe en su vientre. Soy un jodido perverso por él.

-Abre las piernas.- ordeno. Debería ser más suave con él ahora, pero lo quiero demasiado. La necesidad por él está calándome, y no puedo contener más esto.

Hace lo que digo, y veo su culo suave y rosa. Gruño de nuevo mientras froto mi polla, sintiendo la semilla subir a mis testículos y rogarme por salir de mi miembro. Él me observa, y sus ojos se abren con emoción.

-Tócate, mi príncipe. Quiero ver tu dulzura derramarse antes de entrar en ti.

Él lleva su mano temblorosa entre sus piernas y duda mucho antes de tocar su hermoso pene. Después de un segundo se toca tentativamente, pero solo un momento antes de rendirse.

-¿No te gusta tu propio toque?

Jimin niega y se lame los labios.

-Me gusta cuando tú lo haces.

Mi polla palpita con mi corazón ante sus palabras. Está palpitando con necesidad.

-Claro que si. Porque mi toque es posesivo, y es el único que conoces. Te posee.- acaricio mi polla un par de veces más, y siento que me desmayaré del dolor.- Pero eres quien me permite tocarte de esa forma. ¿Ves lo duro que estoy por ti? ¿Ves el control que tienes sobre mi? Tu culo podría ordenarme derrocar un imperio. O gobernar uno.

Miro mientras su mano regresa a su pene y lo intenta de nuevo, frotando pequeños círculos alrededor del glande hasta que el placer empieza a filtrarse.

-Eso es, mi príncipe. Muéstrame el poder que tienes entre tus piernas.

Doy un paso hacia él y veo el néctar brillante de su pene. Esta listo para mi. Me subo a la cama y tomo la mano que tiene en su pene. Llevo sus dedos a mi boca y los succiono. Me muevo entre sus piernas y froto la cabeza de mi polla por toda su entrada para mojarla. Una vez está resbalosa con mis jugos, presiono en la entrada virgen e inclino mi gran cuerpo contra el de él.

Tomo su boca en un beso que traiciona la tensión en mi cuerpo. Lo deseo ferozmente, pero estoy esforzándome para no lastimarlo. Mientras su lengua sale a probar la mía, empujo por competo en su interior, y mi polla lo estira a toda su capacidad. Él deja salir un lloriqueo contra mi boca, y lo beso más profundo para distraerlo del dolor. Nos besamos por tanto tiempo, que ambos nos olvidamos de movernos. Pero cuando se mueve debajo de mí, se que esta intentando ver si toda vía le duele. 

-Perfecto, mi príncipe. Perfecto.- susurro en su oído mientras entierro mi rostro en su cabello.- Te quiero , Jimin.

Él envuelve sus brazos al rededor de mi cuello y me sostiene.

-También te quiero, Yoongi. Hazme el amor.

Lentamente hago lo que él me pide y salgo de él. Vuelvo a empujar, más firmemente esta vez, y aprieto mis dientes para evitar correrme tan pronto. Empiezo un lento ritmo saliendo y volviendo a entrar en su estrechez. Toma un rato, pero después de un tiempo es capas de tomar toda mi polla. No hay espacio dentro de él que no haya tocado, y eso ahora me pertenece. Envuelvo mis brazos alrededor de su espalda y lo abrazo contra mí mientras arremeto dentro de él y escucho sus gritos de placer. Agarro una de sus nalgas y agarro sus caderas más fuerte. Quiero dejarlo embarazado la primera vez que hacemos el amor.

-Yoongi. Mi rey, por favor. Estoy muy cerca.

Quito la mano de su trasero y la muevo entre ambos para tocar su suave y duro pene. Lo froto firmemente y empujo dentro de él, siento sus piernas aferrarse a mi con fuerza.

-Eso es. Justo...

Sus palabras son interrumpidas mientras gritos de placer salen de su garganta y hasta mis oídos. Los sonidos solo son suficiente para hacerme llegar al límite. Me quedo inmóvil, muy sensible a sus paredes aplastando deliciosamente mi polla mientras me corro dentro de él. Es la sensación más genial de mi vida y no quiero que se detenga jamás.

-¿Qué fue eso?.- dice Jimin, resoplando incrédulo.

¿No es adorable cuando hace eso?

¿Qué fue qué, mi príncipe?

-Eso fue como nada que hubiera imaginado. ¿Podemos hacerlo otra vez?

Me río con el y siento su cuerpo menearse debajo del mío. Salgo solo unos centímetros y luego empujo mi larga longitud dentro. El orgasmo no tuvo efecto en mi polla.

-Tantas veces como desees, mi príncipe.

 Su príncipe  |Yoonmin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora