UNA HISTORIA DE NOVELA

CAPÍTULO 8

GIANNY 17

Terry no le había hablado después de eso, ni aun después de comunicarle que tenían que partir esa misma tarde a casa ya que se había logrado la alianza entre los socios de Asia, quienes habían partido esa misma mañana a su hogar.

Candy no sabía que decirle para poder iniciar una conversación civilizada, aun no comprendía que había pasado y aún tenía esa extraña sensación de decepción hacia Terry por lo que le había soltado sin ningún filtro.

"Pero tú se lo has insinuado...¿Ahora qué quieres?.

Se dijo mientras le lanzaba una mirada a su asiento para verlo aparentemente dormido, bueno intentaré arreglar las cosas después, ordenaría sus ideas y buscaría las palabras correctas para disculparse si fuera el caso.

A la mañana siguiente después de un merecido descanso, Candy se dirigió a su trabajo y siendo recibida por una lluvia de aplausos de todo su equipo se encamino hasta su oficina hallándola vacía.

De pronto volvió a escuchar los aplausos y supuso para quien eran entregados, caminando hasta ellos solo atinó a quedarse perpleja al observar como Terry sonriente ingresaba al lado de Karen, lo vio pasar por su lado sin siquiera saludarla y sentarse en su escritorio ignorándola definitivamente.

Candy respiró hondo e intentando controlar el temblor de sus manos caminó en dirección contraria a su oficina y se dirigió hasta la sala de archivos de la empresa.

Si Terry no deseaba verla ¡Perfecto! se lo haría fácil, tampoco lo vería.

No supo explicar todo el trabajo que se encargó de aparecer en aquel lugar para no salir de allí y ni siquiera mostrarse a la hora del almuerzo, aun cuando la hora de salida llego y todos se hubieran ido ella se hallaba revisando y anotando cifras y números.

----¿Qué haces aquí?.- La voz grave de aquel la hizo saltar del susto y mirando a sus espaldas simplemente continuó su trabajo no sin antes explicar su presencia.

----Estoy revisando datos para ingresarlos en el sistema.

----Pero ese no es tu trabajo.- Dijo él mientras ingresaba y tomaba algunos de los archivadores.

----Lo sé, pero es mejor si yo lo hago.

Albert la miró con cierta diversión y se atrevió a repasar su figura ahora desarreglada.

----En verdad me sorprendes.- Dijo mientras regresaba el archivador a su lugar.- ¿Hay algo que no puedas hacer?

"Hablar con Terry"

Pensó mientras suspiraba de cansancio y dejaba a un lado el pesado bulto.

----Supongo que habrá algo.- Candy miro a todos lados y después su reloj y negando intentó arreglar su cabello.- Creo que es hora de irme.

----Si deseas te llevo a casa.- Candy lo vio con aquella sonrisa confiable y suspirando una vez más asintió. - Perfecto vamos.

Después de un rato y en el auto de Albert la rubia intentó sacarse la idea de la cabeza de llamar o no a Terry, su mirada que se hallaba perdida entre las calles no pudo centrarse en lo que su jefe le preguntaba.

---¿Candy?.- Candy volvió a saltar al escuchar su voz.- Estás distraída no respondiste a mis llamados.

----¿Me llamaste?...Lo siento.

----¿Pasa algo?.- Dijo el preocupado.

----No, es solo que tengo ideas del trabajo en la cabeza.