XOXO | jinson

CAPÍTULO SEIS

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JINYOUNG

—Espera, ¿por qué le dijiste que no respondiera durante doce horas? — preguntó DoYoung, tomando un largo sorbo de su té de burbujas.

—¿Porque soy un idiota? —Dije, mirándole lastimeramente.

—Eso, o un masoquista.

—¿Por qué no las dos cosas? —Gemí—. Pensé que estaría siendo amable y no lo estaría presionando. Parece un poco nervioso cuando se trata de hacer cosas gay en la vida real. No quería asustarlo.

La semana pasada había acordado quedar con DoYoung para tomar boba el martes por la mañana, así que no sentía que pudiera echarme atrás. Pero cuando me desperté hace tres horas, sin respuesta de Santa, lo único que quería hacer era acurrucarme y recitar la larga lista de fracasos e imperfecciones que componían mi vida.

En lugar de eso, me arrastré fuera de la cama y salí a esta mañana absurdamente soleada y templada de diciembre. El cielo era terriblemente azul y todos los pájaros de la zona de Seúl parecían piar, sólo para restregar lo felices que eran en comparación a mí. DoYoung y yo estábamos sentados en una mesa de picnic fuera del local de boba, y podría haber jurado que la ardilla que acababa de pasar correteando se había detenido para sonreírme de forma odiosa.

—Disculpa si me equivoco—dijo DoYoung—, ¿pero no que el objetivo de que te hicieras un perfil era para que pudieras, ya sabes, hacer cosas gay en la vida real?

—Sí.

—Así que, por supuesto, te las arreglaste para encontrar al único tipo en todo Internet que no quiere saltar a la cama inmediatamente.

—Lo sé —Enterré mi cara en mis manos—. Créeme, lo sé.

DoYoung tomó otro sorbo de su boba y me miró largamente.

—¿Supongo que no hay ninguna posibilidad de que, ya sabes, sigas adelante y hables con otra persona? ¿O de hablar con más de un chico a la vez? ¿Como hace la gente normal? ¿No vas a ir a Busan pronto de todos modos? Si quieres enrollarte con alguien, el tiempo es oro.

Me mordí el labio. Lo que decía DoYoung tenía sentido. No había absolutamente ninguna razón por la que no pudiera hacerlo. Con toda probabilidad, debería hacerlo. Sería lo más inteligente, sin duda.

—Mañana. Voy a hacerlo mañana. Pero... —Le dirigí una mirada de impotencia, y él suspiró.

—Te has encariñado, ¿verdad?

—¡No era mi intención! —protesté—. Yo sólo... DoYoung, es guapo. Y dulce. Y divertido. Y es tan tonto, pero de esta manera entrañable. Y cree que soy divertido. Es muy agradable, en realidad.

—Yo también creo que eres divertido, pero no quieres salir conmigo.

—Bueno, eso es porque tengo estándares.

—Podrías haberme engañado —DoYoung me sacó la lengua—. De todas formas, no puedes decir que es guapo cuando ni siquiera le has visto la cara.

—Pero, tiene una vibra bonita. Un aura bonita. Sus palabras tejen un hechizo de lindura.

DoYoung resopló.

—Y tus palabras tejen un hechizo de que eres-un-jodido-idiota.

—Ya te lo he dicho, sé que parece una tontería. Es una tontería. Su perfil deja muy claro que sólo quiere explorar cosas. Probablemente se asustará antes de que nos conozcamos en persona y correrá de vuelta a la comodidad del armario. Pero yo sólo...