XOXO | jinson

CAPÍTULO DOCE

[✧]

JINYOUNG

Jackson me miró confundido y me apresuré a seguir antes de que pudiera decir algo que no quería —o necesitaba— oír. 

—Está bien. Lo entiendo. Créeme, no necesitas hacerlo, lo entiendo. 

Me miró, con la cabeza inclinada, como si fuera él quien no entendiera ¿De verdad creía que no lo entendía? Sabía lo que iba a pasar y no necesitaba oír el resto. 

Obviamente, Jackson había descubierto anoche —si no antes— que mis sentimientos por él no eran precisamente platónicos. Sinceramente, era sorprendente que hubiera tardado tanto. 

Me pregunté, distraídamente, qué le había hecho caer en cuenta ¿Fue algo que dije cuando fui a despertarlo? ¿Fue la forma en que no podía dejar de mirar su cuerpo? 

Mierda, ¿y si se hubiera despertado en mitad de la noche y hubiera descubierto lo duro que estaba? 

Quería tirarme por la ladera de la montaña. 

—¿Lo entiendes? —Dijo Jackson, como si no lo creyera en absoluto. 

—Sí, lo entiendo. Mensaje recibido, alto y claro. 

—Pero ni siquiera te he dicho...

—Jesús, no necesitas decírmelo —Sacudí mis manos como si estuviera tratando de sacudir el agua de ellas, excepto que no era agua, era energía nerviosa y vergüenza—. No te gustan los chicos, la noche pasada te hizo sentir incómodo, y cuando dijiste que querías que fuéramos amigos, sólo querías decir amigos. Nada más. 

Me aparté de él y miré fijamente hacia los árboles. 

—Siento si te hice sentir como... bueno, fue inconsciente, lo que sea que hice. No me gustas, si eso es lo que te preocupa. No tienes que... quiero decir, ni siquiera eres mi tipo. 

Pude ver a Jackson mirándome por el rabillo del ojo, su ceño fruncido, y luego relajándose lentamente. Finalmente, sacudió la cabeza, como si estuviera saliendo de una ensoñación. 

—Sí. Totalmente. Eso era todo lo que quería... no creía que estuvieras interesado ni nada por el estilo. Sólo... quería asegurarme.

—Bueno, no lo estoy.

—Genial. Cool, cool, cool —Jackson asintió—. Quiero decir, tienes un novio de todos modos. 

Me sonrojé. 

Me había olvidado de JunMyeon por un segundo. A decir verdad, apenas había pensado en él en la última semana, con lo de Santa y Jackson y todo eso. Pero probablemente no era una buena idea perder de vista a tu falso novio, no cuando estabas mintiendo a todos los que te rodeaban diciendo que aún tenías una relación.

—Bien. Sí. JunMyeon y yo... sí.

Miré hacia el bosque, preguntándome cuánto tiempo tardaría la gente en encontrar mi cuerpo si simplemente corría hacia el bosque para esconderme del desastre que había hecho de todo. 

—Y tienes una novia, o lo que sea —añadí. No estaba seguro de cómo llamarla, la chica de la que Jackson no quería hablar—. ¿Qué pasa con ella de todos modos? ¿Por qué es un secreto?

—Ella no es un secreto —dijo Jackson con fuerza. 

Tal vez no, pero seguro que no le entusiasmaba hablar de ella. Si hubiera sido una mejor persona, no habría indagado. Pero quería alejar el foco de la conversación de mí.