𝐀𝐋𝐂𝐀𝐍𝐙𝐀𝐌𝐄
𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫┊Lena Hattori, una chica con un talento inigualable, es buscada por varias pandillas gracias a sus habilidades sin embargo, cada que intentan encontrarla, ella se escabulle, escapando sin siquiera ser vista. Lena s...
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𝐀𝐋𝐂𝐀𝐍𝐙𝐀𝐌𝐄
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TIEMPO ATRÁS
— Dejo la pandilla. — Fui directo al grano, no quería perder más tiempo.
— ¿Qué dices? — Preguntó.
— Ya no quiero formar parte de la pandilla sin embargo, eso no quiere decir que te odie o los odie, espero poder seguir siendo amigos. — Confesé.
— Respetaré tu decisión, si en algún momento quieres volver, serás bienvenida. — Sonrió el chico frente a mi.
ACTUALMENTE
— Pensé que me darías diversión pero creo que solo perdí mi tiempo, que decepción. — Murmuré.
¿Dónde estaba? En un campo abierto, donde normalmente se llevaban combates callejeros, los mejores asistían pero aquello era una mentira, ninguna de mis oponentes logró darme un golpe, en cambio por mi parte los había dejado inconsciente en el suelo, a excepción del líder, a quien torturaba lentamente.
— ¿Me oyes? — Pregunté, ladeando la mirada levemente.
Él tosió. — M-Maldita perra... S-Soy miembro de la ToMan, la pandilla m-más temida, e-esto no quedará así. — Murmuró, su rostro estaba lleno de sangre.
— ¿Ha si? — Estaba sentada sobre su abdomen, me incliné escasamente para verlo mejor, manteniendo una sonrisa en mis labios. — Ni aunque vinieran todos los capitanes de las divisiones lograran derrotarme, mucho menos aquel chiquillo llamado Invencible Mikey.
Tenía confianza en mis habilidades, hasta ahora no había nadie quien lograra mantener una pelea, anticipar los movimientos de mi oponente era mi especialidad.
— Y-Ya verás m-maldita. — Amenazó.
Proporcioné otro fuerte golpe en su mejilla, provocando que escupiera sangre.
— Kiyomasa, tu y tus compañeros son una decepción, deberían entrenar más. — Murmuré.
De repente no muy lejos se escucharon el tronar de motocicletas, no era una, sino varias, entre ellas reconocí perfectamente el motor de una en especial, chasqueé la lengua y me levanté, comenzando a alejarme.
— Nos veremos pronto Kiyomasa, espero la próxima si me diviertas un poco. — Finalicé.
Me subí a mi motocicleta, encendiéndola, di por última vez una mirada a los cuerpos ensangrentados en medio del campo, esbozando una pequeña sonrisa satisfecha con el resultado, sin más partí, yéndome por otro camino para no pillarme con los que venían llegando.
。。。
La moto de Mikey hizo acto de presencia en el campo, seguido de él se estacionaron seis motocicletas más, todos fueron testigos de lo que vieron, en el campo no había más que cuerpos cubiertos de sangre, muertos no estaban de esto estaban seguros, Mikey chasqueó la lengua.
— Llegamos tarde otra vez. — Suspiró de frustración.
Llevaba días con el mismo objetivo y no solo él, los demás también querían conocer a la chica capaz de acabar con una manada en solo un tiro.
— Posiblemente los vuelva a atacar o también puede que tenga otro objetivo. — Agregó Draken.
— Tendremos que separarnos y vigilar las zonas de nuestro territorio, debemos encontrarla antes de que lo hagan las otras pandillas. — Anunció Mikey.
— Esa chica es increíble. — Baji tenía una leve sonrisa en sus labios, mostrando su colmillo.
— Ya quiero conocerla y pedirle que tengamos un combate. — Comentó Smiley, sonriendo amplio.
。。。
Llegando a casa, dejé la moto dentro del garage, seguidamente me metí a casa, soltando un suspiro, esto de escapar comenzaba a divertirme, conocía a la mayoría de bandas que intentaba acercarse aunque actualmente no estaba interesada de formar parte de alguna. Bostecé, sirviéndome un vaso de agua, tenía sed, terminando por beberlo me fui al baño para darme una ducha y así limpiar la sangre que me había saltado encima, lo bueno de todo es que mi madre trabajaba fuera, por lo que, dependía por mi misma totalmente, ahorrándome las regañadas.
Después de un rato de acabar, me coloqué ropa cómoda, volví a la sala, yendo hacía a la cocina, revisé algunos muebles y saqué ingredientes para preparar mi cena.