Estaba en la casa acostada viendo televisión en lo que llegaba Taehyung, eran las 10 de la noche y todavía no había llegado y tampoco había respondido a mis llamadas, entonces decidí esperarlo despierta.
Pasaron unos treinta minutos, en ese momento escucho sonar la puerta, en cuanto me dirijo hacia esta y la abro, lo veo sosteniéndose de la puerta, acompañado de uno de sus amigos.— Mi amor... Ya estoy aquí. – A penas podía sostenerse de pie y ni siquiera podía hablar, me sonreía y miraba, su aliento a alcohol se podía sentir hasta adentro de la casa, le brotaba como nunca antes.
Jamás lo había visto así, sí habíamos tomado antes y nunca se había puesto así, pero hoy estaba más tomado de lo normal.— Gracias por traerlo. Puedes irte y perdona la molestia. – ignoré lo que Taehyung y agradecí a su amigo por traerlo. Después de que se fue, sostuve como pude de los brazos, cerré la puerta con los pies y nos dirigimos hasta la habitación donde lo dejé caer en la cama.
No podía caminar, a penas arrastraba los pies por todo el lugar, en especial porque era muy pequeña para el tamaño de él, pero aún así pude llevarlo hasta la cama. Estando ahí, le quité los zapatos y me le senté al lado.
— Tae...
— hmm...
— Tae...
— Hmm...
— Taehyung, cariño...
— ¡He! – responde por fin, moviendo la cabeza con dirección hacia mí, pero medio dormido y pone su mano en el muslo de mi pie derecho.— ¿Me puedes decir dónde estabas? Me dijiste antes de salir de aquí que irías a trabajar y llegas a la casa todo tomado y sin poder caminar.
— Ay, mi amor, ya... Ya lo dijiste, estaba tra-trabajando.
— Entonces explícame, por favor, ¿por qué viniste, mejor dicho, te trajeron tomado?
— Lo que... Lo que pasa es que hicimos un episodio de Run y pues nos tocó tomar alcohol.
— Ya. – digo de brazos cruzados mientras lo miro casi dormido. – Mañana tú y yo hablaremos esto mejor. Mientras, descansa. – en cuanto digo esto, me acuesto a su lado y nos arropamos. Cuando estoy a punto de cerrar los ojos, suena el timbre, ruedo los ojos y me vuelvo a levantar.
Cuando abro la puerta veo parado frente a mí a Jimin.— ¿Jimin? ¿Qué haces aquí a estas horas y borracho? – él apenas podía mantenerse de pie y cae en mis brazos de repente.
— ¿Y.. y Taehyung?
— Está acostado, llegó hace unos minutos, pero no has respondido a mi pregunta. – no hizo más que ignorarme y entró como si la casa fuera de él, se dirigió hasta la habitación y se acostó al lado de Taehyung. Lo tenía abrazado como si fueran parejas, hasta una de sus piernas le rodeaba la cintura, se supone que eso es lo que yo debería de haber hecho en eso momentos, pero no me tocó más que dormir en la habitación de invitados de la casa, ya que los dos señoritos habían invadido la cama por completo, con decir que los dos duermen malo, era más que obvio que no podía dormir junto a ellos, toleraba a Taehyung porque es mi pareja pero los dos ya era el colmo.
Después de cerrar la puerta, me dirigí hasta la habitación, cogí la almohada que usaba para dormir y me fuí a dormir en la habitación de invitados.
Al otro día, me levanté toda adolorida, ya que no había podido dormir bien, en especial porque fue en un mueble, cosa que tenía mucho que no hacía. En fin, me levanté temprano, me fuí a bañar y cepillar los dientes en el baño para invitados, solo que antes entré a la habitación en busca de una ropa ponerme, cuando entré, los dos estaban ahí todavía tirados durmiendo abrazados en la cama, suspiré profundo, traté de calmarme, los ignoré y busqué lo que necesitaba.
Después de que terminé de bañarme y vestirme, fuí a la cocina, preparé el desayuno y dos vasos de agua con bicarbonato para la tremenda resaca de las almas gemelas que permanecían acostados como esposos en la cama. Dieron las 9:05 de la mañana, así que fui a despertarlos porque tenían que ir a trabajar y todavía estaban acostados.
Entré a la habitación y con la almohada que había usado para dormir en el mueble empecé a golpearlos.
— ¡Hey! ¡Jimin! ¡Taehyung! ¡Despierten! – les grité una y otra y otra vez hasta que por fin se movieron. – ¡Despierten par de borrachos los dos!
— ¡Baby! ¿Qué pasa? – pregunta mientras se intenta sentar en la cama y se acaricia los ojos para poder verme. – ¿Por qué gritas?
— ¿Que por qué grito? Taehyung, son las nueve ya y todavía no te has levantado de la cama para ir a trabajar y todo por esa borrachera. – digo tirando la almohada en su cara mientras me cruzo los brazos. Lo miro seria, se da cuenta de que no estoy contenta con lo de ayer y comienza a hacer aegyo.
— ¡Baby! No te enojes, solo fue por trabajo lo de la borrachera con los chicos, si quieres pregúntale a los demás.
— No quiero hablar de eso ahora, mejor levántense y vayan a bañarse los dos, ya les preparé el desayuno y un vaso con agua y bicarbonato,eso les quitará la cruda que cargan los dos.
— ¿Cómo que... ¿Jimin? ¿Qué haces aquí? – al parecer no había notado que Jimin había dormido junto a él y en cuanto me escuchó decir los dos, puso cara de desagrado y confusión y miro hacía donde se encontraba Jimin aún dormido y arropado bocaabajo.
En cuanto le habló, Jimin levantó la cabeza confundido y pasó una de sus manos por la cara para poder ver lo que ocurría en la habitación.— ¡Taehyung-ah! ¿Qué haces aquí en mi casa? – le pregunta mientras se sienta en la cama.
— No, sería, ¿Qué haces aquí en mi casa? Porque hasta donde yo sé, a mí me trajo uno de lo chicos del estudio y te dejé en la empresa.
Mientras ellos empezaron a discutir quién estaba y quién no, los minutos corrían y el tiempo pasaba, yo solo los observaba.
— ¿Ya terminaron de discutir? Porque mientras lo hacen, el tiempo pasa y el desayuno se enfría. – les reclamo con mi pose de embarazada como la de Yoongi. Los dos dejaron de discutir y me miraron al mismo tiempo, luego se levantaron rápido de la cama y cada uno fue a un baño diferente, Tae entró al de la habitación y Jimin fue al baño de la habitación de invitados.
Mientras Jimin se vestía en la habitación de invitados, yo terminé de arreglarme y mientras lo hacía, veo salir en toalla del baño a Tae para luego seguir haciendo lo que hacía. En cuanto notó que no le puse mucha atención, se me acercó.
— Baby...
— Baby...
— Baby...
— ¡T/N!
— ¿Sí, Taehyung? – le respondí en cuanto me llamó por mi nombre y cuando vió que hice eso, puso cara de asombro y decepción mientras llevó su mano derecha al pecho.— Estás enojada, ¿Verdad? – empezó a chocar sus dedos índices mientras hacía cara de cachorro arrepentido.
— No, ¿Cómo crees?
— Al menos mírame a los ojos y dímelo. – hago lo que me dice. Respiré hondo y exhale para luego mirarlo fijamente a los ojos seria.