Me alegro que hayas ganado esta batalla, ahora que ya has recuperado el trono, no veo porque quedarme
—¿Que dices? Tú me ayudaste, si no hubiera sido por tí no lo habría podido lograr sola
—Debes entender que yo no soy libre para amarte Druscilla, el creador, nos creo para un papel y no puedo romperlo, porque entonces yo no existiría
Balam desaparece frente a mi como el humo al deshacarse. ¿Porque nada puede ser perfecto?
—Felicidades, conseguiste lo que buscabas
Escucho una voz peculiar, escucho a Lilith detrás mío y al darme la vuelta la veo hermosa, pero con un extraño semblante de humildad
—Quiero contarte algo que nunca le he contado a nadie, algo que solo guardo para mí, algo que quizás necesito contárselo a alguien
—¿Lilith? Que sucede
Se sienta en frente de mi, truena sus dedos y en un segundo estamos en un ambiente forestal, con un cielo amarillo y rojizo, con mucho espacio alrededor y césped
—Para empezar, no soy reconocida como Eva, nunca lo fuí. Solo fui un experimento que no funcionó, al ser creada de manera individual tenía conmigo a un sujeto por el cual no me sentía atraída, el era agradable, inocente y torpe, pero yo era muy diferente a el, las diferencias entre nosotros eran tan grandes que no había química, pero le hice compañía, en las noches más frías me acurrucaba pensado en para que había venido, hasta que una mañana antes de que mi compañero despertará ví a un sujeto sexy, lindo su nombre era lucifer, Lucifer era todo lo que buscaba, el era lo más hermoso que había visto en mi vida, era como yo y diferente de manera que nos pudimos complementar bien, deje a Adán, seducida por Lucifer o como muchos en la tierra lo conocen y temen de el Satanás, pero nadie en verdad lo conoce, abandone al compañero que me fue asignado y me quedé con Lucifer. Tiempo después mi creador creo a Eva de la costilla de Adán ¿Eso no quiere decir que de alguna forma son hermano o primos? Ella por supuesto era diferente a mí, ella si era el complemento perfecto de el, mansa, eran el uno para el otro, a los dos se les estipuló la regla de no ir a un jardín en específico, porque en ese jardín era el único donde los que nos encontrábamos en tinieblas habitabamos, era un lugar prohibido pero era una tentación, y desde ahí descubrí que Eva no era tan diferente a mi, después de todo también fui humana y sobre todo ambas mujeres y llenas de curiosidad, empecé a cantar, a cantar dulcemente de manera que podría atraer a Eva al bosque prohibido, no pensé que ella entraría pero lo hizo, me di cuenta de lo bella que era, sus ojos azules y su cabello castaño oscuro, su piel morena, me pareció única porque era la primera mujer que veía, ni siquiera podía ver mi propia imagen en un espejo hasta que con Lucifer descubrí cosas diferentes, cosas que me permitieron aprender, llenarme de sabiduría, entendimiento y pude ver mi imágen con magia avanzada, magia que ninguna bruja humana es capaz de lograr, me había convertido en sirena estaba en un lago mientras había árboles de frutos distintos, quieres saber lo que me dijo Eva?
—¿Que dijo? —Respondi sumergida en la historia
—Que era bella, que era algo fuera de este mundo pero que brillaba con mi propia luz, ella tampoco había visto una mujer en su vida y le mostré un espejo donde ella pudiera ver su rostro, su sorpresa fue evidente, se sonrojo y dijo "Soy hermosa" —sonreí porque el solo escucharla decir aquello como una niña con cuerpo de mujer me causaba gracia y ternura, puede que pienses que esto empieza a ser un poco lésbico pero la sentía más bien como una hija, o un descubrimiento interesante; le dije "Si quieres saber más cosas, vuelve pronto Eva, vuelve al atardecer, cuando tú marido duerma, cuando el no escuché ven", la cara llena de dudas y esos ojos llenos de emoción me hicieron sentir tan bien, en eso yo prepare un fruto, dónde al ella probarlo y quién fuera descubriría la verdad de muchas cosas, les quería dar entendimiento, y así mismo para mí sorpresa Eva volvió y yo le entregué aquel fruto, le dije que comiera de el, que el futuro estaba en sus manos y lo hizo, en ese momento su semblante cambio, ya no era la mujer mansa de Adán, por supuesto consiguió que el probará del fruto y el tampoco fue ese hombre torpe, inocente y simpático, se había convertido en un hombre de verdad. El creador no estaba contento con mis movimientos, los maldijo por esto, aunque ellos no tenían culpa, castigo a ambos y los hecho a otro de sus tantos mundos. Yo ya no era humana al haberme ido con Lucifer, me había convertido en un demonio más, el y yo tuvimos un hijo Belial, sabía que él tenía un lado curioso como el mío y amable, no sé de dónde saco eso pero termino siendo así, no lo amo en el sentido que tú crees, lo que te dijo Balam fue algo que le pedí que te dijera para que lo olvidarás, le tuve que explicar muchas cosas, ya que como madre no quiero que mi hijo sufra.
—Ya veo
—Pero tu y Balam harían buena pareja, excepto porque tú no eres ni humana ni demonio, eres todo menos eso, y las naturalezas de ambos son diferentes.
—Es como si me atrajeran los seres imposibles.
—Eso es porque en el fondo, tienes ese toque humano que todos tenemos. Te confesaré que fue divertido hacerte creer que mi propio hijo me gustaba y como lo creíste
—Pero el no lo sabe?
—No y me gustaría que lo mantuvieras en secreto, no es algo que me gustaría revelarle, creo que en este caso si el sabe la verdad podría afectarle
—Pero tu, la demonio que consiguió que Eva comiera de un fruto para saber la verdad ¿cómo puedes?
—Es diferente, porque el es sangre mía, se que me equivoqué, quizás lo hice, quizás fue así o quizás hice lo correcto, hasta ahora solo puedo decirte que no me arrepiento de ninguna de las decisiones que he tomado y no quiero que Belial lo sepa nunca, Solo te estoy pidiendo eso
—Esta bien
—Druscilla, tu tienes algo, algo importante que no se que es, y debo admitir que eres el único ser que me da la sensación de un deja vu, pero no sé que eres, no sé tu propósito, tienes algo especial de una manera que no sabría explicar y no es solo por alagarte, quizás si te digo esto, te ayudará en algo
—En verdad me alagas
—Lamento si te asusté antes
—Un segundo, por lo que contaste, seguirás contándome más de tus historias? De las cosas que viviste?
—Es posible si aún me queda tiempo, podemos conversar de lo que sea y ahora que no eres un peligro mejor
—Eso estaría bien
—Otra cosa que quería decirte es que me gustaría que Belial te vea y que ambos puedan conversar
A continuación Lilith en un chasquido hace que aparezca un portal y de ahí al ser abierto entra Belial con ojos tan abiertos, mostrando su sorpresa evidente al verte
—¿Druscila? Hace tiempo que no te veía
—Yo-o-o... —Solo podía balbucear
—¿Me recuerdas?—Claro que te recuerdo
—Pero yo creí que nunca me recordarías, como es posi.
Observo a Lilith quien sonríe y me doy cuenta de que aunque ella no me dijo que el aún me recordaba era obvio que si, también me doy cuenta de su lado juvenil o infantil.
Abrazo a Biel y le digo
—Te extrañe Biel, pero quiero decirte que para mí eres como un hermano, no quiero que haya algo más que una fuerte amistad
—Yo creí que nos gustabamos
—En un buen sentido, pero lo hemos malinterpretado por mucho tiempo, solo somos esto y nada más
Le doy un beso en la mejilla
Y el me dice
—Sere todo lo que tú quieras Druscilla, porque para mí siempre serás mi mundo
—Aun puedes explorar otros mundos y adueñarte de ellos
Digo esto último sonriendo.
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Oscuridad Indestructible
FantasíaSegundo libro de Oscura seducción sangrienta prefacio Brindame un deseo porfavor. Era lo que pedía en silencio, solo eso y nada más quería tener la dicha de revertirlo todo, después de las catastrófes solo había una cosa, sueños, esperanzas, de las...