7- Cómo robar un beso. Una guía por Dean Winchester

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De acuerdo, tenía que ser fácil… no tan complicado, ¿verdad?

Estaba listo, realmente , realmente listo .

Dean casi dijo Te amo en el Purgatorio, ¡maldita sea! Lo iba a decir, si Cas no lo hubiese interrumpido de esa manera.

La respuesta a la pregunta ¿Por qué Cas hizo eso? Era un claro e indudable porque no había tiempo para eso. Y punto.

Dean sabía que Cas lo amaba… al igual que él. No tenía la confirmación, pero ... simplemente lo sabía.

Entonces… el momento era ahora . Necesitaba hacer algo. Algo enorme. Algo descarado. Y tenía que ser esta noche.

Sam y Jack salieron a cazar. Y Cas y él estaban solos en el búnker ... era hora de alguna estrategia ...

Dean miró su reflejo en el espejo de su habitación. Su mirada decidida, su corazón latiendo como loco. 

- ¡Está bien, Dean Winchester, estrategia de ladrón !- Se susurró a sí mismo.

Encontró a Castiel en la cocina, leyendo un libro. El cazador se detuvo en seco y tragó saliva con nerviosismo. Luego tosió para llamar la atención de Cas, y cuando tenía los ojos entrecerrados del ángel sobre él, hizo una mueca de dolor.

- Oh ... Maldita sea ... me siento tan agotado, creo que tengo fiebre o algo ...- puso una mano sobre su frente, espiando por el rabillo del ojo, mientras Castiel se acercaba preocupado a él. 

El cazador trató de repeler la sonrisa ficticia que quería aparecer en sus labios.

- Déjame ver - pidió el ángel, presionando un dedo en su frente.

¡Esa era la señal!

El cazador trató de cerrar la brecha entre ellos con los ojos cerrados, preparando sus labios para robar un beso pero Castiel se dio la vuelta ignorando el movimiento, estaba tan concentrado en su diagnóstico que nunca notó las intenciones de Dean.

- Estás bien, pero tus pulsaciones son altas -  dijo el ángel caminando hacia la cocina: - Tal vez si preparo un té de hierbas para ...- Castiel se movió y encontró a su amigo con los labios fruncidos en un beso invisible que nunca sucedió, con los ojos bien abiertos. El ángel ladeó la cabeza: - ¿Te pasa algo en la boca? ¿Te duele?

Dean se dio cuenta de que sus labios todavía estaban esperando, así que los presionó en una línea angustiosa y tosió con torpeza.

- No, no, ahmmm, el té de hierbas está ... bien ...- el cazador evitó la mirada perpleja de Cas y se sentó a la mesa, con decepción en su rostro.

Destiel One Shot Collection (Volumen IV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora