A Crystal Dream [Kingdom Hearts] | Val [Remake]

7 | De White para White

OS LO PIDO Y DIGO ENCARECIDAMENTE.

SI QUERÉIS DISFRUTAR ESTE CAPÍTULO COMO SE DEBE, NO LO APRESUREN, LÉANLO LENTAMENTE Y PORFAVOR, DE VERDAD, PONGAN VECTOR TO THE HEAVENS ORCHESTRA, LE DA TODO EL AMBIENTE AL CAPÍTULO.

YO SE LOS ADVERTÍ. ESPERO LES GUSTE💜✨

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     • Xion pov's •

II. Campanadas de papel.

     — ¡Dile que espere, bajo enseguida! — grité, respondiendo a la rubia desde la habitación.

     Abrí mi clóset con cuidado y con muchos nervios encima. ¿Será que papá finalmente me compró una pistola para pegarme un tiro por haber sido tan idiota y aceptar la propuesta de Naminé de celebrar mi cumpleaños? Espero que así sea, porque de no serlo, creo que me decepcionaré enormemente de mi progenitor.

     Hay pocas cosas en el mundo que me motiven y cautiven más que un regalo de cumpleaños de mi papá. Cada año ha sido diferente. Me ha regalado desde un peluche, que aún conservo sobre mi cama, hasta un paseo con él al parque de diversiones que está a las afueras de la ciudad. Admito que este último regalo, el de mi cumpleaños dieciséis, fue el que menos me gustó. No es por despreciar la intención ni nada, en lo absoluto, recuerdo bien que me hacía muchísima ilusión ir a uno de esos parques y ver si era como lo retrataban en las películas. El problema llegó cuando estábamos a punto de irnos, y en un acto de insensatez tremenda por mi parte, nos subimos a la montaña rusa que tenía por nombre "Descenso maldito".

     Bien ganado que tiene el nombre la muy maldita, porque esas caídas en picado las aborrecí con mi alma entera, y sinceramente, fuera de cualquier broma, creo que preferiría haberme hecho amiga de las estúpidas de mi curso antes que subirme a esa cosa. Los gritos de la gente, la vista tan absurdamente abstracta que recibían mis ojos al moverse en la atracción mecánica y la sensación de vacío en mi estómago, me hicieron vomitar en el baño del parque y después volví a hacerlo tras llegar a casa.

     El día siguente a aquello juré a papá que por muy buenas que estuvieran las manzanas con caramelo, jamás volvería a poner un pie en un parque de atracciones en mi vida, cosa que él entendió perfectamente y le hizo sentir un poco de culpa.

     — ¿Y esto qué es? — pregunté, tomando la cajita decorada de blanco y negro que había sobre mi ropa —. Vaya, una cinta calipso no desentona para nada con la caja.

     Reí un poco. Estas son las cosas que definitivamente solo mi padre puede hacer, aunque me sorprende que no haya sido de color rojo o un amarillo chillón.

     Había una pequeña tarjetita sosteniendo el lazo.

     — A ver qué pone ahora... — sonreí mientras la tomaba —. "Para Xion White, de Papá y...".

     Mi cara palideció al momento.

     — "Mamá..."

     No sé si habrá sido cosa de mi imaginación, pero estoy segura de que el reloj que cuelga en la pared se detuvo por unos segundos.

     — ¿Qué es esto...? — musité, sin creerme lo que acababa de leer —. ¡¿Q-Qué es esto...?!

     Lancé la tarjeta hacia un lado y luego tiré de la cinta, abrí la caja y comencé a revisar las cosas que habían dentro. Sin contar algunos dulces que no pienso tocar por ahora, el resto eran solamente papeles de colores con pequeñas frases, salvo por un pequeño libro en el fondo y lo que parecía ser una carta.